El inhabilitado Rocha no podrá ser candidato a la RFEF... ¿y se postula el inhabilitado Louzán?
La Audiencia Nacional deja al extremeño fuera de la carrera por presidir el fútbol español y diez presidentes de territoriales se juntan para buscar una alternativa, con el gallego a la cabeza
Como diría Alexia Putellas, se acabó. Tras un día de tensa espera, la Sala de lo Contencioso-Administrativo de la Audiencia Nacional ha desestimado el recurso que Pedro Rocha presentó contra el primero de los dos autos en los que le denegaron las medidas cautelares a la sanción de dos años de inhabilitación que le impuso el Tribunal Administrativo del Deporte (TAD). Esta era la última bala que le quedaba al extremeño, quien ya puede jubilarse y centrarse en su defensa en el caso Brodie.
Definitivamente, el también investigado expresidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), en la misma causa judicial que su antecesor, Luis Rubiales, no podrá presentar su candidatura en unas elecciones que este lunes entraron en su recta final tras quedar constituida la nueva Asamblea, con los 141 miembros que serán los encargados de elegir al nuevo presidente en la votación prevista para el próximo 16 de diciembre
Paradójicamente, Rocha era el favorito para imponerse en los comicios a pesar de sus circunstancias. No en vano, de haber podido presentarse, probablemente no hubiera habido ni siquiera elecciones, ya que contaba con el apoyo de la mayoría de los presidentes de territoriales, los llamados barones, así como del presidente de LaLiga. Un Javier Tebas que se ha desvivido por intentar que el extremeño pudiera presentarse y volver a ponerlo al frente de la RFEF. ¿La razón? Era su florero.
Con la excusa de que este miércoles se celebró en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas el sorteo de la segunda ronda de la Copa del Rey, los mencionados barones se citaron para debatir sobre quién de ellos puede ocupar la vacante de Rocha y presentar su candidatura desde este jueves y hasta el próximo martes, 3 de diciembre, después de que la RFEF ampliara en un día el calendario fijado inicialmente. A diferencia del resto de posibles candidatos, aunque de momento solo Juanma Morales ha dado el paso de oficializar en un acto su candidatura, los 21 avales necesarios no serían un problema para ellos.
El principio de neutralidad ya se incumplió con Villar
Acabado el sorteo de Copa, los presidentes de territoriales se vieron fuera de la sede de la RFEF para evitar así dar oficialidad a su reunión. Y es que, tal y como se apresuró a avisarles Miguel Galán, presidente de la escuela de entrenadores CENAFE, podrían incumplir el deber de neutralidad. De hecho, la mayoría de ellos ya fueron inhabilitados tres meses por firmar una carta de apoyo a Ángel María Villar en las elecciones de 2017.
Curiosamente, los 16 presidentes de territoriales que firmaron dicho escrito, no solo destacaban la labor de Villar, sino que también criticaban el "acoso" que, según ellos, venían sufriendo por parte de Javier Tebas, a quien ahora tienen de su lado. Aunque, claro, una vez caído Pedro Rocha, el presidente de LaLiga tampoco se fía de todos ellos. Su predilecto es el gallego Rafael Louzán, casualmente también inhabilitado y únicamente pendiente de que la sentencia sea firme.
De aquí otra de las discrepancias que pueden surgir a la hora de elegir al sustituto de Rocha, porque a Louzán no le permite ser presidente de la RFEF el artículo 19.4 de los estatutos, donde se deja claro que no puede serlo alguien que esté inhabilitado para ejercer cargos públicos.
Manu Díaz, presidente de federación guipuzcoana, con voz, pero sin voto, se negó a acudir a la comida que tuvo lugar en Torrelodones y así se lo hizo saber a sus compañeros a través de una carta. “No voy a contribuir a un nuevo capítulo de la triste historia que estamos viviendo desde hace más de un año, ni ser testigo impasible de otra muestra de una forma de gobernar completamente alejada de lo que nos exige la sociedad”, escribe Díaz. Una postura que le honra y a la que se unieron otros barones, algunos de los cuales también quieren democratizar las elecciones en lugar de convertirlas en un nuevo pucherazo.
Diez barones se juntaron a comer en Torrelodones
Tal y como adelantó Relevo, finalmente fueron diez los presidentes que se juntaron para comer y debatir el futuro de la RFEF, a la espera siempre de conocer qué pasaba con Rocha. Con el citado Louzán (Galicia) a la cabeza, el resto de los asistentes fueron Paco Díez (Madrid), Salvador Gomar (Comunidad Valenciana), Jacinto Alonso (La Rioja), Pablo Lozano (Andalucía), Pablo Burillo (Castilla-La Mancha), Joan Soteras (Cataluña), José Juan Arencibia (Canarias), Jordi Horrach (Baleares), y Sergio Merchán (Extremadura).
Por contra, no acudieron José Ángel Peláez (Cantabria), Marcelino Maté (Castilla y León), Rafael del Amo (Navarra), quien ese mismo día fue reelegido presidente de su territorial, Antonio García Gaona (Ceuta), José Miguel Monje (Murcia), Manuel Torralba (Aragón), Diego Martínez (Melilla), Javier Landeta (País Vasco), más los presidentes interterritoriales que no tienen voto, como el citado Manu Díaz, Kepa Arrieta (Álava), Iñaki Gómez Mardones (Vizcaya) y Alejandro Morales Mansito (Tenerife).
Como puede comprobarse, una división más que evidente, que invita a pensar que, sin Rocha y con Louzán señalado, es posible que todavía pueda haber unas elecciones, si no del todo limpias, menos sucias de lo que algunos pretendían y siguen pretendiendo para que nada cambie. Parafraseando el famoso "ser o no ser" de Hamlet, "querer o no querer, esa es la cuestión".
Como diría Alexia Putellas, se acabó. Tras un día de tensa espera, la Sala de lo Contencioso-Administrativo de la Audiencia Nacional ha desestimado el recurso que Pedro Rocha presentó contra el primero de los dos autos en los que le denegaron las medidas cautelares a la sanción de dos años de inhabilitación que le impuso el Tribunal Administrativo del Deporte (TAD). Esta era la última bala que le quedaba al extremeño, quien ya puede jubilarse y centrarse en su defensa en el caso Brodie.