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La grieta por la que se cuela la oposición a Laporta y cómo el Barça intenta taparla
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Conflicto social grave y en aumento

La grieta por la que se cuela la oposición a Laporta y cómo el Barça intenta taparla

Las protestas contra Laporta crecen con el cántico 'Barça sí, Laporta no"' pese a la expulsión de la Grada de Animación. El club intenta limitar más imágenes desagradables en Barbastro

Foto: El presidente del FC Barcelona, Joan Laporta, en la comida de Navidad con los medios. (EFE/Alberto Estévez)
El presidente del FC Barcelona, Joan Laporta, en la comida de Navidad con los medios. (EFE/Alberto Estévez)

Después de ser expulsados de Montjuic, los miembros de la Grada de Animación del Barça siguen movilizándose contra Joan Laporta y su junta directiva. Que el club los haya expulsado sine die del estadio azulgrana hasta que no paguen los 21.000 euros en multas no significa que vayan a guardar silencio. Es más, cada vez están más activos porque saben que el club los quiere sustituir cuando el Barça vuelva al Camp Nou, tal y como explican algunos miembros a El Confidencial.

Si en los últimos partidos como local del Barça se pudo escuchar alto y claro el Barça sí, Laporta no en directo y por televisión por parte de miembros dispersados por las gradas, los desplazamientos a domicilio están sirviendo para que los grupos que conforman la plataforma de animación enseñen músculo.

Con la visita al Signal Iduna Park del Borussia Dortmund, donde el equipo culé ganó por un épico 2-3, más de 3.000 personas estuvieron en las tribunas alemanas. Un desplazamiento de récord para el Barça en Europa. Sin embargo, el club evitó enseñar imágenes de las gradas azulgranas por redes sociales. El Barça sabía, como viene siendo habitual, que los cuatro grupos que pertenecen a la Grada de Animación acompañan al Barça fuera y que portan sus banderas y estandartes.

El problema se traslada a la Copa del Rey

Tras la visita del Atlético de Madrid a Montjuic, el Barça disputará su siguiente partido contra el Barbastro (Huesca), en la Copa del Rey, el próximo 4 de enero. A dos horas y media en coche desde Barcelona, el desplazamiento del Barça se presentaba como otra gran ocasión para que los grupos de animación azulgranas saciaran su sed de apoyar al equipo lejos de la Ciudad Condal. También, por supuesto, para protestar contra las medidas de Laporta respecto a ellos.

Sin embargo, el Barça ha maniobrado para evitar una imagen desagradable para el presidente azulgrana, que empieza a notar cómo los cánticos en su contra se han transformado en un leitmotiv y han enrarecido el ambiente festivo de Montjuic. Según explicaron los propios socios del Barça, el club les comunicó que no disponen de entradas para viajar hasta Barbastro y que todo el proceso recae en manos del equipo local.

Tal y como recogió Sport, desde el Barça aseguran que el club "sí" ha solicitado al Barbastro el porcentaje de entradas que le correspondería por normativa. Sin embargo, el presidente del Barbastro, José Antonio Fierro, explicó que el Barça "nos ha pedido unas pocas para sus compromisos y unas 65 pagadas". Correos recibidos por aficionados azulgranas tras consultar al Barbastro hablan de la posibilidad de unas 400 entradas correspondientes al Barça que el club no ha puesto a disposición de sus socios.

Según ha podido saber este periódico, el Barça tan solamente solicitó 135 entradas. Por su parte, y tal como recoge Mundo Deportivo, la vicepresidenta azulgrana, Elena Fort, anunció en la última Asamblea que el Barça renunció al derecho de conseguir un cupo legal de un 10% entradas como "deferencia a clubes modestos para que puedan satisfacer las demandas de los aficionados locales en un día histórico". Una decisión muy conveniente para evitar una imagen desagradable donde Laporta quede señalado.

Las alternativas de Laporta no funcionan

A Joan Laporta no le gustó nada escuchar "Xavi sí, Laporta no" cuando el presidente azulgrana jugaba al gato y al ratón con la destitución del técnico del Barça el curso pasado. El presidente no olvida cómo las casi 600 personas que conforman la Grada de Animación se han convertido, con el paso del tiempo, en un elemento incómodo dentro del estadio culé y han discutido sus decisiones.

Por ese motivo, la junta dirigida por Laporta ha tratado de llenar el vacío que han dejado los grupos de animación. Primero vacío la tribuna, luego puso las entradas a la venta y finalmente, invitó a una charanga musical para dar un poco de vida a un estadio desangelado, lleno de turistas y sin ambiente. De hecho, y a raíz de las críticas por redes sociales, la Xaranga Pujats de To, decidió emitir un comunicado para dejar clara su postura.

"El FC Barcelona nos propuso llevar a cabo una colaboración totalmente desinteresada, sin ningún tipo de lucro, con el único objetivo de apoyar a la afición y al equipo. En este partido únicamente se interpretaron los cánticos del club. Dada la situación, hemos considerado necesaria hacer esta información pública, y dejar ver los valores que perseguimos; la transparencia, la buena fe y la afición por el deporte que tanto amamos todos nosotros", detalló el grupo.

Lo que sí es seguro es que Joan Laporta tiene en mente sustituir para siempre a la Grada de Animación en el Camp Nou. "Estamos trabajando un nuevo modelo de animación y más soluciones para esta temporada. Ha habido un problema con la grada de animación, incumplieron el convenio firmado de que si había multas de antiviolencia ellos se harían cargo. Estamos a la espera de más multas y no podemos estar pagando multas por comportamientos que condena antiviolencia. Por eso no están en esa zona del estadio y estamos invitando a peñas y cada peña tiene su forma de animar", confesó Laporta en la Asamblea.

Después de ser expulsados de Montjuic, los miembros de la Grada de Animación del Barça siguen movilizándose contra Joan Laporta y su junta directiva. Que el club los haya expulsado sine die del estadio azulgrana hasta que no paguen los 21.000 euros en multas no significa que vayan a guardar silencio. Es más, cada vez están más activos porque saben que el club los quiere sustituir cuando el Barça vuelva al Camp Nou, tal y como explican algunos miembros a El Confidencial.

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