El ‘visionario’ Krychowiak asegura que lo mejor de Polonia está aún por llegar

A Grzegorz Krychowiak no le tembló el pulso cuando enfiló la pasarela del horror camino del punto fatídico ante Suiza. Al volante tapón del Sevilla le sobró serenidad y categoría para superar a Yann Sommer y meter a Polonia en los cuartos de final de una Eurocopa por primera vez en la historia de su selección. Todo un hito, largamente celebrado por aquellas tierras, si se tiene en cuenta que su país se estrenó en una fase final del torneo continental ocho años atrás, con Leo Beenhakker en el banquillo, y repitió suerte en 2012 en una edición que organizó junto a Ucrania, lo que le aseguró una plaza entre los 16 privilegiados que llegaron a la instancia decisiva de la competición.

Más allá de esta exaltación patriótica típica cuando un combinado menor da un paso importante en un torneo de gran calado, lo que resulta indudable es que esta Polonia, a la chita callando, está labrando su camino con firmeza en territorio francés a partir de una zaga inquebrantable (sólo ha encajado un gol hasta el momento) y una actividad frenética en la medular, donde Krycho es el indiscutible jefe de esa sala de máquinas que más podría catalogarse como la versión contemporánea de aquella célebre caballería polaca que se batía a los tanques de la Wehrmacht, con el alma a tientas y la fe perdida, en los albores de la Segunda Guerra Mundial.

Si Adam Nawalka, el director de escena de los del este europeo, consigue que Lewandowski y Milik terminen de enchufarse (sobre todo el primero, aún con el casillero en blanco), esta selección puede perfectamente hacer buenos los presagios de su número 10. “Llegar a los cuartos está bien, pero nuestra ambición es la de llegar más lejos en este torneo. Hay que apuntar más alto. Por ahora no hemos mostrado gran cosa. Este equipo tiene potencial para mucho más. Tengo la certeza de que vamos a llegar más arriba todavía”, apuntó Krychowiak.

Clave en la fase de clasificación

El mediocampista del Sevilla, club al que casi con toda seguridad no va a regresar después de las vacaciones veraniegas, cree que frente a Suiza superaron un exigente test que ahora puede ayudarles en el camino hacia las semifinales. “Logramos superarles pese a ser un partido muy complicado, especialmente en el segundo tiempo, en el que se hizo difícil mantener el balón por la presión que nos hacían. Fue, en cualquier caso, una buena lección que nos puede servir para saber cómo manejar encuentros de estas características, como podría ser el del jueves”, declaró un Krycho que ya fuera designado MVP en el estreno de su selección frente a Irlanda del Norte.

Pese a que no se prodiga en demasía en el capítulo goleador, el pulmón polaco empieza a especializarse en tantos decisivos para los intereses de su selección. Suyo fue uno de los dos tantos frente a Eire que ayudaron a Polonia a certificar la clasificación para esta fase final. El penalti del otro día ante Suiza le convirtió en héroe de sus 38 millones de compatriotas. Habrá que ver si es capaz de estirar esa racha frente a una Portugal en la que se encontrará con varios ‘conocidos’ de LaLiga, caso de Ronaldo, Pepe o André Gómez.