Julián Álvarez lanza al Atleti ante Osasuna y lo deja líder en solitario de la Liga (1-0)
Un tanto del delantero argentino bastó para que los colchoneros vencieran a los navarros y se mantengan al frente de la clasificación. El Madrid, a un punto; el Barça, a seis
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Hay instantes de felicidad de los que resulta fácil percatarse, momentos que invitan a que se congele el tiempo. Es la sensación que invade en estos tiempos El Metropolitano, el fortín del Atlético de Madrid en esta Liga, en la que ya es líder en solitario tras el triunfo ante Osasuna (1-0) con el gol de Julián Álvarez. Una victoria que deja a todos felices de camino a casa, el estado de ánimo más importante en las tardes de domingo.
El Atlético de Madrid, el 4-4-2 y una alineación que se recita prácticamente de memoria es un alegato constante a tiempos pasados, ya sea 1996 o 2014. Ambas ocasiones, como ahora en 2025, tenían un denominador común: Diego Pablo Simeone. En esta ocasión, emergieron Nahuel Molina y Le Normand en un once tan consolidado como este equipo. El fútbol es tan paradójico que uno puede encontrar el rumbo en uno de sus peores partidos. París fue testigo.
La tarde se presagiaba positiva, porque con una victoria se conseguiría el tan ansiado liderato. Enfrente estaba Osasuna, una escuadra tan noble como con buen pie, alejada del patrón que otrora se veía en El Sadar hasta que llegó Arraste para comandar una revolución continuada por Vicente Moreno.
El guion previsible, el de los más optimistas, parecía seguir su cauce cuando Griezmann adelantó a los colchoneros. El júbilo fue total hasta que el árbitro decretó la invalidez por haber rematado con el brazo. No conviene celebrar hasta que no haya certezas; que el balón cruce la línea tampoco lo es en este fútbol contemporáneo adaptado a las nuevas tecnologías.
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La aparición de Julián
Julián tuvo en sus manos el primer gol en un remate manso tras una loable jugada de Giuliano Simeone, que justificó una vez más su condición de titular. La garra y la entrega, signos inequívocos del Atleti, son consustanciales a su figura. Esos dos valores, a los que tanto ha apelado el Cholo, quizá sean los motivos por los que nadie lo saca del equipo. Y por los que la gente se identifica tanto con él.
El delantero argentino se quedó cabizbajo tras la jugada, consciente de la oportunidad desperdiciada. Pero en el fútbol nunca hay que elevar nada a definitivo, eso dice el Maestro Araújo. Lenglet le dejó el balón en el área chica tras una jugada ensayada y solo tuvo que batir a Sergio Herrera.
Spiderman había entrado de nuevo en escena, porque a este equipo, con miras a todos los títulos, no les basta con ser simples jugadores del Atleti. Un trofeo los elevaría a la gloria y les daría el estatus de superhéroes como ya tienen Oblak o Koke. Escuchar las historias de éxitos de los más veteranos puede convertirse en un arma de destrucción masiva.
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Las maneras de sufrir
La alegría que llegó tras el 1-0 dio paso a un largo rato de sufrimiento. Los colchoneros son de mitos y leyendas, y no era cuestión de desobedecer a Sabina y no apelar al sufrimiento casi perpetuo que acompaña a la camiseta en Madrid, París o Milán. Hay detalles que muestran con rotundidad la fisonomía del club.
Osasuna apretó en los minutos finales, pero no encontró el empate. El Atleti, otra vez con ese 4-4-2, sumó otro triunfo en Liga. El mismo once y la misma formación casi se podría concebir como una oda a la superstición, a la que siempre mira de reojo El Cholo, capaz de cambiar hasta nueve veces de hotel en Barcelona. Pero la victoria antes de Navidad le ha dado la razón; también lo hacen las matemáticas: su equipo es líder en solitario.
Hay instantes de felicidad de los que resulta fácil percatarse, momentos que invitan a que se congele el tiempo. Es la sensación que invade en estos tiempos El Metropolitano, el fortín del Atlético de Madrid en esta Liga, en la que ya es líder en solitario tras el triunfo ante Osasuna (1-0) con el gol de Julián Álvarez. Una victoria que deja a todos felices de camino a casa, el estado de ánimo más importante en las tardes de domingo.