Sergio Ramos arranca de su cabeza las dos pesadillas que estuvieron cerca de hundirle

Sergio Ramos necesita resarcirse en su club, recuperar el terreno perdido por las lesiones y sentir que si rinde hay un seleccionador que dará un valor justo a su esfuerzo. Luis Enrique se convirtió en una pesadilla y Luis de la Fuente es un rayo de luz. Empieza el desquite de los dos dolores de cabeza que casi le hunden su carrera futbolística. Tiene deudas pendientes tras un año en el que no se vio nada de la imagen de defensa inexpugnable que tenía en el Real Madrid. Su primera temporada en el Paris Saint-Germain se puede calificar de fracaso y en la segunda, hasta el parón del Mundial, hay brotes verdes del mejor Sergio Ramos.

Al sevillano se le ve con un plus de energía y motivación tras el Mundial de Qatar. En su última publicación en un vídeo en Instagram muestra su poderío en diferentes ejercicios del entrenamiento y en uno de ellos con Mbappé de rival. El Paris Saint-Germain regresa a la competición este miércoles con el enfrentamiento contra el Estrasburgo. Para Ramos es el punto de partida para afrontar un intenso calendario de partidos hasta llegar al mes de marzo, la primera fecha en la que Luis de la Fuente tendrá que valorar si ha hecho méritos para regresar a la Selección.

El año lo acaba de una forma muy diferente a como lo empezó. La lesión en el sóleo que le generó demasiados problemas, perderse una gran cantidad de partidos, entre ellos la eliminatoria de Champions con el Real Madrid, está superada. Ha logrado remontar y volver a jugar con regularidad hasta antes del parón mundialista. Esta temporada lleva disputados 20 partidos, por los 13 que solo pudo jugar en toda la temporada pasada. Pero la recuperación no sirvió para convencer a Luis Enrique. Lo que más le molestó es cómo justificó su ausencia de la lista mundialista: "Así es la vida. Esto no es una ONG".

La esperanza de Luis de la Fuente

Lo que se juega en los tres próximos meses es confirmar si verdaderamente tiene continuidad en el equipo de Christophe Galtier y mantiene un alto nivel competitivo para que Luis de la Fuente se tenga que plantear su regreso. A Luis Enrique no le era útil. Se lo cargó en el momento de la remontada. Ramos, por rendimiento, continuidad y experiencia, estaba convencido de que podía haber estado en Qatar. Pero a Luis Enrique no le encajaba en su filosofía de juego, en el estilo innegociable de sacar la pelota jugada desde atrás y eligió que era mejor jugar con Rodrigo de central. Visto el Mundial, se confirmaron las sospechas de Ramos. La obsesión de Luis Enrique era ser el líder de la Selección y evitar tener jugadores que le torcieran el gesto si no jugaban.

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Luis de la Fuente llega para tomar decisiones, con un talante conciliador y da esperanzas a Sergio Ramos. Los motivos a los que se agarra el sevillano están basados en la postura del nuevo seleccionador y los últimos acontecimientos tras el Mundial. De la Fuente y Ramos tienen sintonía. El seleccionador deja claro que las puertas de la Selección están abiertas a todos, jóvenes y veteranos, que tiene alternativas al plan de juego de posesión. No hay que ser ni inflexibles ni dogmáticos. Con De la Fuente, el portero y la defensa pueden dar un pelotazo. Hacer un fútbol más directo. Manejar más registros para que la Selección recupere la consistencia defensiva. Estas son las opciones de Sergio Ramos. Pero tiene que volver a confirmar que es un defensa contundente, con jerarquía y oficio.

Sergio Busquets se ha retirado de la Selección y Rodrigo, según desvela Luis de la Fuente en una entrevista en As, no será central. El nuevo seleccionador deja claro que llamará a los que estén en un buen momento, se regirá con el criterio de la meritocracia, sin mirar la edad y sin obsesiones para ser excluyente. Son más motivos para que Ramos se ilusione en el regreso a la competición tras digerir la decepción que se llevó con Luis Enrique.

Una fuerte mentalidad

Sergio Ramos transmite que se ve con fuerzas, ilusión y hambre. Si por algo se caracteriza es por tener una mentalidad inquebrantable. Lo que se juega de hoy en adelante es confirmar que con un buen rendimiento tiene opciones de regresar a la Selección. Es algo complicado, pero no lo ve imposible y tiene la obligación de ponérselo difícil al seleccionador. Con 36 años es un caso especial. Pero este es uno de sus grandes retos en 2023. Lo anunció en la gala de los premios Globe Soccer, en Dubái, durante el Mundial, cuando fue reconocido como el mejor defensa de la historia en un acto organizado por la Asociación de Clubes Europeos y la Asociación Europea de Agentes de Jugadores. "Todavía me quedan muchos sueños y objetivos por cumplir", comentó en su alocución.

Una importante conquista ya sería entrar en la primera lista de Luis de la Fuente para los partidos contra Noruega y Escocia, del 25 y 28 de marzo, correspondientes a la clasificación para la Eurocopa de 2024. El seguimiento del staff del nuevo seleccionador comienza desde hoy con el partido entre el Paris Saint-Germain y el Estrasburgo.

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Superada la pesadilla de las lesiones y la de Luis Enrique, Ramos se centra en ser un futbolista determinante en el Paris Saint Germain. Lo pasó muy mal en la primera temporada con las críticas en los medios de comunicación franceses y las informaciones que señalaban que el club podría rescindirle el contrato. En Francia, hablaron de un futbolista acabado. En España, de un éxito de Florentino Pérez por no ceder a sus presiones en la renovación. Sin él, el Real Madrid ganó la Liga, la Champions y la Supercopa de Europa. Son más motivos para seguir compitiendo con el PSG, que le contrató con la misión de que su experiencia sirviera para poder ganar la Champions.