Es noticia
De "el estilo no se negocia" de Guardiola al "esto es lo que hay" de Luis Enrique
  1. Deportes
  2. Fútbol
el resultadismo se apodera del barcelona

De "el estilo no se negocia" de Guardiola al "esto es lo que hay" de Luis Enrique

El sábado, el Rayo le arrebató el balón al Barça con un 56% de posesión y lo remató en 22 ocasiones, por 14 de los culés, pero el técnico se justificó con la victoria y los 18 puntos que suma su equipo

Foto: Luis Enrique da instrucciones a sus jugadores (EFE).
Luis Enrique da instrucciones a sus jugadores (EFE).

En el FC Brcelona ya no se disimula. La coartada podría ser que les faltan nada menos que Leo Messi e Iniesta, pero les parece mejor agarrarse al “aquí no ponemos excusas por las bajas” que al marcador. El resultadismo al poder, en estado puro, en su máxima expresión. “Esto es lo que hay”, afirmó Luis Enrique en la previa del partido ante el Rayo. Y después, tras perder la posesión de la pelota, cuando un periodista le recordó que el equipo de Vallecas les había creado nada menos que 22 ocasiones de gol, contestó: “¿Sabes cuántos puntos tenemos?”. Así que ahora eso es lo que vale. En apenas unos años, se ha pasado de “el estilo no se negocia” de Pep Guardiola a contar puntos en la tabla y no darle importancia a tener la pelota. Bienvenidos al nuevo Barcelona.

Hace dos temporadas, con el Tata Martino en el banquillo, se lio la marimorena cuando el conjunto azulgrana perdió la posesión en Vallecas después de cinco años sin que nadie fuera capaz de toserles. El sábado en el Camp Nou los de Paco Jémez le quitaron el balón al Barça con un 56% de posesión, mientras que remataron en 22 ocasiones por 14 de los culés. A la respuesta del técnico asturiano en rueda de prensa sobre los puntos en la clasificación de la Liga, hay que sumarle otro argumento, que vendría a ser un 'tampoco es para tanto'. “Contra el Rayo no me preocupa perder la posesión, siempre que generemos ocasiones y marquemos cinco goles como esta noche”, afirmó Luis Enrique. Los cinco tantos son incontestables, por obra y gracia de un Neymar vestido de Ronaldinho y un Luis Suárez incansable, pero las ocasiones fueron del Rayo.

Entre las frases que chirrían teniendo todavía presentes y fresquitas las de la era Guardiola (tampoco hace tanto que se marchó, solo cuatro años), la palma se la llevó Jordi Cardoner, vicepresidente primero del Barça, que soltó: “Lo de la posesión yo no lo acabo de entender. Me quedo con las ocasiones. Tenerla es importante, pero a veces no es suficiente”. De nuevo, argumento falaz porque el Rayo tuvo más que su equipo, pero en sus filas tenía a un tal Neymar en plan aquí mando yo. Todo vale, en fin, para engancharse como los percebes a las rocas y dejar que escampe el temporal. Y mientras, lo que se diga no es tan importante en un equipo y un club que presumía de estilo, esencias, buen gusto y también de valores antes de llevar en la camiseta el patrocinio de Qatar.

Ya ni siquiera hay debate con el modelo. El triplete de la temporada pasada acabó con las dudas sobre el de Luis Enrique. Los apuros económicos y la necesidad de tener a ‘Neymars’ y poder pagarles las mejoras de contrato para seguir siendo competitivos servirán de tesis para que la junta directiva azulgrana apruebe de nuevo a Qatar en la reunión extraordinaria del próximo jueves previa a la asamblea de socios compromisarios. Salvo sorpresa, habrá pocas deliberaciones. En lo deportivo, faltan Iniesta y Messi, y “esto es lo que hay”. En los despachos se hacen sumas y restas y solo cuentan los euros para salir del atolladero de una masa salarial que se les ha salido de madre con un incremento del 40% en el último año.

El nuevo Barcelona, desde luego, ya no es lo que era. Pero, eso sí, algunos números le dan la razón: los tres títulos de Luis Enrique, los 18 puntos en la Liga empatados con el Real Madrid, los cinco goles ante el Rayo (con cuatro de Neymar) y los cuatro puntos de Champions que le otorgan la primera posición en su grupo. Esto es lo que hay.

En el FC Brcelona ya no se disimula. La coartada podría ser que les faltan nada menos que Leo Messi e Iniesta, pero les parece mejor agarrarse al “aquí no ponemos excusas por las bajas” que al marcador. El resultadismo al poder, en estado puro, en su máxima expresión. “Esto es lo que hay”, afirmó Luis Enrique en la previa del partido ante el Rayo. Y después, tras perder la posesión de la pelota, cuando un periodista le recordó que el equipo de Vallecas les había creado nada menos que 22 ocasiones de gol, contestó: “¿Sabes cuántos puntos tenemos?”. Así que ahora eso es lo que vale. En apenas unos años, se ha pasado de “el estilo no se negocia” de Pep Guardiola a contar puntos en la tabla y no darle importancia a tener la pelota. Bienvenidos al nuevo Barcelona.

Luis Enrique Pep Guardiola
El redactor recomienda