El músculo del Real Madrid con el 'agredido' Vinícius y la gestión para superar la pandemia

El asunto de si Vinícius es un provocador y alguien en el club debería darle un toque de atención para que evite meterse en los 'fregados' de los partidos monopoliza los debates en el Real Madrid. No hay ni una sola maniobra, ni de Ancelotti ni de otro compañero y mucho menos de un dirigente, para cambiar el comportamiento del brasileño. Se refuerza, si cabe más, la actitud de una personalidad descarada y con carácter. La percepción que tienen en el Real Madrid es que Vinícius está siendo 'agredido' por los marcajes, cada vez con más defensas vigilándole, y la consigna es sacarle de quicio con acciones físicas y verbales. La versión del club es que tiene que tener la protección que marca el reglamento arbitral.

No hay preocupación. Vinícius no se descentra, sino que le estimula, todavía más, los desafíos que encuentra dentro del partido. Es, según cuentan en el club, un futbolista que "no se achanta". En cuanto a lo de los bailes, en las celebraciones de los goles, no hay nada que reprochar a un futbolista que vive este deporte con pasión y alegría. La conclusión es más que positiva. En el club disfrutan del crecimiento y el impacto que tiene Vinícius y al que acompaña su compatriota Rodrygo. El Real Madrid saca músculo en un inicio de temporada en el que el equipo ha ganado los siete partidos, entre Supercopa de Europa, Liga y el del Celtic en el inicio de la Champions, y ha cerrado las cuentas de la pasada temporada con un resultado positivo de 13 millones de euros.

El club cerró la temporada pasada cumpliendo los objetivos en el césped (Supercopa de España, Liga y Champions) y en los despachos (el ejercicio económico refleja unas cifras con un patrimonio neto de 546 millones de euros y una tesorería de 425 millones a 30 de junio de 2022). A la gestión económica y deportiva hay que darle continuidad y lo que celebran en el Madrid son las cuentas, los títulos y que estén sobresaliendo Vinícius y Rodrygo.

Lo difícil de suplir a Benzema

Sin Benzema, lesionado, y Hazard, sustituido por otra de esos días de incomparecencia contra el Mallorca, Vinícius y Rodrygo se echaron al equipo a sus espaldas. En el banquillo estaba Marco Asensio con un calentón importante por quedarse sin jugar ni un minuto. Solos, los dos brasileños hicieron suyo el Real Madrid. Se apropiaron del balón, sacudieron al rival con acciones de velocidad, conducción, regate y gol. A Vinícius y Rodrygo nos les pesa la camiseta, pueden con la presión del escudo y aparecen en situaciones delicadas para su equipo. Esto es motivo de satisfacción en los despachos.

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Empieza a ser habitual que los dos atacantes brasileños tomen la responsabilidad de tirar del equipo en momentos críticos. La novedad, el golpe en la mesa, es hacerlo sin Benzema. Sin el paraguas de la estrella del equipo. Sin el goleador. Con un partido sin resolver, un Mallorca correoso, que no dejaba espacios, Vinícius y Rodrygo exhibieron personalidad, madurez y calidad. Ganaron el partido con acciones de dibujos animados.

El club reforzó su apuesta por estos dos futbolistas tras unos meses en los que se pasó del 'no' de Mbappé a abrirle las puertas a Luka Jovic, Borja Mayoral y descartar hacer un fichaje. Ancelotti puede contar con dos futbolistas, todavía con mucho margen de mejora, para una temporada en la que ha empezado con el susto de la lesión de Benzema y dónde van ganando estatus por todo lo bueno que hicieron la temporada pasada. Llega el estreno de la Champions en el Bernabéu, contra el equipo alemán del Leipzig, y la preocupación por la lesión de Benzema es menor tras comprobar el nivel de Vinícius y Rodrygo.

El mercado brasileño

El Real Madrid tiene fortuna con los dos jóvenes brasileños. Vinícius y Rodrygo son dos futbolistas que marcan las diferencias y dan espectáculo. Encontrar un brasileño que pudiera convertirse en un ídolo del Bernabéu era una de las obsesiones que perseguía Florentino Pérez desde que Sandro Rosell, entonces presidente del Barcelona, le arrebató a Neymar. El presidente del Madrid lo tenía prácticamente hecho, con la revisión médica pasada y solo faltaba la firma. La operación se vino abajo por el enredo y las comisiones del padre de Neymar. Florentino, desde ese momento, se convirtió en el conquistador de Brasil.

El próximo crack no se le podía escapar. Florentino quería al mejor. Uno de esos brasileños que han nacido para jugar en el Real Madrid. No cejó en su empeño en encontrar al próximo de Neymar. Un brasileño en el Bernabéu, el mejor, era una operación segura en lo deportivo, económico y social. El club reforzó su departamento de scouting con Juni Calafat, con más ojeadores rastreando las canteras de Brasil, construyendo puentes con los clubes, sus dirigentes. Lo que hiciera falta.

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Es un trabajo de muchos años, de paciencia y dinero para fichar al nuevo crack. Muchos asoman la cabeza. El futbolista brasileño deslumbra, pero hay que tener ojo y arrojo, estar despierto y rápido para que no te lo levante la competencia, para echarle el lazo al bueno, el diferente, el que apunta al nuevo Rivaldo, Romario, Ronaldo y Neymar.

El Real Madrid cazó a dos y los fichó a golpe de talonario. El coste de Vinícius (Flamengo) y Rodrygo (Santos) es de 100 millones de euros. Eran dos menores de edad cuando el Madrid cerró ambas operaciones. Demasiado dinero, con las incógnitas que presenta apostar por chicos tan jóvenes y desconocidos. Una locura de dinero en un mercado que atravesaba una época de 'vacas gordas' y que, dos años después, fue fuertemente golpeado por la pandemia del coronavirus. La estrategia de ficharlos jóvenes y tener paciencia da beneficios en el campo y en los despachos.

El plan de contención

Tras pasar los años más duros de la pandemia y ejecutando un plan de contención de gasto, el club saca músculo por haber superado lo peor de la pandemia. En los dos primeros ejercicios los beneficios fueron de 313 mil euros (temporada 2019-20) y 874 mil euros (temporada 2020-21) después de impuestos. Las pérdidas de ingresos provocados por el coronavirus, desde marzo de 2020, es de 400 millones de euros y el Madrid destaca su solvencia en la gestión económica. Destaca que es uno de los pocos grandes clubes de Europa que no incurrió en pérdidas en esos dos ejercicios y que, según un estudio de la UEFA, las pérdidas acumuladas por los clubes europeos se acercan a los 6.000 millones de euros.

Lo peor del efecto de la pandemia está siendo superado y el club pronostica la cantidad de 722 millones de euros en su apartado de Ingresos de Explotación de esta temporada. Crece en 69 millones de euros (un 10%) con respecto al ejercicio anterior, pero sufre los efectos que provoca las obras de remodelación del Bernabéu. Hoy la Premier League gasta un pastizal por delanteros, defensas y centrocampistas que doblan lo que pagó el Real Madrid por Vinícius y Rodrygo. Funciona el plan de contención y el de los fichajes de los dos atacantes brasileños.