El Inter vence al Viktoria Plzen y echa al Barça de Champions: Xavi vuelve a la Europa League

El Barça dependía de un milagro que no se ha dado y ya es nuevo equipo de la Europa League. Otra vez. El conjunto de Xavi Hernández, que se reunió con los jugadores en el Camp Nou para observar detenidamente el encuentro entre el Inter de Milan y el Viktoria Plzen por la televisión, vio de primera mano cómo sus aspiraciones de hacer algo importante en la presente Champions League se truncaron con la cómoda victoria del cuadro italiano por 4-0. La eliminación no es solo un fracaso deportivo a todas luces para un club que había volcado sus esfuerzos económicos en confeccionar un equipo a medida del técnico catalán y que ilusionase a la afición. Es la constatación del proyecto fallido de Joan Laporta con un ídolo del FC Barcelona como Xavi Hernández y, también, un torpedo económico a la línea de flotación del club.

Nadie dentro del club se esperaba ver al Barça eliminado de la Champions League en pleno octubre. No cuando el conjunto azulgrana se convirtió este verano en el sexto club que más dinero ha desembolsado de todas las grandes ligas a pesar de sus problemas económicos, con 153 millones de euros. No cuando la dirección deportiva encabezada por Mateu Alemany realizó hasta ocho nuevas incorporaciones (Robert Lewandowski, Raphinha, Jules Koundé, Ousmane Dembélé, Franck Kessié, Marcos Alonso, Andreas Christensen y Héctor Bellerín) y se blindó la plantilla hasta doblar puestos en todas las líneas.

El Barça optó por la venta de activos del club por un valor de 867,5 millones para salvar las cuentas y amortiguar el déficit operativo de 200 millones de euros con el que pretende operar hasta 2023-2024. Sería en la 2024-25 cuando se lograría una situación de "normalidad". Para ello, vendieron una pata de su negocio más importante, el 25% de los derechos televisivos a Sixth Street, una de sus famosas 'palancas', junto a los 200 millones de euros de Socios.com y Jaume Roures por el desarrollo de los nuevos negocios digitales. Eso provocó que el Barça salvase el presupuesto de la temporada pasada con un beneficio de 96,7 millones de euros y el de este: un presupuesto récord de 1.255 millones de euros para 2022-2023, del que prácticamente la mitad, casi 600 millones, deberán provenir de ingresos extraordinarios.

Sin embargo, el Barça solo ha podido ganar un partido de cuatro en la fase de grupos de la Champions League... ante el rival más débil, el Viktoria Plzen. Los azulgranas fueron incapaces de vencer al Bayern de Múnich en el Allianz Arena, al Inter de Milan en San Siro y al propio Inter de Milan en el Camp Nou. Eric García habló en la previa del partido en casa contra el Bayern, donde valoró el desempeño del Barça: "El día del Bayern merecimos mucho más, el partido de Milán por diferentes circunstancias lo acabas perdiendo y, en casa contra el Inter y contra el Real Madrid, nos cogió en una semana complicada".

Como en el caso de Xavi, la autocrítica ha brillado por su ausencia. El técnico de Terrassa afirmaría tras el empate contra el Inter de Milan en el Camp Nou que "la Champions ha sido cruel con nosotros" y explicó los motivos. "En Múnich fue la efectividad, en Milán otras circunstancias de las que no quiero hablar y esta noche, los errores defensivos. El planteamiento ha sido bueno. Es muy cruel. Hay momentos que estoy muy satisfecho. Son errores puntuales. Teníamos el partido controladísimo hasta ese fallo en defensa (el 1-1)". Gerard Piqué fue la cabeza de turco escogida por el excentrocampista, que ya veía el billete a octavos de final como improbable. El milagro no ha llegado y ahora toca afrontar las consecuencias.

El resultado económico del tortazo en la Champions

Como ya sucediese la temporada pasada, la junta directiva de Joan calculó llegar, como mínimo, a los cuartos de final de la Champions League. Xavi Hernández soñaba con "ganar la competición, aunque el objetivo principal es pasar la fase de grupos" y la junta tuvo que avalar personalmente para inscribir a todos los fichajes. Ahora el club afronta unas pérdidas de unos 25 millones de euros. El batacazo de la Champions frenará la recuperación del club. No solo por las pérdidas derivadas de no alcanzar las siguientes rondas o el 'market pool', salvado por un presupuesto plagado de "palancas". Más bien por el efecto que puede tener a la hora de ahuyentar patrocinadores y de que la ilusión inicial del aficionado azulgrana que comportaba un aumento de la facturación... se desinfle.

El vicepresidente económico del Barcelona, Eduard Romeu, dio a conocer el dato del golpe deportivo, institucional y económico que representó ser eliminado en la fase de grupos del año pasado hace unas semanas: "El impacto económico de la Champions y no pasar de cuartos de final en la Europa League provocó una pérdida neta de ingresos de 12 millones". Eso sin contar el 'ticketing' o la explotación del estadio (museo del Barça, venta de 'merchandising' los días de partido de Champions, experiencias VIP, etc). Como esta vez.

"Trataremos de estar lo más cerca posible de competir por todo. No se puede regalar nada. Ese es el ADN del club. El objetivo es jugar bien y ganar. He madurado y como entrenador debes tomar decisiones que no le gustan a los jugadores. Esa ilusión la transmitiré a los futbolistas y ellos, al campo. Haremos todo lo posible por mantener la pelota", afirmó Xavi Hernández en su primer día como técnico del Barça con el pecho hinchado como testigo de Guardiola y abanderado del 'Cruyffismo'. Un año después, el técnico catalán se estrella como en la pasada Champions League y hace un roto en los presupuestos del club azulgrana. Esta noche el Barça no se jugará otra cosa que no sea decepcionar todavía más a su afición.