Torres comienza a despedirse de la afición del Atlético marcando al Levante

Kobe Bryant anunció su retirada del baloncesto con casi cinco meses de antelación, lo que convirtió su última temporada en la NBA casi en una gira de despedida. Fernando Torres aún no lo deja, pero se va del Atlético de Madrid. Lo dijo a comienzos de esta semana. El efecto que ha provocado ese anuncio es parecido a lo que ssucedió con Bryant: cada partido que juegue o cada gol que marque puede ser el último. Pra una afición que lo adora, eso es un motivo más para declararle su amor en público cada vez que tenga la oportunidad, que va a ser en cada partido que juegue de aquí a final de temporada.

El duelo contra el Levante de este domingo era el primero del Atlético en el Wanda Metropolitano tras ese anuncio de Torres. Jugó contra el Sporting de Portugal el jueves en Lisboa y Torres fue de los más destacados, dentro de una actuación bastante deficiente del equipo rojiblanco. En Liga volvió a ser suplente, pero aprovechó sus minutos en la segunda parte para marcar el tercer gol en la victoria por 3-0. Correa y Griezmann habían marcado los dos primeros.

Era el Día del Niño, jornada orientada a los más pequeños que el Atlético organiza cada mes de abril, y el Niño más famosos de todos marcó, para gozo de los aficionados. "De niño a leyenda", decía una pancarta exhibida en el estadio. A eso se sumaron los habituales cánticos y ovaciones cuando salió a calentar.

"Para mí, cada partido de aquí al final va a ser una fiesta", declaró Torres tras el partido ante las cámaras de beIN SPORTS. "Ya hebéis visto cómo se vuelcan los aficionados. Es un aliciente más. Esperemos que este no sea el último gol de la temporada y que no sea el último partido".

Como mucho, a Torres le quedan nueve partidos con el Atlético: seis de Liga y tres de Europa League. Cuatro serán en casa, tres en la competición local y el de la vuelta de las semifinales de la Europa League contra el Arsenal. Si el Atlético elimina al equipo inglés, Torres tendría la oportunidad de luchar por su ansiado primer título con el equipo rojiblanco. Levantar el trofeo el 16 de mayo en Lyon (Francia) sí que sería una fiesta.