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Currar o no currar: Valverde se empeña en recuperar al mejor Muniain
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el jugador empieza a recuperar brillo

Currar o no currar: Valverde se empeña en recuperar al mejor Muniain

Ernesto Valverde quiere recuperar como sea al mejor Iker Muniain, pero para ello ya le ha dejado claro al talentoso jugador que toca trabajar de verdad

Foto: Ernesto Valverde y Muniain durante una rueda de prensa (Reuters)
Ernesto Valverde y Muniain durante una rueda de prensa (Reuters)

“Hay gente que da por acabada mi carrera”. La sentencia, ante el micrófono de la 'Cope', sonó gruesa cuando hablamos de un futbolista de tan sólo 23 años. Pero es lo que siente Iker Muniain. Cuando era un chaval pasó a ser considerado la joya de la corona, la gran esperanza del Athletic Club. Pero esos inicios tan impactantes y prometedores se cubrieron de nubes con el tiempo. Ahora ha llegado el momento de la verdad para el menudo y talentoso jugador. La hora de currar para recuperar el terreno perdido durante un tiempo.

El futbolista parece recuperar el terreno perdido poco a poco. Esta temporada se presenta como fundamental para que Muniain vuelva a ser considerado como antaño por su gente. La figura de Ernesto Valverde se desvela fundamental para conseguir que Iker vuelve a tener peso en la vida del Athletic Club de Bilbao. El buen entrenador ya le ha dejado claro que si no presiona, si no suma en sus piernas esos kilómetros de trabajo sucio, nada tiene que hacer, que no volverá a ser aquel chaval que brillaba tanto en sus primeros tiempos. Parece haber recogido el guante el jugador, que da la impresión que ha iniciado la escalada.

La pasada semana, ni más ni menos que en un derbi vasco, Muniain volvió a conectar con la exigente grada de San Mamés como hacía años, cuando de un día para otro pasó a convertirse en el gran protegido de la afición rojiblanca. Igualó el marcador -la Real Sociedad se había adelantado en el marcador- y selló una completa actuación, como las que antes firmaba como churros. Aquella grave lesión sufrida en una rodilla en abril de 2015 tardó en quedar en el olvido por completo; un largo tránsito hasta recuperar el mejor nivel. En ello está, pero teniendo claro que sólo trabajando, como le exige su técnico, será posible.

Duros juicios

Ahora empieza a escuchar loas a su alrededor, algo a lo que estuvo acostumbrado en lejanos tiempos. Cuando las nubes aparecieron, las críticas a Muniain se multiplicaron por mil. Tiempos en los que perdió brillo, tiempos en los que no progresó como esperaban todos en Bilbao. Duros juicios y análisis que le golpearon la moral, que le hicieron daño por ser cercanas. Ernesto Valverde, tipo de pocos mensajes, pero todos muy claros y directos, quiere que Iker dé ahora, de manera definitiva, ese paso al frente que en el Athletic llevan esperando desde hace mucho tiempo. “Estamos contentos con él”, destacó el técnico de su jugador tras el derbi.

Pasó también algo que dañó a Muniain. Apareció con fuerza Iñaki Williams y los focos pasaron a centrarse en la nueva perla de la cantera. En la medida que el delantero de Bilbao, aunque de sangre liberiana, crecía y crecía, entre la lesión y la recuperación la carrera de Muniain iba perdiendo potencia. Aunque pueden jugar juntos, cada uno por un costado, en algún momento uno ha sido sacrificado. Frente a la Real Sociedad, tras un discreto inicio de temporada, ambos, buenos colegas, volvieron a escuchar palmas a su alrededor.

Con la baja de Aduriz y tras el grave tropiezo sufrido en la Europa League ante el Genk (2-0), está por ver qué hace Valverde en el Santiago Bernabéu. Estelar ante la Real Sociedad, en tierras belgas desapareció Muniain. El entrenador debe decidir qué plan seguir ante el equipo de Zidane, con o sin el pequeño futbolista. Una alternativa es que Raúl García ocupe el lugar más adelantado y por detrás, espacio que ocupa habitualmente el ex del Atlético de Madrid, se plante Iker. Juegue o no, Valverde le sigue apretando para que en algún momento vuelva a ser realmente determinante con regularidad. Y para eso toca trabajar de verdad. El estadio de Chamartín es un buen lugar para ello.

“Hay gente que da por acabada mi carrera”. La sentencia, ante el micrófono de la 'Cope', sonó gruesa cuando hablamos de un futbolista de tan sólo 23 años. Pero es lo que siente Iker Muniain. Cuando era un chaval pasó a ser considerado la joya de la corona, la gran esperanza del Athletic Club. Pero esos inicios tan impactantes y prometedores se cubrieron de nubes con el tiempo. Ahora ha llegado el momento de la verdad para el menudo y talentoso jugador. La hora de currar para recuperar el terreno perdido durante un tiempo.