La explosión de Fabián Ruiz con España y el marrón que no se quiso comer Luis de la Fuente
Fabián Ruiz no tiene la repercusión mediática ni es tan divertido de ver como los jóvenes Lamine Yamal y Nico Williams, pero rompe como estrella de la Selección española
A Luis de la Fuente le sale todo bien hasta cuando se equivoca. Quitar a Lamine Yamal en el descanso contra Suiza pareció un disparate o una concesión al Barcelona por la alarma de una posible lesión. Lamine, que ha jugado todo con el Barça en la Liga y disputó todo el partido contra Serbia, era un cambio programado por el seleccionador para quitarse el marrón. No quiso exprimir al extremo, el mejor jugador en la primera parte y, con uno menos, justificó el cambio con el argumento de la fatiga.
Salió Ferran Torres y funcionó. Asistencia y gol en una segunda parte en la que España jugó como un equipo menor, con las líneas juntas, metido en su campo y acciones de contraataque. Sin Lamine Yamal, figura en la Eurocopa y uno de los extremos más en forma del mundo, España también supo cómo ganar con el 38% de la posesión del balón, el dato más bajo que se le recuerda.
Renunciar a Lamine Yamal es un atrevimiento de un seleccionador que prioriza el equipo por encima de las individualidades. Es el gran mérito de Luis de la Fuente. a conseguido lo que siempre buscó su antecesor. La filosofía de Luis Enrique era tener un equipo de soldados que fueran capaces de ganar de forma colectiva. No quería estrellas y se nombró líder del grupo. Luis de la Fuente es diferente. España compite y gana con más registros futbolísticos que en la etapa del asturiano y se adapta mejor a lo que necesita en cada partido según las circunstancias.
Un alto porcentaje de este éxito está en el altísimo rendimiento de Fabián Ruiz, autor de dos goles y una asistencia contra Suiza. El centrocampista del Paris Saint-Germain voló en Ginebra. Cobran importancia las palabras de Luis de la Fuente sobre este jugador tras la victoria contra Croacia en el primer partido de la Eurocopa. "Es un jugador de nivel mundial y, si no se llamase Fabián, se hablaría mucho más de él", reivindicó De la Fuente.
No le falta razón. Es más divertido el juego de Lamine Yamal que el de Fabián. El joven jugador del Barcelona tiene más foco mediático y repercusión por la precocidad de su talento. Enganchan más el descaro, los regates y los bailes en los goles y en los vídeos que suben en sus redes sociales Lamine Yamal o Nico Williams que el oficio y la humildad de Fabián Ruiz.
Estrella en la sombra
Con el partidazo de Fabián contra Croacia empezó todo lo bueno que le está sucediendo a España desde el 15 de junio. Fabián marcó un gol, dio una asistencia a Morata y fue elegido el mejor jugador del partido. Normal que Luis de la Fuente pusiese en valor todo el potencial que despliega este centrocampista con el que Luis Enrique no contó para el Mundial de Qatar. Es cierto que el asturiano le hizo debutar con la Absoluta, pero después de la Eurocopa de 2021 dejó de llevarlo. Algo pasó que no ha trascendido.
Luis de la Fuente ha depositado su confianza en Fabián Ruiz, un jugador que conoce sobradamente y que fue el mejor en la Eurocopa Sub-21 que ganó en 2019 con De la Fuente en el banquillo. Es intocable desde que el riojano se hizo cargo de la absoluta, le ha convertido en un llegador al área con gol, al estilo de lo que hizo Ancelotti con Bellingham la pasada temporada, y mucho sacrificio defensivo.
"Fabián es la representación de todos esos jugadores que están trabajando en la sombra, pero que deberían tener el reconocimiento mediático por los méritos que tienen", elogia el seleccionador del futbolista sevillano. ¿Cómo no va a ser bueno y humilde un tipo que convivió en el Betis con su madre limpiando los vestuarios? En los orígenes y lo que le ha costado llegar hasta ser una figura del fútbol está la explicación de un jugador fundamental para España y ya considerado como vital para Luis Enrique en el PSG.
A Luis de la Fuente le sale todo bien hasta cuando se equivoca. Quitar a Lamine Yamal en el descanso contra Suiza pareció un disparate o una concesión al Barcelona por la alarma de una posible lesión. Lamine, que ha jugado todo con el Barça en la Liga y disputó todo el partido contra Serbia, era un cambio programado por el seleccionador para quitarse el marrón. No quiso exprimir al extremo, el mejor jugador en la primera parte y, con uno menos, justificó el cambio con el argumento de la fatiga.
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