Manchester City, el rival del Madrid que presume de haber ganado el Gamper

1. El Gamper con orgullo

2. Minoría en la ciudad

Manchester es una ciudad profundamente futbolera. El museo más conocido de la zona, que tiene un enorme edificio de cristal situado en el corazón de la ciudad, está dedicado a este deporte y exhibe un reguero casi interminable de camisetas, juegos, trofeos y recuerdos. El City es parte de ese ambiente, pero una parte pequeña. No importa que los 'citizens' se estén jugando la Premier League, como ha pasado en los últimos años, las calles de la ciudad siempre tienen el color rojo como principal y casi único. Los sábados y domingos las camisetas del Manchester United, el equipo de más solera de Inglaterra, eclipsan absolutamente a un equipo al que le faltan experiencia y tradición.

3. Instalaciones último modelo

El jeque Mansour bin Zayed Al-Nahyan ha realizado una altísima inversión en el club pero, a diferencia de otros adinerados que han entrado en el fútbol, él no ha entrado en el deporte solo para comprar unas cuantas estrellas y disfrutar de las ganancias inmediatas. Además de invertir en jugadores lo ha hecho en instalaciones, ha construido una gran ciudad deportiva con instalaciones de último modelo, un estadio pequeño junto al Ettihad en el que disputan sus partidos el filial y todos los avances posibles para crear un club moderno, puntero en cuestiones tecnológicas. El jeque no se desentiende del club y tiene un hombre de confianza, Khaldoon Al Mubarak, que supervisa todo desde la presidencia.

4. Un club en varios husos horarios

Los jeques no se conforman con tener un equipo puntero en Europa, su proyecto internacional les lleva a invertir en otros clubes, a los que renombran siempre City y en los que tienen ambición de ganar. El New York City, de la MLS, lo tienen junto a los Yankees, la franquicia estadounidense más poderosa. También tienen un club en Melbourne, donde llegó a jugar David Villa. Porque ese es otro punto común dentro de la empresa, los jugadores y entrenadores van cambiando de sitio en relación a las necesidades. Es el caso de Patrick Vieira, que después de ser entrenador del equipo filial ha marchado a entrenar a la franquicia estadounidense.

5. Cantantes y cocineros

Manchester, que es ciudad futbolera, también tiene una importancia capital en el mundo de la música. Y en eso el City tiene algo que decir. Los hermanos Gallagher, que hicieron historia en los 90 gracias a su grupo Oasis, son aficionados radicales del club. Liam, el más fanático, ha cantado en numerosas ocasiones el Blue Moon, himno oficioso del club mancuniano. También miembros de bandas como los Smiths o Stones And Roses comparten la filiación deportiva del color azul cierlo. En el esmero de consguir el mejor club de fútbol del mundo, que es algo que está en la cabeza de los dirigentes, han llegado incluso a tener el catering del estadio a cargo del célebre cocinero Jamie Oliver.