Se busca testaferro para seguir con la campaña de acoso y derribo que quiere acabar con Tebas

Si por algo se caracteriza Javier Tebas es por ser frontal y sincero. "Hace tiempo que el Real Madrid quiere apartarme de la presidencia de LaLiga por lo civil, lo criminal o lo administrativo", dijo cuando el secretario de Estado para el Deporte, José Manuel Rodríguez Uribes, elevó al Tribunal Administrativo del Deporte (TAD) una denuncia que le puso el club que preside Florentino Pérez, por un presunto trato discriminatorio en el acuerdo que LaLiga suscribió en 2021 con CVC.

Atendiendo al principio de proporcionalidad, no convocar una asamblea con los suficientes días de antelación y no dar acceso a los díscolos Real Madrid y FC Barcelona a una reunión telemática —en la que, por cierto, el propio Consejo Superior de Deportes (CSD) estaba representado— no parecían motivos suficientes para que dicha denuncia fuera a prosperar. "Se presentó hace más de un año y me sorprende que la eleven porque el CSD ya dijo que la sentencia no era firme, además de que se subsanó en una asamblea posterior", explicó el propio Tebas.

Sin embargo, el 23 de julio, casualmente tras una comida de Florentino con Uribes de la que informamos en este periódico, el TAD abrió expediente disciplinario a Tebas por una causa considerada "muy grave". Enseguida, detrás de esta decisión se vio la sombra del anfitrión del palco del Bernabéu. El mismo que tanto frecuentan los ministros del único Gobierno que rechazó firmar una declaración relativa al modelo del deporte europeo, con la excusa de que "el caso Superliga está sub iudice".

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Es decir, lo mismo que sucede con el caso de CVC, pues el Juzgado de Primera Instancia N.º 15 de Madrid desestimó la demanda contra LaLiga de Real Madrid y Athletic de Bilbao, en la que también estaban el FC Barcelona y la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), aunque estos finalmente decidieron retirarse. "La sentencia confirma la legalidad de la operación, señalando que se ajusta a los marcos legales y estatutarios vigentes", comunicaron desde la patronal del fútbol español.

Ante el silencio del TAD, había que agitar el avispero

Pero, claro, como quiera que estamos a mitad de septiembre y nada se ha vuelto a saber del TAD, parece evidente que había que agitar el avispero. Así, como adelantó El Español, una nueva denuncia contra Tebas ha llegado al CSD. En este caso, el motivo es por incumplir las normas de Transparencia y Buen Gobierno, aunque con un extraño remitente, cuyo nombre de hecho no se incluyó en la mencionada información, pero que está claro que no es el Real Madrid. ¿Quizás se trate del (o la) testaferro que Florentino Pérez andaba buscando?

"No hay caso", dicen expertos juristas sobre esta nueva denuncia a Tebas, víctima de una campaña de acoso y derribo claramente liderada por Florentino Pérez, pero en la que también participó activamente Rubiales, quien fuera su gran aliado desde que llegara a la RFEF. Junto a ellos, el citado Gobierno de Pedro Sánchez, a quien el presidente del Real Madrid no se ha cansado de pedir la cabeza de su homólogo de LaLiga.

En los mentideros futbolísticos se habla de que esta fue su condición para sacar el equipo femenino al que tan poca atención presta, algo que evidentemente Sánchez no ha cumplido. Es más, Tebas ha estado estos días junto al presidente del Gobierno en Pekín con motivo del encuentro del Consejo Asesor Empresarial Chino-Español, del que LaLiga es miembro fundador desde 2018. Eso sí, ni viajaron en el mismo avión y, como puede comprobarse, en la foto no pudieron ponerse más separados.

Las diferencias con las denuncias de Miguel Galán

Volviendo a la última denuncia, a diferencia de las del infatigable Miguel Galán, quien siempre va a cara descubierta, pagándolas de su bolsillo y logrando nada menos que la inhabilitación de los últimos tres presidentes de la RFEF, las de Pérez son bajo el paraguas de su club y aireadas por medios que llegan a afirmar que "el CSD está obligado a elevar al TAD todas las denuncias fundamentadas que le lleguen", pero nada dijeron cuando José Manuel Franco y su sucesor, Víctor Francos, se negaron a hacerlo con las muchas que llegaron contra Rubiales, la mayoría de ellas actualmente en el Juzgado de Primera Instancia N.º 4 de Majadahonda.

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Por último, hay otra clave para entender por qué el TAD ha podido abrir un expediente disciplinario al presidente de LaLiga por dos temas menores, pero que calificó de "faltas muy graves", cuando el bochornoso comportamiento de Rubiales tras la final del Mundial femenino solo lo consideró "falta grave", casualmente lo que impidió su inhabilitación inmediata por parte del CSD. Esta no es otra que la influencia que ejerce Tomás González Cueto, cerebro jurídico del expresidente de la RFEF y exmiembro de este tribunal, quien también le tiene ganas a Tebas, aunque bastante tiene con lo suyo.