Cristiano Ronaldo se empeña en demostrar que está curado y asusta a Pep Guardiola

Cristiano Ronaldo despeja dudas, Ancelotti también. "Si están bien, jugarán los tres, Cristiano, Bale y Benzema. Queremos marcar", sentenció el entrenador. El portugués quería jugar ante Osasuna y demostrar que los problemas que le dejaron fuera de la final de Copa y pusieron en duda su participación en el partido de ida ante el Bayern, eran historia. Si ante el equipo alemán se vio a un Ronaldo al "cincuenta por ciento", tal y como dijo el italiano, frente al equipo navarro, CR7 se acercó a su plenitud física.

"Ronaldo está bien, ha jugado con más confianza que el miércoles. Todo le salió bien". Y es que el grado de confianza del portugués ha crecido en los últimos días. Olvidada la polémica mantenida con los servicios médicos blancos,ya está en manos del doctor Noronha. El galeno portugués es de su confianza y de la de Jorge Mendes -su agente-, y actuará a partir de ahora como médico de cabecera del delantero. Guardiola ya le espera. Un atleta más, pensará.

El pasado miércoles, Ronaldo estuvo en el campo, pero no se dejó sentir. Sus carreras no tenían la habitual velocidad y sus lanzamientos a puerta se perdían en insospechados botes antes de llegar a destino. Sin embargo, ante Osasuna el portugués recuperó alegría, fuerza y, sobre todo, confianza, algo que pudo comprobar en primera persona Andrés Fernández.

CR7 volvió a ser decisivo en el triunfo de su equipo. Arrastró a sus compañeros, abrió el marcador y fue unpeligro constante durante la hora que estuvo en el terreno de juego. Ni un golpe que recibió en un glúteo y que hizo que sonaran las alarmas, fue obstáculo para que el portugués mostrara al mundo que su voracidad sigue latente y en forma. Con los dos tantos de ayer ya suma 30 goles en Liga, poco menos que un tercio de los logrados por su equipo, que ya está en los 98.

La pierna de golpeo en los dos goles fue la derecha, la en teoría libre de toda sospecha, pero la confianza le nace ante la completa desaparición de las molestias en la izquierda. Ante Osasuna jugó olvidando los problemas de la tendinitis rotuliana y del bíceps femoral, tal y como quedó demostrado.

Ronaldo ha demostrado que llega a tiempo para mostrar a Guardiola la cualidad de atleta que tiene, algo que no pudo hacer el pasado miércoles en el Bernabéu. Ese día su cabeza, pese a que se empeñara en decir que sí al término del choque, no le permitió forzar. Sus gestos así lo denotaban. Ayer la historia fue muy distinta.

Con los dos tantos de ayer, Cristiano Ronaldo ya suma 47 goles en lo que va de temporada en partidos oficiales con el Real Madrid. El portugués continúa en cabeza del Pichichi con 30 tantos, a los que hay sumar los 14 en Champions y los 3 que logró en la Copa.