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La salvaje agresión a Cristiano Ronaldo no significará el cierre del Calderón
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RAUL GARCÍA Y XABI ALONSO SE CITAN A LA SALIDA

La salvaje agresión a Cristiano Ronaldo no significará el cierre del Calderón

El roce entre Xabi y Raúl García y el mecherazo a Cristiano se llevaron el protagonismo. El Atlético recibirá una multa, pero no le cerrarán el estadio

Foto: Cristiano charla con Sergio Ramos en el momento en el que le alcanza el mechero (Canal Plus).
Cristiano charla con Sergio Ramos en el momento en el que le alcanza el mechero (Canal Plus).

La tensión vivida y escenificada en el partido de ida disputado en el Santiago Bernabéu tuvo su réplica en el Calderón, con el mecherazo a Cristiano Ronaldo como cabeza de cartel. Ni el tempranero gol del portugués consiguió calmar los ánimos que venían calientes y terminaron igual de encendidos. Sin escenas dantescas como las vividas seis días atrás, algunos jugadores con especial empeño por parte de Xabi Alonso y Raúl García y el cafre que lanzó el mechero a la cabeza de Cristiano se llevaron la palma pese a los intentos de Simeone y Ancelotti para que todo recuperara el tono de la deportividad.

El delantero portugués vivía ajeno a lo que decía la grada de él. Estaba a lo suyo, empezando por marcar tres partidos después. Cristiano no midió en un salto y dio con Manquillo en el suelo de mala manera después de dar un giro completo en el aire. El rojiblanco, por cierto, terminó en el hospital con un esguince cervical. Al término de la semifinal, el jugador madridista no sólo llamó al rojiblanco sino que abandonó el Calderón haciéndose fotos con niños del Atlético. Una imagen que también protagonizaron Sergio Ramos o Bale.

A partir de ese instante, la afición atlética colocó al portugués en el punto de mira.Antes algunos ya le insultaban, pero no todos. Lo que nadie esperaba era que un energúmeno lanzara un mechero que golpeó en la cabeza del delantero. El impacto no le causó herida alguna, pero sí una fuerte conmoción. Pese a ello, CR7 siguió jugando tras el descanso.El acta redactada por Undiano Mallenco no deja lugar a dudas: "Una vez finalizada la primera parte y cuando nos retirábamos hacia el túnel, fue lanzado desde la grada un mechero impactando en la cabeza del jugador número 7 del Real Madrid. Dicho jugador pudo continuar el encuentro en la segunda parte".

El presunto agresor no ha sido identificado por el Atlético de Madrid, aunque el club informó de lo contrario en un primer momento. No está grabada la acción por las cámaras de la UCO (Unidad Central Operativa), algo que dificulta sobremanera la investigación. Debido a la aglomeración de espectadores en las inmediaciones del túnes de vestuario, fue imposible localizar al agresor. Hacerlo se aventura como muy complicado. Si así fuere,seríapropuesta una sanción que le aparte de los estadiosdesde seis meses a dos años y una multa que puede rondar los 50.000 euros.

Tal y como ha sucedido en otras ocasiones, la acción no llevará consigo la clausura del Calderón. La ausencia de lesión o herida será un factor atenuante, pero sobre todo que haya sido a un jugador y no al árbitro. Este será otro detalle que no pasará de puntillas en el momento en el que Competición castigue al Atlético de Madrid con una multa y un apercibimiento de cierre, tal y como confirmaron a El Confidencial fuentes autorizadas de la Federación Española de Fútbol.

placeholder Xabi Alonso y Raúl García durante la semifinal (Cordon Press).

Raúl García y Xabi Alonso no supieron entender que a los seis minutos del partido, la eliminatoria estaba más sentenciada si cabe tras el tres a cero del partido de ida. Al poco de empezar el choque empezaron a discutir, para después darse collejas, patadas y empujones en cada ocasión en la que se cruzaban en el terreno de juego. Pero como les parecía poco, uno y otro se retaron para verse las caras al término de los noventa minutos, ya sin cámaras ni testigos. Ambos perdieron los nervios con una actitud que les dejó en evidencia.

La tensión vivida y escenificada en el partido de ida disputado en el Santiago Bernabéu tuvo su réplica en el Calderón, con el mecherazo a Cristiano Ronaldo como cabeza de cartel. Ni el tempranero gol del portugués consiguió calmar los ánimos que venían calientes y terminaron igual de encendidos. Sin escenas dantescas como las vividas seis días atrás, algunos jugadores con especial empeño por parte de Xabi Alonso y Raúl García y el cafre que lanzó el mechero a la cabeza de Cristiano se llevaron la palma pese a los intentos de Simeone y Ancelotti para que todo recuperara el tono de la deportividad.

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