Falla a puerta vacía tras cruzarse el campo y los compañeros le hacen repetir el disparo

La DBF Pokal, la competición copera alemana, va llegando a su fase decisiva y uno de los equipos que empiezan a ganar opciones de llevarse el título es el Union Berlín. El conjunto de la capital de Alemania está completando una asombrosa temporada. Actualmente ocupan la segunda plaza de la tabla clasificatoria de la Bundesliga, solo un punto por debajo del Bayern de Múnich, y están metidos de lleno en la emocionante pelea entre varios equipos por salir campeón.

Por si fuera poco, también sigue avanzando rondas en la Pokal y este martes se impuso al Wolfsburgo en la ronda de octavos de final para colarse entre los ocho mejores del torneo. Para ello tuvieron que remontar en el An der Alten Försterei, su estadio, el tanto inicial visitante de Waldschmidt con los goles de Knoche y Behrens.

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Más allá del resultado, con el pase del Union Berlín a los cuartos de final de la competición copera, hubo una jugada que acaparó los focos, tanto en el tramo final como una vez concluida la eliminatoria. Y tuvo al defensa francés Jerome Rousillon como protagonista, precisamente en un duelo en el que se enfrentaba al que había sido su equipo apenas un par de semanas antes.

El Wolfsburgo sacó un córner en el tiempo de descuento volcado en busca del empate, con el portero Pervan subiendo para rematar el saque de esquina, y la pelota le cayó a Rousillon, quien llevaba en el campo apenas tres minutos, después de una galopada en la que superó por velocidad a todos para quedarse con el despeje de un compañero. El defensa francés quiso asegurar con su pierna buena, la zurda, dando tiempo a Van de Ven a ponerse debajo de la portería y a sacar la pelota con una acción milagrosa.

Pese a ello, el Union Berlín acabó imponiéndose y sacando adelante el partido, pero el fallo de Rousillon no quedó en el olvido y al final del partido, ya con el pase asegurado, sus compañeros y parte del cuerpo técnico le hicieron repetir la acción entre risas. Esta vez, con la derecha y ya sin nadie bajo los palos, el francés no falló y mandó la pelota a la red mientras pedía disculpas a su nueva afición.