La bronca de Modric a Vinícius revela la tensión del Real Madrid por dar un golpe en el derbi

La reprimenda de Modric a Vinícius en Leganés, con la aprobación de Ancelotti, destapa que hay tensión en el Real Madrid con el brasileño y con la faceta del juego que más penaliza al equipo. Para competir en el derbi y en lo que venga por delante, en partidos de alta exigencia, es innegociable que todos estén implicados en el trabajo defensivo. Un equipo junto siempre es mejor que uno partido y el Real Madrid es vulnerable en el momento que no se activa sin el balón.

En el Atleti corren todos, ningún jugador está liberado de presionar y sacrificarse para ser un equipo incómodo y compacto. En el Madrid no se habla de otra cosa que de matarse el uno para el otro, estar unidos, ser agresivos y rocosos. El asunto se ha puesto serio y la charla de Ancelotti gira en torno a un mantra: "la clave del éxito es defender con compromiso colectivo".

El primer paso para la reacción en el Real Madrid lo dio Modric con una visible bronca a Vinicius, que tiene que ser constructiva y servirle de lección al brasileño. Parte de un veterano que nunca pierde la calma hacia un compañero que se ha convertido en una estrella y lleva un tiempo confundido. Concretamente, desde que se llevó la rabieta por no ser el ganador del Balón de Oro. La frustración se ha instalado en el brasileño, con un bajón en el rendimiento, más distraído y sin priorizar el equipo. Entre las sanciones, las desconexiones defensivas y los airados gestos a los compañeros que no le pasan la pelota, Vinícius baja su nivel.

A Vinícius le hacía falta y puede que hasta le venga bien que le cante las cuarenta el capitán del equipo. Es por su bien, no hay malos rollos entre ambos y sirve para mentalizar a la plantilla de las batallas que vienen por delante.

Lo que afronta el Real Madrid son dos puertos de alta montaña en pocos días, con una defensa maltrecha y la exigencia de ganar los partidos grandes. No lo ha conseguido en los seis meses que van de temporada y en los dos Clásicos, el de Liga y el de la final de la Supercopa de España en Arabia Saudí, fue barrido y humillado por el Barcelona. Ancelotti prometió que de las duras derrotas se aprende, pero lo que no se podía imaginar es de la escabechina que sufre en la línea defensiva. Sin Rüdiger ni Alaba, el desafío del derbi tiene más complicaciones.

No vale solo la calidad

La victoria contra el Leganés y estar en las semifinales de la Copa del Rey tiene un efecto reparador por haberla logrado con una defensa de circunstancias y sin Mbappé ni Bellingham. Ahora viene lo difícil. Ancelotti se mide primero a Simeone y después a Guardiola. El primero tiene al Atleti en dinámica ganadora y el segundo ha conseguido reforzar la plantilla con cuatro fichajes que han costado más de 220 millones de euros.

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Ulises Sánchez-Flor

Es un Real Madrid con problemas defensivos, pero del que se espera que dé la versión competitiva que mostró la temporada pasada. Se sobrepuso a las bajas importantes de Courtois, Militao y Álaba y, con sufrimiento y resiliencia, consiguió el éxito de la Liga y la Champions. El Real Madrid es, de nuevo, un equipo debilitado por las lesiones y su entrenador y el capitán se agarran al instinto de resistencia que les hace superarse en las adversidades.

"Con la calidad y sin compromiso colectivo, no basta", es la enésima advertencia del técnico italiano antes del derbi, en un claro reconocimiento de que está costando meter en la cabeza a los jugadores las obligaciones defensivas. En especial, el mensaje va dirigido para los cuatro de arriba: Bellingham, Rodrygo, Vinícius y Mbappé.

Es cómo quieren afrontar los partidos contra el Atleti y el Manchester City. No se pierde el tiempo en las lamentaciones, es innegociable ser solidarios y tener compromiso colectivo. Por si hay alguna duda, Modric y Ancelotti se lo hicieron saber a Vinícius en Butarque. El brasileño se desentendió del trabajo defensivo y se llevó la reprimenda del capitán y el entrenador. Contra el Atleti y el City dejan claro que no se gana con las individualidades y que si todos no defienden, se puede producir otro naufragio como en los Clásicos.