La sigilosa rajada del Atlético de Madrid contra el arbitraje del derbi

Simeone regateó la imprescindible pregunta sobre le VAR como pudo. Dijo que el Real Madrd había sido mejor y que el motivo de la derrota no tenía tanto que ver con los errores o aciertos de los árbitros como con la superioridad futbolística del rival. Una declaración elegante, nada polémica, evitando en lo posible cargar más el ambiente contra el vídeo arbitraje, que lleva semanas cuestionados por unos y por otros. El equipo de comunicación del club no parció tan contento.

Cuando ya terminaba el sábado, unas cuantas horas después del partido y también después de las palabras conciliadoras de Simeone y de sus jugadores, publicaron en todas sus redes sociales unas imágenes que ponían en duda la actuación arbitral. El único mensaje añadido, un emoticono de una cara pensativa. La intención era clara, tratar de poner en duda lo realizado por los árbitros con tres imágenes. Una el penalti a Vinicius que Estrada Fernández decidió que estaba dentro y el VAR no le corrigió. Una imagen lejana del fuera de juego de Morata, con unas líneas trazadas en las que podría estar señalado en posición correcta -la realización televisiva general fue muy parca en repeticiones, es de esperar que la que tuvieron en Las Rozas dispusiese de más y mejores planos.

Por último, el supuesto penalti de Casemiro a Morata que ni el árbitro vio ni los asistentes de vídeo rectificaron. Tres pantallazos de la televisión con un objetivo claro, señalar que por más que Simeone estuviese conforme con lo ocurrido, la institución, o cuanto menos su departamento de redes sociales, no se encuentra en la misma línea.