El presidente del Valencia manda callar a Mestalla y denuncia amenazas de muerte

Más leña al fuego. Si la situación del Valencia ya es por sí delicada, esta tarde Anil Murphy se ha encargado de elevar aún más la tensión. El presidente del club, en una reacción surrealista, se dirigió a la afición tras un apagón en el minuto 56 en Mestalla, durante el encuentro entre los 'chés' y el Alavés (2-1), y les mandó callar.

En ese momento los presentes en el campo valencianista estaban cargando contra el palco, en especial contra el máximo accionista, Peter Lim, y también contra el propio Murphy. Toda la grada entonaba al unísono el cántico de "Peter, vete ya" y "Anil, canalla, fuera de Mestalla" mientras agitaban las linternas en un estadio completamente a oscuras.

La reacción de Murphy no se hizo esperar. Primero pidió calma y, acto seguido, mandó callar a la hinchada. Mateu Alemany, director general de la entidad, se giró para ver el gesto de su presidente y no dio crédito. Dio igual que posteriormente volviera la luz, que por cierto se fue cuando el equipo estaba jugando su peor fútbol, los cánticos no cesaron y la afición se vino aún más arriba cuando fueron testigos de la 'provocación' del dirigente.

Más tarde, sobre las 21:30h, el Valencia emitió un comunicado en su web anunciando lo siguiente: "Los servicios jurídicos han puesto a disposición de la Policía las graves amenazas, algunas de ellas de muerte, recibidas en las últimas horas en el teléfono móvil del presidente de la entidad, a efectos de las posibles consecuencias penales que pudieran derivarse de ello". Literal. Murphy anuncia ataques hacia su persona. El Valencia es una bomba a punto de explotar.