Lopera está, ahora sí, a un paso de vender "su" Betis

Los béticos apuestan a que no, que Manuel Ruiz de Lopera, accionista mayoritario del Betis, no se desprenderá de sus acciones ni a tiros. Otros no están tan seguros. Lo que sí es fijo es que sólo don Manué, y sólo él, será el que maneje los tiempos del cambio de manos de la histórica sociedad.

 

Así, desde hace varios días tres auditores se encuentran a caballo entre las oficinas del club en Heliópolis y en la calle Jabugo, sede/domicilio de Lopera, manejando papeles, facturas y otros legajos documentales. Se ha podido saber que estas personas son de la confianza del empresario Luis Castell, al parecer, interesado de nuevo en la compra del Betis. Este adinerado hombre de negocios ha sido convencido por gente cercana a Lopera y de su confianza que, ahora sí, ahora será la definitiva.

 

Este movimiento se lleva con una gran prudencia y discreción, pues Lopera no quiere levantar la libre ni poner en guardia a su numerosa oposición.

 

Al parecer, las cifras que se manejan en el club verdiblanco alcanzan los 40 millones de euros. El comprador, o sea Castell, tendría que abonar esa cantidad, además de liberar a Lopera de los avales firmados, que también alcanzan una cifra no inferior a los 40 millones.

 

Lo que sí queda claro, como el agua, es que Lopera, que este verano cumplirá 65 años (edad laboral y legal para que cualquier trabajador cobre su pensión de jubilado) no piensa vender ni un alfiler a los próceres de la oposición, que se encuentran aglutinados en la llamada Fundación del Real Betis. A esos, ni agua.