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El volcánico Paco Jémez y el reto de resucitar a un Cruz Azul en crisis perpetua
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el español Firma un año con los ‘Cementeros’

El volcánico Paco Jémez y el reto de resucitar a un Cruz Azul en crisis perpetua

El técnico español aterrizará este viernes en México con la difícil tarea de reflotar a un histórico del fútbol azteca que no gana una liga desde 1997 y vive una guerra institucional

Foto: Paco Jémez dirigirá al Cruz Azul, un histórico de México en horas bajas (EFE)
Paco Jémez dirigirá al Cruz Azul, un histórico de México en horas bajas (EFE)

Cruz Azul deshojó la margarita y, tras varios días de tira y afloja en las altas esferas del histórico club mexicano, eligió a Paco Jémez para liderar a los ‘cementeros’ durante el próximo año, esto es, los torneos Clausura y Apertura 2017 del balompié azteca. “El ex entrenador de Rayo Vallecano y Granada CF se convirtió en la mejor opción, de acuerdo a su propuesta de trabajar tanto con el primer equipo como con las fuerzas básicas del club, debido a las cualidades y experiencia con las que Jémez cuenta como estratega”, explicaban los mentores de la afamada ‘Máquina Celeste’ a través de un comunicado para justificar su contratación.

Foto: Paco Jémez durante un entrenamiento del Granada (Miguel Ángel Molina/EFE) Opinión
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El técnico canario, a la sazón el tercer europeo que va a dirigir Cruz Azul tras el húngaro Jorge Marik y el alemán Axel Bierbaum, superó en el sprint al paraguayo José Cardozo por ocupar el puesto dejado a fines de octubre por Tomás Boy, toda vez se confirmó la no clasificación del equipo capitalino para la liguilla por el título, una suerte de ‘Día de la Marmota’ en versión celeste que se ha repetido cinco veces en los tres últimos años.

Apuesta personal del director deportivo de la ‘Máquina’, Eduardo de la Torre, el último entrenador español en llegar al fútbol del gigante norteamericano tendrá a partir de este viernes, día de su llegada a la Capital Federal, la complicada misión de dar un giro termidoriano al destino de un histórico en franco declive a nivel deportivo y envuelto en una interminable guerra de poder institucional. Sin lugar a dudas, el mayor reto de su carrera en los banquillos.

Una pésima gestión

A pesar de ser el tercer grande del balompié azteca en lo que a aficionados se refiere, por detrás de América y Chivas, sus logros sobre el verde han escaseado en las dos últimas décadas. Su título liguero más reciente se remonta a fines de 1997, cuando conquistaron el Torneo de Invierno. Desde entonces, su amplia parroquia sólo ha podido festejar una Copa MX (2013) y la Concachampions de 2014. Entre medias, un amplio surtido de grandes decepciones en forma de subcampeonatos. Léase: Copa Libertadores (2001); Ligas 2009 y 2013 y Concachampions 2010. Un ínfimo bagaje, en suma, para uno de los clubes más solventes desde el punto de vista económico gracias al soporte de su propietaria, la potente cementera Cruz Azul, una de las mayores del mundo en el ramo.

Es precisamente esa crisis deportiva perpetua que atenaza al equipo desde que se inició la actual centuria, propiciada en gran medida por una pésima gestión desde la zona noble, el peor enemigo al que deberá enfrentarse Jémez una vez plante bandera en el Estadio Azul. El ex de Rayo y Granada, entre otros, habrá de vadear en las procelosas aguas de una institución sumida en una desgastante guerra de intereses que tiene como epicentro del conflicto al intermediario Carlos Hurtado. Dotado de un enorme poder de decisión a la hora de contratar jugadores por el presidente Guillermo Álvarez, el polémico representante ha ejercido de secretario técnico en la sombra durante las dos últimas décadas hasta la llegada al club, el pasado enero, de Eduardo de la Torre.

Renovarse o morir

El nuevo director deportivo apenas tardó unos días en chocar frontalmente con Hurtado al negarse a pasar por el aro con alguna de sus propuestas para reforzar el equipo, circunstancia que se acaba de repetir con el nombre del sustituto de Tomás Boy en el banquillo celeste. La elección de Jémez supone un triunfo importante para De la Torre, quien se opuso al fichaje de José Saturnino Cardozo, a la sazón el candidato propuesto por el hombre que, fruto de sus polémicas injerencias, logró que destituyeran en su día al uruguayo Sergio Markarian, el mejor estratega que ha tenido Cruz Azul junto al exitoso Luis Fernando Tena en el presente siglo; o que el presidente diera la patada después del título del 97 al mítico Carlos Hermosillo, máximo artillero histórico cruzazulino (197 goles) e ídolo mayor celeste.

Precisamente, Hermosillo se ha erigido en uno de los principales críticos de la gestión del tándem Álvarez-Hidalgo. En las últimas semanas llegó incluso a encabezar una protesta activa de un sector de la afición que pretendía pintar de negro el Estadio Azul. “Desde que salí del club, vengo escuchando que habrá una reestructuración y no la veo. Si ya cambiaste de directores deportivos, jugadores y técnicos, ¿dónde está el problema entonces? La iniciativa era para que los jugadores sintieran el apoyo, pero también para que los directivos entiendan que es importante renovarse”, comenta el ‘Grandote de Cerro Azul’. Y recuerda: “Ya son 18 años sin salir campeón, pero además tres que no nos clasificamos a la liguilla. Para una institución tan grande como Cruz Azul, no se puede permitir. Llegan y se van jugadores. Algunos dicen que no rinden por el césped... No hay una planificación de qué perfil de jugador hay que traer”, agrega.

Fuerte carácter

En México temen que el volcánico carácter de Jémez, quien, por cierto, contará en tierras aztecas con su cuerpo técnico al completo, pueda eclosionar nada más llegar en el momento de confeccionar la lista de refuerzos que necesita el equipo para encarar el Clausura con garantías de poder romper el gafe que persigue al equipo desde 2014, última vez que entraron en la pelea final por el título liguero.

Foto: Paco Jémez ha fracasado en su etapa en el Granada (EFE)

Sobre el césped, el entrenador insular dispondrá de poco más de un mes para insuflar su filosofía fútbolística y su carácter a una escuadra que se ha caracterizado estos últimos años por su falta de espíritu combativo y una rara habilidad para fallar en los momentos decisivos. No es casualidad, en este sentido, su apodo de ‘Subcampeonísimo’ por la cantidad de finales que ha dejado escapar. Difícil tarea la que tiene por delante Jémez, máxime si se tiene en cuenta que su antecesor en el banquillo cementero, Tomás Boy, de temple y formas similares a las del español, tuvo serios problemas para conectar con el vestuario. Hasta el punto de que los medios locales señalaron a varios de sus miembros como causantes directos de su prematuro adiós.

Cruz Azul deshojó la margarita y, tras varios días de tira y afloja en las altas esferas del histórico club mexicano, eligió a Paco Jémez para liderar a los ‘cementeros’ durante el próximo año, esto es, los torneos Clausura y Apertura 2017 del balompié azteca. “El ex entrenador de Rayo Vallecano y Granada CF se convirtió en la mejor opción, de acuerdo a su propuesta de trabajar tanto con el primer equipo como con las fuerzas básicas del club, debido a las cualidades y experiencia con las que Jémez cuenta como estratega”, explicaban los mentores de la afamada ‘Máquina Celeste’ a través de un comunicado para justificar su contratación.

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