Ante un 2ªB y en el Bernabéu, Di María sí demostró que él no es un "fracasado"

Hace poco más de un año, en la misma ronda de la Copa del Rey pero de la pasada temporada, Ángel Di María fue noticia por una polémica con un rival del Alcoyano, el privilegiado modesto que agració el sorteo de dieciseisavos. Julio de Dios, jugador de este equipo alicantino y seguidor confeso del Real Madrid, se marchó hundido del Bernabéu y acusó al argentino de haberle llamado “fracasado” tras un rifirrafe normal en un partido de fútbol.

Pues en idéntico escenario y con un rival de similar envergadura y de la misma Comunidad Autónoma, el Olímpic de Xàtiva, Di María trató de agradar a su afición y mostrar su mejor cara deportiva, para que nadie pensara lo mismo sobre él. El atacante, en el candelero los últimos días por los constantes rumores sobre su deseo de salir en enero, se mostró animado, con ganas de entrar en juego, sobre todo en la primera mitad, donde protagonizó varias acciones de ataque y algún disparo. Además, convirtió el segundo tanto de la victoria de su equipo, al transformar un penalti por primera vez en su carrera, aunque con cierto suspense.

Con esa actitud consiguió que el público apenas se fijara en él, y no escuchó los silbidos que otros en su lugar antes han tenido que soportar de las exigentes gradas madridistas. Aunque sea ante un Segunda B y como local, Di María se reivindicó como un jugador implicado, dejando atrás la imagen dudosa que dio en los dos últimos duelos, ambos de visitante, ante Osasuna y en la ida en Xàtiva.

Ancelotti: “Su segundo tiempo no fue tan bueno”

El destino quiso que coincidiera este miércoles en el campo con un testigo cercano del citado, y supuesto, encontronazo ante el Alcoyano del año pasado. El colombiano John Edison Mosquera, que militaba en aquél equipo en 2012 y esta vez fue el segundo cambio del Olímpic, se perdió el anterior duelo en el Bernabéu por lesión. Sin embargo, la suerte le dio otra oportunidad y pudo disfrutar de los mejores minutos que tuvo su equipo, ya en el tramo final.

De hecho, Ancelotti no estaba contento tras el choque con la segunda parte de los suyos. Valoró la buena primera mitad del equipo, y destacó a Di María, quien colaboró en la jugada del primer tanto de Illarramendi y después marcó la pena máxima. Pero según el italiano, el argentino hizo un segundo tiempo “no tan bueno, como los otros” jugadores. Por lo menos, esta vez sí le dio su camiseta a un rival antes de abandonar el campo.