Por qué el Unionistas-Real Madrid no se va a jugar en el mejor estadio de Salamanca

Rivalidades en el fútbol hay muchas, pero ninguna como la del Unionistas y el Salamanca CF UDS, dos clubes que antes de nacer ya estaban condenados a enfrentarse. Llevan más de un lustro representando posiciones antagónicas, formas irreconciliables de ver el fútbol. Esa enemistad local ha adquirido ahora relevancia por la llegada a Salamanca del Real Madrid, que jugará el próximo miércoles los dieciseisavos de final de la Copa del Rey contra Unionistas. Que el partido no se vaya a jugar en el mejor estadio de la ciudad permite explicar la relación entre ambos clubes.

Tal y como se confirmó Ángel Sandoval, presidente de la entidad, el Unionistas-Real Madrid se disputará el próximo miércoles en las Pistas del Helmántico, recinto situado a la vera del Helmántico, pero mucho más modesto que él. Solo tiene una grada cubierta, tiene pista de atletismo y caben apenas 4.000 espectadores. A su lado, el histórico estadio charro que tantas tardes de primera división vivió y que puede acoger a 17.000 personas. Solo calle separa uno de otro.

Tras el sorteo de Copa del Rey, el Ayuntamiento de Salamanca mostró su intención de que el partido se jugara en el Helmántico y no en las Pistas, estadio donde juega sus partidos Unionistas, incluido el de la anterior ronda copera contra el Deportivo. Pero el Helmántico no es de propiedad municipal, sino de una empresa mexicana que lo compró por un millón de euros en la subasta de los bienes de la Unión Deportiva Salamanca tras la liquidación del club. Ahí juega sus partidos el Salamanca CF UDS, también de capital mexicano y 'de facto' el dueño el estadio. Muchos en la ciudad recriminan al ayuntamiento no haberlo comprado cuando pudo.

"Estamos trabajando para que la Copa del Rey se quede en Salamanca y que se celebre en Las Pistas. Nuestra afición nos ha insistido en luchar porque sea en nuestro campo y ya tenemos presupuestos de gradas, para llegar a los 10.000 aficionados, e iluminación que se han montado en eventos similares", explicó este jueves el dirigente de Unionistas, en declaraciones a los periodistas tras el sorteo de la Supercopa femenina, que se jugará el mes que viene en el Helmántico.

Para aumentar el aforo es necesario que el Ayuntamiento de Salamanca dé los permisos que permitan adecuar el recinto. "La pelota está en el tejado del Ayuntamiento", apuntó Sandoval. Este viernes, tras una reunión del club con las instituciones públicas, se confirmó que el encuentro se jugará en Las Pistas. El Salamanca CF UDS emitió un comunicado en el que ofrecía el Helmántico al Ayuntamiento de Salamanca para que a su vez lo cedira a Unionistas, a quien no nombra en ningún momento en su escrito.

"El estadio Helmántico es la última opción", siguió el presidente. "Preferimos jugar en el Santiago Bernabéu que en el Helmántico. Si no es posible jugar en Las Pistas buscaremos nuestro interés económico (...) "La copa de los humildes tiene que ser en casa de los humildes. Nosotros queremos jugar en Las Pistas aunque perdamos dinero. Nos debemos a la ciudad y a nuestros socios. La ciudad quiere que sea en Salamanca y nosotros en Las Pistas, por lo que se cumplen los requisitos que todos queremos", explicó el presidente antes de que hoy se conociera finalmente la decisión, favorable a sus peticiones.

El Real Madrid, tampoco ha puesto objeciones a jugar en las Pistas, que no sería, ni mucho menos, el peor estadio en el que ha jugado su época reciente. El equipo de los Galácticos jugó en octubre de 2001 en el Municipal de Pájara (Fuerteventura) y un mes después lo hizo en la Ciudad de Deportiva de Lanzarote, instalaciones que no estaban por encima de lo que son ahora las Pistas.

Igual que su vecino, Unionistas nació de las ruinas de la Unión Deportiva Salamanca. Pero en el suyo fue un proyecto impulsado por los aficionados en homenaje al desaparecido club y el otro nació con apoyo empresarial con el objetivo de recuperar a la UDS. "Nuestro objetivo es volver a recuperar la Unión Deportiva Salamanca", dijo a El Confidencial en 2017 el entonces presidente Carlos Martín. El club se llamaba aún Salmantino, nombre histórico del filial de la UDS. De la escisión de la cantera había nacido el equipo, que ahora lleva los colores, el escudo y las siglas.

El Salamanca CF UDS es todo lo que Unionistas no quiere ser y contra lo que lucha desde su nacimiento. Así lo dice el artículo 4 de sus estatutos: "UNIONISTAS DE SALAMANCA CLUB DE FUTBOL jura fidelidad eterna al club UDS, y no trata, ni jamás lo hará, de suplantar o hacerse pasar por él, ni se considera representante, ni heredero de dicho club, posicionándose radicalmente en contra, y condenando a cualquier otro club que hubiese intentado o intentase realizarlo".

Con la postura de que prefiere jugar en el Bernabéu antes que en el Helmántico, Unionistas no solo defiende su derecho a jugar en su estadio, también su modelo. A un lado, un club gestionado por sus aficionados, democrático y, a la vista de los resultados desde su fundación, exitoso. Enfrente, a escasos 20 metros si se va de un estadio a otro, un club con una trayectoria muy similar, pero que representa todo lo contrario a lo que defiende Unionistas. "Si hay que sacar la Copa de Salamanca, que es lo último que se quiere hacer, iríamos a Madrid", dice su presidente. Por suerte, no hará falta. Las Pistas ya espera al Madrid de Zidane.