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Luis Enrique duda de un sorteo en el que Zidane siempre tiene suerte
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los cuatro españoles, en el bombo de este lunes

Luis Enrique duda de un sorteo en el que Zidane siempre tiene suerte

El técnico del Barça deslizó tras su último partido que los sorteos de la Champions los carga el diablo. Por contra, el año pasado su homólogo del Madrid tuvo un camino sencillo a la final

Foto: Sorteo de tercera ronda, previo a la clasificación para la Champions de esta temporada.
Sorteo de tercera ronda, previo a la clasificación para la Champions de esta temporada.

"Ya esperamos que nos toque una joyita en el sorteo". Luis Enrique no parece creer en el azar. Después del partido contra el Borussia Mönchengladbach, aprovechó sus comparecencias para dejar un recado, hablar de las bolas de la Champions League y, sin llegar a valorar si hay calientes o frías, recordar que su equipo tiene poca suerte. O que el Real Madrid tiene demasiada, que para el caso, en este mundo de gigantes insaciables, viene a ser lo mismo.

Foto: Reus anotó el empate a dos definitivo. (JuanJo Martín/EFE)

"Estamos acostumbrados a los sorteos explosivos, nos tocará el segundo más difícil o el que tenga más puntos", abundó el técnico del FC Barcelona. Y, haciendo cálculos, eso significa que cree que le va a tocar el PSG o el Bayern de Múnich, dos cocos del bombo dos, el de los segundos de grupo. Porque este sorteo, en su configuración, es algo especial. Tres de los grandes de Europa —se suma el Madrid, aunque al Barça no le pueda tocar—, candidatos a todo, han holgazaneado en la primera fase y tendrán que jugar la vuelta fuera de su estadio. El Madrid, segundo después de empatar contra el Dortmund, se encuentra con que sus rivales teóricos pueden considerarse incluso menos potentes que los que se enfrenten al Barcelona o al Atlético. Una paradoja.

Porque el año pasado sabía que iba a tener un camino más o menos sencillo, pero ahora se encuentra con la opción de tener un rival de primerísimo nivel ya en los octavos de final de la competición. Ese es el miedo de Luis Enrique, sabedor de que en febrero su Barça se puede cruzar con un equipo al que solo querría ver a mediados de mayo.

placeholder Zidane y Luis Enrique, durante un Real Madrid-Barça. (Reuters)
Zidane y Luis Enrique, durante un Real Madrid-Barça. (Reuters)

La suerte de Zidane

También sospecha que la suerte de Zidane es un factor a tener en cuenta. Son muchos partidos remontados en los últimos minutos y, en su única experiencia en Champions, tuvo un camino de rosas, dentro de lo que cabe, hasta la final de Milán, que terminó ganando. Roma, Wolfsburgo y Manchester City no suenan al menú más complicado que se puede encontrar en la Champions. Fue el que le tocó y uno de los motivos por los que el Madrid terminó ganando la competición. El Barça, por el contrario, se cruzó con el Arsenal primero y después contra el Atlético, y ese fue su final en la competición. En el primer año de Luis Enrique, cuando fue campeón, su camino también fue terrible: Manchester City, PSG y Bayern de Múnich. Dos de ellos son posibles rivales en octavos esta temporada.

Nadie ha aportado nunca una prueba de que en tiempos recientes haya habido un amaño en un sorteo de la máxima competición continental, pero la falta de evidencias no es suficiente para que las teorías conspiratorias no afloren. Se ven vídeos a cámara lenta de los sorteos y los que quieren ver cosas raras aseguran que la mano inocente, que normalmente es un jugador histórico, escoge la bola correcta y no una al azar.

Se crea o no en el sorteo de este lunes, a las 12:00 en Nyon, se volverá a explicar que los primeros juegan contra los segundos con la vuelta en casa del primero, que no se pueden cruzar contra un equipo que ya haya compartido grupo y tampoco dos equipos de la misma nacionalidad. Los maledicentes pueden pensar incluso que el Real Madrid escogió los rivales más sencillos, que pudiendo haber ganado permitió un empate que les abocaba a jugar la vuelta de octavos fuera de casa, pero también con menos tiburones entre los posibles rivales.

Una vez más, los españoles, con el Sevilla como último en clasificarse y que llevan tres años consecutivos llevándose la Copa de Europa a casa, han sido los más efectivos. Los cuatro equipos clasificados. Les siguen los ingleses y los alemanes, con tres, y dos para los franceses, portugueses e italianos. Ninguna otra nacionalidad ha salido de esta primera criba. Queda mucho para mayo.

Posibles rivales del FC Barcelona: PSG, Benfica, Bayern de Múnich, Bayer Leverkusen y Oporto.

Posibles rivales del Atlético de Madrid: PSG, Benfica, Manchester City, Bayer Leverkusen y Oporto.

Posibles rivales del Real Madrid: Arsenal, Nápoles, Mónaco, Juventus y Leicester.

Posibles rivales del Sevilla: Arsenal, Nápoles, Mónaco, Borussia Dortmund y Leicester.

placeholder Football Soccer - Rapid Wien v Athletic Bilbao - UEFA Europa League group stage - Group F - Allianz Stadium, Vienna, Austria - 8 12 2016. Athletic Bilbao's players celebrate a goal. REUTERS Leonhard Foeger
Football Soccer - Rapid Wien v Athletic Bilbao - UEFA Europa League group stage - Group F - Allianz Stadium, Vienna, Austria - 8 12 2016. Athletic Bilbao's players celebrate a goal. REUTERS Leonhard Foeger

También la Europa League

Un ramillete de equipos potentes aparecen en el horizonte del tío español de la Liga Europa, Villarreal, Athletic y Celta, que conocerán sus rivales de dieciseisavos este lunes con el sorteo que tendrá lugar a las 13.00 horas. Los tres lograron con más dificultades de las previstas y deseadas superar la fase de grupos. Ninguno acabó como líder, lo que les deja en el bombo de equipos que no son cabezas de serie, que integran los campeones más los cuatro procedentes de la Liga de Campeones con mejor coeficiente.

Al mayor potencial general del grupo de cabezas de serie, la dificultad se incrementa con el hecho de que tendrán que jugar la ida en su campo y la vuelta a domicilio. Se mantiene la regla de que no podrán enfrentarse dos conjuntos de un mismo país, así como tampoco volver a medirse dos equipos que hayan coincidido en su grupo.

Entre los cabezas de serie sobresale la presencia de los cuatro equipos Champions, el Besiktas turco, el Lyon francés, que estuvo a punto de apear de la máxima competición al Sevilla, campeón de la Liga Europa las tres últimas ediciones, el Tottenham inglés del argentino Mauricio Pochettino y el Copenhague, teóricamente el más asequible.

Junto a ellos están potentes bloques como el Roma y el Fiorentina italianos, el Schalke alemán, el Shakhtar Donetsk, único que ganó todos sus partidos en la fase de grupos, o el Zenit San Petersburgo ruso. El Ajax, otro histórico del fútbol continental, no podrá ser rival del Celta al coincidir en su grupo, pero sí del Athletic, que elude al Genk belga, y del Villarreal, que no podrá encontrarse con el sorprendente Osmanlispor turco.

Otro de los centros de atención del sorteo será conocer el rival del Manchester United del luso Jose Mourinho, que logró la clasificación con muchos apuros y por lo tanto en el sorteo estará entre los equipos que no son cabezas de serie, al igual que el Borussia Mönchengladbach, el Legia Varsovia, el Ludogorets y el Rostov, cuarteto procedente de la 'Champions'. Los dieciseisavos de final se disputarán los jueves 16 y 23 de febrero a las 19:00 y a las 21:05.

Cabezas de serie: Ajax (NED), APOEL (CYP), Besiktas (TUR) (+), Fenerbahçe (TUR), Fiorentina (ITA), Genk (BEL), Copenhague (DIN) (+), Lyon (FRA) (+), Osmanlispor (TUR), Roma (ITA), Schalke (GER), Shakhtar Donetsk (UKR), Sparta Praha (CZE), St-Étienne (FRA), Tottenham Hotspur (ING) (+) y Zenit (RUS)

No cabezas de serie: Anderlecht (BEL), Astra Giurgiu (RUM), Athletic Club (ESP), AZ Alkmaar (HOL), Borussia Mönchengladbach (GER) (+), Celta Vigo (ESP), Gante (BEL), Hapoel Beer-Sheva (ISR), Krasnodar (RUS), Legia Varsovia (POL) (+), Ludogorets Razgrad (BUL) (+), Manchester United (ING), Olympiacos (GRE), PAOK (GRE), Rostov (RUS) (+) y Villarreal (ESP)

"Ya esperamos que nos toque una joyita en el sorteo". Luis Enrique no parece creer en el azar. Después del partido contra el Borussia Mönchengladbach, aprovechó sus comparecencias para dejar un recado, hablar de las bolas de la Champions League y, sin llegar a valorar si hay calientes o frías, recordar que su equipo tiene poca suerte. O que el Real Madrid tiene demasiada, que para el caso, en este mundo de gigantes insaciables, viene a ser lo mismo.

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