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Un cabezazo de Giménez impulsa al Atleti ante el Leipzig en su debut en esta Champions (2-1)
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Primera jornada de la fase de grupos

Un cabezazo de Giménez impulsa al Atleti ante el Leipzig en su debut en esta Champions (2-1)

El gol de Antoine Griezmann empató el inicial de Sesko. Cuando estaba a punto de llegar el descuento, el tanto del uruguayo le dio la victoria a los colchoneros en un épico final

Foto: Griezmann empató el partido. (Reuters/Violeta Santos Moura)
Griezmann empató el partido. (Reuters/Violeta Santos Moura)

El Atlético de Madrid ha ganado al Leipzig (2-1) en su debut esta temporada en la Champions League. Se adelantaron los alemanes por medio de Sesko, pero Antoine Griezmann empató el encuentro en un duelo que dejó a los rojiblancos con un sabor inmejorable. Un cabezazo de Giménez a un minuto del final le dio la victoria a los colchoneros.

El plan inicial de Simeone se desmoronó a los cinco minutos. Sesko abrió el balón hacia Nusa, ubicado en la banda, que acabó dentro del área. Su remate fue rechazado por Jan Oblak, pero Sesko cabeceó en el rechace para que los alemanes se pusieran por delante. Llegó la sorpresa en El Metropolitano.

Los locales, no obstante, superaron el mazazo a base de rabia. Apenas dejaron salir a los teutones de su campo, en un constante intento por recuperar la pelota lo más arriba posible. Así empezaron a llegar las ocasiones, comandadas por un Griezmann sumamente cómodo en ese papel de enganche que ejerce.

Un remate de Ángel Correa fue el preámbulo de que el gol estaba cerca. En un saque de esquina, ejecutado con rapidez, centró Rodrigo Riquelme. El argentino la tocó lo justo en el primer palo e impactó en el segundo. Luego la pelota se paseó por toda la línea hasta que la atrapó el portero. El peligro aumentaba.

placeholder Oblak, indignado tras el gol del Atleti. (EFE/Chema Moya)
Oblak, indignado tras el gol del Atleti. (EFE/Chema Moya)

La felicidad de la hinchada

Fue Griezmann el que se encargó de certificar el buen momento del Atleti. Un centro de Marcos Llorente desde la derecha llegó al corazón del área, donde el francés remató con una señora volea con la diestra. El éxtasis se desató en El Metropolitano, felices como nunca con un empate que hacía justicia a lo visto hasta ese momento.

La segunda mitad, eso sí, fue bastante discreta por parte de ambos equipos. La neutralidad fue bastante manifiesta, e incluso se evidenció con el triple cambio ejecutado por Simeone. Lino, Gallagher y Sorloth salieron para reemplazar a Julián Álvarez, Riquelme y De Paul. El banquillo tenía que resolver lo que hasta ese momento era inamovible.

placeholder Sorloth reemplazó a Álvarez. (EFE/Chema Moya)
Sorloth reemplazó a Álvarez. (EFE/Chema Moya)

El encaje de las nuevas piezas

La tuvo Griezmann a diez minutos del final, en un remate que se quedó muy cerca del gol de no haber mediado la intervención de Gulacsi. El cabezazo iba a la escuadra, pero la intervención del portero fue espectacular. De esas que ganan puntos, sumamente importantes y aún más en este nuevo formato de la Champions.

Todo apuntaba a un claro empate entre los equipos, pero la épica llegó de nuevo. Giménez cabeceó el centro de Griezmann para darle el triunfo a los rojiblancos, en una celebración que llevó a Simeone hasta el córner.

El Atleti consiguió una victoria vital en este debut en la Champions. También confirmó que todavía tiene que encajar a esas piezas nuevas para dar el ansiado salto de calidad que anhelan en El Metropolitano. Todo es cuestión de tiempo.

El Atlético de Madrid ha ganado al Leipzig (2-1) en su debut esta temporada en la Champions League. Se adelantaron los alemanes por medio de Sesko, pero Antoine Griezmann empató el encuentro en un duelo que dejó a los rojiblancos con un sabor inmejorable. Un cabezazo de Giménez a un minuto del final le dio la victoria a los colchoneros.

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