El lío del Cholo Simeone y los tres fallos claves del Atlético de Madrid

El Atlético de Madrid sufrió una severa derrota este miércoles en el Signal Iduna Park (4-0), en un partido en el que el Borussia Dortmund pasó por encima de un irreconocible conjunto colchonero y que no hace más que incidir en las heridas abiertas del Cholo Simeone. El entrenador rojiblanco es consciente de que este año cuenta con una de las mejores plantillas de las últimas temporadas, pero continúa con muchas dudas con respecto a lo que ve en el campo.

El revolcón sufrido en Alemania supone la peor derrota desde que Simeone llegara al banquillo rojiblanco, prácticamente 400 partidos después de fichar por el Atlético. El equipo de Lucien Favre sacó los colores al conjunto madrileño, al que desarboló de principio a fin de partido. Y aunque no es una situación grave -es segundo en Champions y con la clasificación prácticamente hecha, además de quinto en Liga a dos puntos del liderato-, sí confirma que algo no funciona.

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Darío Ojeda

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Simeone continúa dándole vueltas a la cabeza a su equipo. Pese a haber levantado ya la Supercopa de Europa y haber tenido buenos momentos en lo que va de curso, el argentino considera que no ha terminado de dar con la tecla para hacer reconocible a este Atlético. Entiende que aún no ha sabido imprimir el estilo que caracteriza a sus equipos y que, pese a los grandes jugadores con los que cuenta, de momento no ha conseguido hacer consistente su idea de juego.

Tradicionalmente, los equipos del entrenador rojiblanco destacan en el medio del campo. Son combinados muy sólidos en defensa y que saben aprovechar sus oportunidades en ataque, pero en los que la medular se convierte en el verdadero timón. Y ahí es donde Simeone tiene sus principales dudas: no termina de ver un esquema fijo en una posición tan básica para él, donde Rodri y Thomas especialmente entran y salen del equipo sin que parezca haber un titular fijo.

Ante el Dortmund, mucho se criticó el cambio de Saúl. El internacional español sí es uno de los indiscutibles en el medio, pero el Cholo necesitaba vértigo en ataque y decidió sustituirle en beneficio de Correa. En el momento que el interior dejó el campo, la medular perdió fortaleza y se hizo mucho más endeble, momento en el que el Atlético recibió tres goles en poco menos de veinte minutos. Pero las dudas del medio del campo no son las únicas que alimentan la cabeza de Simeone.

Godín, Griezmann y Costa

El entrenador argentino sabe que hay tres piezas claves que están fallando y no rinden como se espera: Diego Godín, Antoine Griezmann y Diego Costa. Los tres jugadores, junto a Jan Oblak y Koke, son la columna vertebral del equipo, precisamente las piezas sobre las que se ha sustentado el éxito 'colchonero' de los últimos años. Pero, de momento, están muy lejos de su estado de forma, una situación que desnuda aún más las carencias del resto del equipo.

Un problema con el gol

Evidentemente, en los últimos años Simeone ha sido consciente de algunos defectos que debía de pulir en su equipo, pero la participación capital de estos tres pilares ha terminado por maquillarla, pero cuando esta terna no funciona, el problema es evidente. Godín sigue lejos de su mejor estado de forma, mientras que los dos atacantes no están muy acertados de cara al gol: el francés lleva 4 dianas en 13 partidos, mientras que el hispano-brasileño suma 3 en 11.

Simeone es un entrenador con mucho carácter, al que le gusta imprimir intensidad desde la banda, pero a quien se le nota con facilidad que no está contento con lo que ve. Este miércoles, ante el Borussia, se le pudo ver más nervioso y tenso que nunca, consciente de que los 'pesos pesados' están lejos de lo que se espera de ellos y de que no termina de dar con la tecla en la medular. La mejor noticia es que el curso es muy largo, ya suma un título, y sigue más que vivo en todas las competiciones.