Un contraataque saca de las dudas al Atlético más gris en Málaga

Una sola acción de mérito. Una única jugada completada con relativa claridad le sirvió al Atlético de Madrid para romper las dudas que le atenazaron este sábado en La Rosaleda. Sin Gabi ni Raúl García, los de Simeone sólo se reconocieron en el trabajo sin descanso. Mucho oficio, eso siempre. Pero en un partido donde disfrutaron de la posesión como nunca, también se mostraron muy previsibles como pocas veces.

Al final, la contra que culminó Koke evitó que se perdiera el paso de victorias que le permiten abrir la primera jornada de 2014 como líder provisional a espera de lo que haga este domingo el Barcelona, su próximo rival, por cierto. Y el solitario tanto del canterano también despejó los debates sobre la gran diferencia de los estados de forma de Costa por un lado y de Villa y Adrián por otro. O de la nueva oportunidad a Óliver sin final feliz.

Sorprendió Schuster con una rocosa línea de cinco defensas que funcionó a la hora de restar agresividad al ataque atlético, y más concretamente a Diego Costa. Con un sistema tan sencillo, el pichichi provisional no encontraba acomodo entre tanta camiseta blanquiazul y Villa tampoco ayudaba a darle continuidad a una posesión que tenían los rojiblancos asegurada ante el evidente repliegue de los locales.

Si bien, el Málaga supo desperezarse con cierta asiduidad para recoger un puñado de ocasiones, ninguna de ellas muy clara, con las que trató de adelantarse antes del descanso. Simeone consultaba a su ayudante Germán Burgos quizá en busca de la manera de atravesar la maraña defensiva malaguista, que estaba incomodando a los colíderes como pocas veces se ha visto en la presente Liga.

Óliver, sólo 45 minutos

Más por lucha que por claridad ofensiva, ambos equipos tuvieron oportunidades relativamente peligrosas en los primeros 45 minutos, aunque el empate a cero, resultado que había cosechado Simeone en sus dos visitas anteriores a La Rosaleda, seguía en el marcador al descanso.

Óliver, con su desparpajo habitual, había sido quien, junto a Arda, más intentó llevar el balón con peligro a sus delanteros. Pero el canterano sigue alternando acciones interesantes con otras donde su fragilidad le deja en evidencia al arriesgar demasiados balones en zonas comprometidas. De hecho, cedió su puesto en la reanudación a Adrián, en una apuesta ofensiva del Cholo.

Una contra y tres puntos

Se colocó el asturiano en el flanco derecho del ataque, y los laterales comenzaron a tener mayor presencia. El Atlético jugaba para ganar y se notaba en su predisposición pese a su evidente falta de claridad ofensiva. Invitado a dar un paso hacia adelante por la cantidad de terreno cedido por el Málaga, el conjunto madrileño trataba de encontrar un resquicio por el que llevarse tres puntos que cada vez parecían más comprometidos. El paso de los minutos afianzaba la propuesta de Schuster y el público local olvidó los pitidos del principio para aguardar con expectación alguna llegada de mérito de los suyos.

Simeone recurrió a la efervescencia del Cebolla Rodríguez, quien relevó a Arda. El partido, mediada la segunda parte, no tenía ya dueño y el Málaga se creció poniendo en apuros la solvencia defensiva de los visitantes. Adrián, que se había dormido en una clara ocasión unos minutos antes, recogió en su campo un balón pasado con la mano por Courtois. El ‘7’ galopó para iniciar una contra en la que colaboraron Koke, Villa y Costa, el balón le llegó franco en el área al propio Adrián, quien remató, paró Caballero y finalmente Koke hizo el 0-1 recogiendo el rechace llegando desde atrás.

Con el gol, los colchoneros vieron alejarse los fantasmas que había traído la defensa de cinco del Málaga, que por momentos dejó en evidencia la capacidad de todo un aspirante al título liguero. Como el once que había sobre el campo no invitaba a otra cosa, el Atlético siguió atacando los veinte minutos que restaban hasta el final. Simeone se desgañitaba para que su equipo no diera alas a los locales. Al final tuvo que dar entrada al defensa belga Alderweireld por Villa para conseguir dormir el partido y llevarse tres puntos de oro de la Costa del Sol. Tres puntos de esos que se recuerdan a la hora de analizar los éxitos. Porque esta vez el Atlético sufrió, y mucho, para encontrarse a sí mismo.

Ficha técnica

Málaga CF: Caballero; Gámez, Angeleri (Morales, m. 77), Sergio Sánchez, Weligton, Antunes; Darder, Camacho, Eliseu (Duda, m. 65); Samuel y Juanmi (Santa Cruz, m. 65).

Atlético de Madrid: Courtois; Juanfran, Godín, Miranda, Filipe Luis; Arda (Rodríguez, m. 61), Thiago, Koke, Oliver (Adrián, m. 46); Diego Costa y Villa (Alderweireld, m. 84).

Gol: 0-1, M: 70. Koke.

Árbitro: Teixeira Vitienes (Colegio Cántabro). Mostró tarjeta amarilla a los malaguistas Darder (m. 23), Angeleri (m. 40), Samuel (m. 86) y Antunes (m. 89), y a los jugadores del Atlético de Madrid Miranda (m. 9), Tiago (m. 25), Juanfran (m. 53), Diego Costa (m. 76), Courtois (m. 82) y Rodríguez (m. 86).

Incidencias: Partido correspondiente a la decimoctava jornada de Liga de Primera División diputado en el estadio de La Rosaleda ante 30.000 espectadores.