El Barça paga las consecuencias de regalar a Iñigo Martínez en el mercado de verano

El Barça regaló en agosto a su mejor defensor durante la pasada temporada: Iñigo Martínez. El conjunto azulgrana dejó salir al veterano central de 34 años al Al-Nassr de Arabia Saudí por cero euros a pesar de que era uno de los pesos pesados del equipo, tanto en el césped como en el vestuario. En una plantilla tan joven como la del Barça de Hansi Flick, Iñigo Martínez aportaba veteranía, salida de balón, contundencia al corte y era el líder del equipo a la hora de marcar la línea del fuera de juego, una faceta providencial a la hora de tener éxito en defensa.

"Fue paciente en las inscripciones, fue de los últimos en inscribirse la temporada pasada. Firmó un contrato con nosotros basándose en la confianza del club. Pedir dinero tal y como se había portado con nosotros, creo que es una falta de respeto cuando nos vino gratis y nos ha dado lo que nos ha dado. Si Iñigo fuera más joven y fundamental para el proyecto del club, podríamos haber intentado convencerle, pero habló con el míster y le dijo que tenía una oportunidad espectacular", justificó Deco en una entrevista concedida a Mundo Deportivo.

Ahora, tras ocho partidos de Liga y dos de Champions League, Hansi Flick atraviesa la primera gran crisis de la temporada. El curso pasado, el equipo azulgrana también cosechó malos resultados entre noviembre y diciembre ("shit november", llegó a decir el alemán), pero más tarde remontaría el vuelo para pasar por encima del Real Madrid en las competiciones domésticas y quedarse a un gol de la final de la Champions League.

El bajón de Cubarsí y sin pareja

En el segundo año de proyecto, el cuerpo técnico teutón tiene dudas en defensa y los rivales ya conocen cómo contrarrestar, de momento, la trampa del fuera de juego. Las dos derrotas consecutivas del equipo azulgrana vienen acompañadas de lo que Flick y Pedri catalogaron como "falta de intensidad y calidad con la pelota", que a la práctica se traduce como ausencia de fe en la idea del técnico alemán en dos partidos en que tanto PSG como Sevilla arrollaron a los culés en el juego. Al Barça le ha faltado colmillo en ataque y criterio con la pelota para que la aventurada apuesta defensiva salga a cuenta.

Sucede que Hansi Flick todavía no tiene claro quién debe ser el acompañante de Pau Cubarsí. Araújo dijo que el aficionado "todavía no ha visto al mejor Araújo", pero Flick lo sentó contra el PSG y en su vuelta a la titularidad contra el Sevilla, el central uruguayo cometió uno de esos penaltis absurdos habituales en su juego. Sin Iñigo Martínez, Araújo, Eric García y Christensen se han emparejado con Cubarsí, pero el joven central ha visto cómo ha pasado al perfil izquierdo.

Sin dinamita ni contundencia

Cubarsí también ha bajado su rendimiento. Precisamente el joven de 18 años salió al paso para realizar una profunda autocrítica. "No podemos no salir con la intensidad que requiere el partido, hemos salido dormidos. No quiero poner excusas del campo ni de nada, es cosa nuestra. Tenemos que mejorar en los aspectos que nos han faltado hoy", empezó en TV3.

"La primera parte no ha sido tan buena, pero en la segunda hemos tenido unos minutos en los que nos podríamos haber puesto por delante en el marcador, pero no hemos tenido esa suerte. En otros partidos, seguramente, habrían entrado y nos habríamos ido con los tres puntos. Esto es fútbol y puede pasar, pero lo que no puede pasar es que después de fallar las ocasiones nos marquen más goles", remató. Sin la contundencia en ataque habitual del Barça, el sistema defensivo es un riesgo.

La fuga de Iñigo Martínez a Arabia Saudí ha aumentado las dudas defensivas del Barça y en especial de su frágil última línea, tan necesaria para dejar en fuera de juego a sus rivales. Los protagonistas destacaron la falta de energía, intensidad y tensión competitiva en la presión, pero las ideas con la pelota brillaron por su ausencia. Tapados Cubarsí, Pedri y De Jong, Araújo, quien debería coger los galones de Iñigo Martínez, no supuso ninguna amenaza en salida de balón. Flick tiene mucho trabajo por delante en el parón internacional.