El Real Madrid, el único club que cierra la puerta al fútbol femenino (con sus futbolistas dentro)

"He escuchado a las jugadoras del Barça, como lo he hecho con las 325 futbolistas restantes", comentó hace un par de días Beatriz Álvarez en una entrevista con el diario AS. Efectivamente, con el objetivo de conocer de primera mano sus inquietudes, la presidenta de la Liga F visitó la temporada pasada a los 16 equipos que compitieron en la segunda edición de la liga profesional femenina de fútbol. En todos los clubes le abrieron las puertas del vestuario, salvo en uno: el Real Madrid.

Este hecho no es casual, sino más bien causal, pues no hay que olvidar que el club que preside Florentino Pérez se resistió a firmar los estatutos para que esta competición fuera profesional. Una de las cuatro que hay en España, junto a su hermana mayor, LaLiga, la Liga ACB, de baloncesto, y la Liga ASOBAL, de balonmano. Después de hacerlo, más que impulsarla, lo que ha hecho es ponerle palos en las ruedas, exactamente lo mismo que hizo Luis Rubiales, no en vano su gran aliado.

Claro que de esta forma el Real Madrid no solo no ayuda a la Liga F, de por sí con graves problemas en su gestión, sino que tampoco lo hace con sus propias futbolistas. Sirva el dato de que, en la reciente pretemporada, no fue televisado ningún amistoso. Ni los disputados en el Estadio Alfredo di Stéfano, ni tampoco los de fuera, pues el único que estaba previsto televisar se tuvo que suspender y luego se les debió de olvidar conectar las cámaras.

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Pero hay muchas cosas más. A las futbolistas del conjunto blanco no se les permite hablar con los medios. No lo hacen ni antes ni después de los partidos. De hecho, las entrevistas que suelen conceder son cuando van con la Selección española. Su propio entrenador, Alberto Toril, solo habla en Real Madrid Televisión, algo incomprensible, pero que deja claro el desprecio, no ya a los medios que intentan dar difusión al fútbol femenino, sino al propio fútbol femenino.

Las relaciones con la RFEF no son lo que eran

Hablando de la Selección, actualmente las relaciones de Florentino con la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) no son tan estrechas como, paradójicamente, lo eran en la etapa de Rubiales y Jorge Vilda, imputados ambos por la Audiencia Nacional en el caso Jenni Hermoso. Entonces, la amistad de Pérez con Rubi, así como la del exseleccionador con Ana Rossell, directora deportiva del club blanco, provocó situaciones tan curiosas como que en el famoso motín de las 15 no hubiera ninguna jugadora del Real Madrid.

Esta falta de visibilidad o exposición mediática les impide ser atractivas para las marcas, algo que sí tienen sus compañeras del FC Barcelona, donde evidentemente y siempre al margen de los éxitos deportivos, es más fácil lograr contratos de patrocinio, así como optar a premios individuales como el Balón de Oro. Prueba de ello es que muchas de las futbolistas que salen del Real Madrid, como Marta Corredera o Ivana Andrés, lo hacen por la puerta de atrás y denunciando lo que han padecido.

Este mismo verano, el 19 de agosto concretamente, se inauguró The Corner by Real Madrid en la Terminal 4 del Aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas y al acto no asistió ninguna jugadora del equipo femenino. Las futbolistas se quejan, pero en la intimidad, pues no se atreven a levantar la voz. Tampoco porque su club sea el único de LaLiga que no ha abierto las puertas de su campo, en este caso el remozado Estadio Santiago Bernabéu, para un partido de su equipo femenino.

Solo una jugadora en el Mundial Sub 20

En el aspecto puramente deportivo, para esta temporada que acaba de empezar no se ha fichado a ninguna jugadora para el segundo equipo, solo una para el juvenil y algunas para el cadete, entre las que se encuentra la hija de Roberto Carlos, que se une a las de Raúl y Casquero. De hecho, en el Mundial Sub 20 solo hay una jugadora del Real Madrid, la guardameta española Sofía Fuente.

Su organigrama sigue siendo todo un enigma, al menos de cara al exterior, con esa bicefalia que forman Begoña Sanz y Ana Rossell. La primera, adjunta al director general, José Ángel Sánchez, tiene todo el poder de decisión. La segunda es la directora deportiva, aunque no es fácil encontrar su verdadero cargo y no digamos ya sus funciones.

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Por último, a nivel institucional, desde su desembarco en el fútbol femenino, el Real Madrid se ha dedicado a poner pegas a las iniciativas de la Liga F, votando en contra de todas las propuestas e, incluso, amenazando con judicializarlas, tal y como acostumbran a hacer en LaLiga.

Quién sabe, quizás ahora que el club que preside Florentino Pérez ha entrado a formar parte de la Comisión Delegada, su actitud cambie. Si bien parece claro que primero debería cambiarla con respecto a su propia sección de fútbol femenino, donde las futbolistas se sienten amordazadas, de ahí precisamente que no se atrevan a denunciarlo, mientras ven cómo su club torpedea su competición profesional, con consecuencias nada positivas.