Odriozola, con 96 minutos, asume su final en el Madrid y ya sondea su regreso a la Real
El lateral donostiarra, que esta temporada solo ha disputado 96 minutos, podría encajar en los planes de Olabe, siempre y cuando salga con la carta de libertad y se rebaje la ficha
Después de una temporada en la que Carlo Ancelotti solo le ha dado un total de 96 minutos, 56 en la Copa del Rey, 36 en LaLiga y 1 en el Mundial de Clubes, es decir, ninguno en la Supercopa de España ni en la Champions League, Álvaro Odriozola (San Sebastián, 1995) tiene más que asumida su inminente salida del Real Madrid. "Estamos felices de tenerte y segurísimos de que vas a triunfar aquí", le dijo en su día su tocayo Arbeloa, el sorprendente encargado de darle la bienvenida, pues nunca se supo muy bien si lo hizo como representante del club o de la agencia de representación con la que tiene vinculación.
Sin embargo, el lateral, para quien ir al Madrid fue "como si cuando eras niño viene tu padre y te dice si quieres ir a Disney", no ha podido triunfar de blanco y ya sondea la posibilidad de volver a ponerse las rayas azules de la Real Sociedad, el club del que es canterano y del que hace cinco años salió en dirección al Bernabéu. Claro que para ello será necesario que el club que preside Florentino Pérez le dé la carta de libertad, algo lógico al no entrar en los planes de su entrenador, pues aún le resta una temporada más de contrato y se antoja una condición sine qua non, además de rebajarse la ficha y amoldarla a los parámetros económicos de la Real.
En este sentido, tiene a su favor la buena relación del presidente de la Real, Jokin Aperribay, con su homólogo del Real Madrid, así como el hecho de que a Odriozola le represente la agencia con la que, además del mencionado Arbeloa, también el hijo de Florentino guarda una estrecha relación. Cabe recordar que hace cinco veranos, el club blanco no abonó su cláusula de 40 millones de euros, ya que la Real aceptó negociar, si bien la operación se cerró en 30 millones fijos más cinco en variables. Uno de estos era un millón más por cada 20 partidos jugados, por lo que ya son al menos 32.
Por diversas circunstancias, aunque la primera quizás sea la indiscutible titularidad de Dani Carvajal, Odriozola no ha logrado hacerse un sitio en el Real Madrid. De ahí que primero saliera cedido al Bayern de Múnich, con el que tan solo disputó 5 partidos, y posteriormente a la Fiorentina, donde tuvo la oportunidad de jugar 27. De hecho, y como dato que demuestra que la posible vuelta del lateral donostiarra a la Real sería como una especie de regreso a futuro, el segundo equipo txuri urdin, conocido como el Sanse, sigue siendo con el que más partidos ha jugado Odriozola, 86, por los 57 en la Real, más también que los disputados en el Madrid, 49.
¿Un viaje de ida y vuelta como Illarra?
Su marcha de Zubieta se aceleró tras la eliminación de España del Mundial 2018, para el que Odriozola fue convocado por Julen Lopetegui, curiosamente su primer entrenador en el Real Madrid, aunque no en Rusia, después de la estrambótica decisión de Rubiales de destituir al seleccionador español a dos días del debut mundialista. Con Lopetegui jugó 4 partidos durante la efímera etapa del técnico guipuzcoano en el banquillo del Bernabéu. Con Solari fueron 17 y con Zidane 25, pero los 6 que suma con Ancelotti han terminado por condenarle al ostracismo y dejarle claro que su futuro pasa por volver a hacer las maletas, aunque no como cedido, sino como traspasado, pues al menos el Real Madrid se ahorrará su ficha.
Por otro lado, el lateral derecho es uno de los puestos que la Real deberá reforzar este verano, toda vez que Imanol Alguacil ha tenido muchos problemas para cubrirlo con garantías. A la decepcionante temporada de Alex Sola, una apuesta que conllevó dejar a Joseba Zaldua irse libre al Cádiz, pero a quien las reiteradas lesiones no le han permitido hacerse con la titularidad, se suman las limitaciones de un Andoni Gorosabel que ha ido de más a menos. Si a esto se le suma que Aritz Elustondo, la tercera opción, es más central que lateral, no cabe duda de que el regreso de Odriozola sería un gran refuerzo. Especialmente en tareas ofensivas, tan importantes en un lateral en el juego de la Real, aunque a Imanol quizás le surja alguna duda a la hora de defender.
A la espera de ver cómo se desarrollan los acontecimientos, empezando por cómo termina una temporada en la que la Real está a dos puntos de clasificarse para la Champions League, parece claro que el regreso de Odriozola va a depender de la voluntad de las dos partes, pero también de que el Real Madrid le deje salir libre. De este modo, el donostiarra haría el mismo camino de ida y vuelta de Asier Illarramendi, con la diferencia de que en el caso del centrocampista Aperribay se avino con Florentino a que la operación no fuera tan ruinosa y desembolsó 17 millones, un poco más de la mitad de los 39, 32 millones de su cláusula de rescisión más el IVA, que pagó por él. Justo ahora que Illarra ha anunciado que no seguirá en la Real, a pesar de que el club quería que lo hiciera, Odriozola podría estar de vuelta.
Después de una temporada en la que Carlo Ancelotti solo le ha dado un total de 96 minutos, 56 en la Copa del Rey, 36 en LaLiga y 1 en el Mundial de Clubes, es decir, ninguno en la Supercopa de España ni en la Champions League, Álvaro Odriozola (San Sebastián, 1995) tiene más que asumida su inminente salida del Real Madrid. "Estamos felices de tenerte y segurísimos de que vas a triunfar aquí", le dijo en su día su tocayo Arbeloa, el sorprendente encargado de darle la bienvenida, pues nunca se supo muy bien si lo hizo como representante del club o de la agencia de representación con la que tiene vinculación.