El Atlético busca el liderato ante el Betis sin el fichaje estrella de la temporada

No es fácil subirse en marcha al tren de este Atlético de Madrid, intenso como pocos, en el que el esfuerzo no se negocia. Suele afirmar Simeone que no tiene compromiso con nadie, guiándose únicamente de lo observado en el césped. Deseado desde su marcha, ni siquiera Diego Ribas, solicitado con ahínco por el técnico argentino, ha sido capaz de coger vuelo en este Atlético de Madrid, humilde de rostro pero con alma de campeón. Siempre fue más efectivo que virtuoso Simeone a la hora de elegir los futbolistas que más le pueden dar sobre el césped.

De un tiempo a esta parte al Atlético le cuesta más sacar los partidos adelante. Ya no le miran como un equipo emergente sino que se le plantea el partido asumiendo la superioridad de los rojiblancos. En su primera etapa, Diego Ribas se encontró con un equipo en construcción, más fino a la hora de elaborar pero menos compacto. Aquel equipo, recién llegado Simeone a la entidad rojiblanca, iniciaba un camino que le ha convertido en uno de los equipos punteros de Europa. Un conjunto “incómodo”, como le gusta repetir a Simeone. "Somos competitivos, molestos, un equipo agresivo, intenso, pero también tenemos dificultades y los rivales son muy buenos", declaraba hace poco el técnico argentino a la hora de evaluar las aspiraciones de su plantilla.

Llegado en el mercado de invierno, su puesta en liza coincidió con el tramo más bajo de conjunto rojiblanco, sin chispa y exigido ya desde su afición, entusiasmada al verse entre los dos grandes con menos recursos. “Nos identificamos con la gente”, suele afirmar Simeone. Fue en esa fase donde Diego acusó el tiempo perdido. No supo amoldarse al nuevo molde por más que su técnico le dio carrete en las semifinales de Copa ante el Madrid y posteriormente en partidos donde se imponía bajar la pelota al piso más que ir al cuerpo a cuerpo, como el de Pamplona. Naufragó entonces el Atlético de Madrid y Simeone tiró de la vieja guardia.

Tampoco Villa ha podido mantenerse en el aire en los duelos de alcurnia, marginado en los torneos coperos y echado al ruedo en el campeonato doméstico. En ese tramo emergió imponente la figura de Raúl García, que partiendo desde la segunda unidad ha logrado hacerse con hueco en el once.

Simeone, que antes de entrenador fue jugador, celebró en la clasificación ante el Milan en Champions la posibilidad que le dará la sucesión de partidos de tirar del fondo de armario. “Potencia al grupo porque vamos a tener dos partidos más en la Champions y la posibilidad de rotar en algunos lugares. Eso los que se den cuenta. Los que no, tendrán menos minutos”, declaró en un claro aviso a aquellos que pudieran estar disgustados. "Sin duda, pasan a ser más importantes en este final los chicos que por ahí han tenido menos minutos, porque seguramente entrarán, les tocará jugar y serán determinantes con lo que pase en los resultados", incidió de nuevo en la previa al duelo ante el Betis, capital para seguir agarrando del pecho a una Liga que quiere disputar hasta el final.

El brasileño, a su regreso, se ha encontrado con un sistema de juego en el que el grupo se siente más cómodo y que prescinde de la figura del enganche, lo que dificulta más la posibilidad de explotar sus virtudes. “Cuando jugamos 4-4-2 es porque el partido lo requiere así. El míster nos pone así porque hay que cerrar más o porque hay que atacar por un lado. Diego se tiene que adaptar otra vez, pero poco a poco va a volver a ser el que fue, incluso mejor. Es muy importante para nosotros”, declaraba Koke semanas atrás.

Ante la posibilidad de seguir peleando la Liga, pudiendo salir como líder de la jornada de vencer el equipo de Martino en el Bernabéu y hacer lo propio los rojiblancos ante el Betis, el encaje de Diego en el equipo tiene para Simeone el mismo porcentaje de solución que de desafío en ese crecimiento continuo que demanda el argentino para ser más competitivos.

Alineaciones probables:

Real Betis: Adán; Juanfran, Amaya, Jordi Figueras, Chica; Lolo Reyes, N'Diaye, Nono, Salva Sevilla; Cedrick y Rubén Castro.

Atlético de Madrid: Courtois; Juanfran, Miranda, Godín, Filipe; Arda Turan, Gabi, Mario, Koke; Raúl García y Diego Costa.

Árbitro: Estrada Fernández (C. Catalán).

Estadio: Benito Villamarín.

Hora: 17.00.