Quique Setién espera a Koeman en el otro banquillo del Barça: el de los juzgados

Al igual que ocurrió tras perder ante el Bayern 0-3 en el Camp Nou, nada más aterrizar procedentes de Lisboa, donde el FC Barcelona sumó su segunda derrota en Champions, esta vez 3-0 ante el Benfica, el presidente azulgrana, Joan Laporta, su inseparable vicepresidente deportivo, Rafael Yuste, el director de fútbol, Mateu Alemany, y el asesor Enric Masip se reunieron en la Ciutat Esportiva de Sant Joan Despí, de la que salieron a las cuatro y cuarto de la madrugada. La conclusión a la que llegaron o que al menos así reflejaron todos los medios fue que Ronald Koeman está sentenciado.

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Sin embargo, y como quiera que el gran problema de Laporta sigue siendo el mismo que tenía al término de la temporada pasada, es decir, la falta el dinero necesario para indemnizar a Ronald y fichar un sustituto, el holandés estará este sábado en la visita al Atlético de Madrid. Es verdad que no en el banquillo del Metropolitano al estar sancionado, lo cual es toda una paradoja. Pero sí en la grada, todavía como entrenador del equipo azulgrana. Su segundo, Alfred Schreuder, estará en la banda, tal y como ocurriera contra el Levante. El también holandés fue segundo del ahora entrenador del Bayern, Jules Nagelmann, quien le ofreció irse con él a Múnich, aunque se mantuvo fiel a su primer entrenador, de ahí que tampoco parece que ahora se plantee sustituirle.

"Sinceramente, podría estar mejor. Parece que estoy fuera", reconoció Koeman en la rueda de prensa previa a este encuentro. "Estoy harto de defenderme a mí mismo", "un día me gustaría hablar de lo que pienso" o "no voy a contestar a esa pregunta", dijo al ser interrogado sobre si se habla con Laporta. Estas fueron algunas de sus respuestas, aunque quizás la más llamativa fue cuando, al ser preguntado por si el de Madrid era su última partido, comentó: "Es verdad que el presidente estuvo aquí esta mañana, pero no lo he visto porque estaba preparando el partido. No me ha dicho nada, pero tengo orejas, tengo ojos y sé que se filtran muchas cosas".

Efectivamente, aunque sea una media verdad, y no una mentira entera como las del vicepresidente económico, Eduard Romeu, la junta directiva de Laporta ha decidido mantener al holandés en el cargo, ya que, después de la visita al Atlético, viene un parón de dos semanas por los compromisos de las selecciones que da un margen de maniobra a la hora de buscarle sustituto. Claro que la pregunta que surge es evidente, al margen, claro está, de qué podría pasar si casualmente el Barça derrotara al actual campeón de Liga. Puestos a pensar que Koeman sería igualmente despedido, ¿le harán lo mismo que a Quique Setién? Pues todo apunta a que sí...

El cántabro también fue sentenciado en Lisboa

El cántabro fue destituido en agosto de 2020, tras la debacle contra el Bayern de Múnich (2-8) y precisamente en Lisboa. Muchas coincidencias. Se le despidió unilateralmente, sin pagar ningún tipo de indemnización y Setién demandó al Barça. Desde el club, aún presidido por Josep María Bartomeu, argumentaron para prescindir de sus servicios y considerar el despido procedente que le faltó autoridad y capacidad. Esto, lógicamente, se hizo para ganar tiempo y no abonarle una indemnización que podría llegar a los 14 millones de euros.

Todo apunta a que el técnico santanderino y el FC Barcelona, ahora presidido por Laporta, se verán las caras en un juicio que podría celebrarse a finales de este mes. Después de que su sustituto, según todos los medios, haya quedado sentenciado. A diferencia de Koeman, que parece preparado para lo que tenga que venir, Quique Setién quedó emocionalmente golpeado, además de sorprendido negativamente con los futbolistas. "Es una lástima que Quique no cuente todo, porque se caería hasta el más pintado", cuenta una voz que conoce bien su entorno.

Setién, como es lógico, guarda silencio a la espera de que el juez falle a su favor, aunque la decepción vivida durante su estancia en el banquillo del FC Barcelona, en el que tan solo estuvo 25 partidos, con un balance de 16 victorias, 4 empates y 5 derrotas, le ha hecho replantearse incluso volver a entrenar. "Digamos que en la plantilla que cogió no hay mucho profesionalismo que se diga", comenta la misma fuente. "Y seguro porque sabe que sacar esa ropa sucia sería hasta contraproducente: pelearse con los tipos más ganadores y mediáticos de la historia del club lo pone en un lugar de derrotado", añade.

En lo que sí coinciden en el entorno del club catalán es en apuntar que desde Ernesto Valverde se entrenaba a lo que Messi quería, algo que Quique Setién trató de cambiar. Con Koeman es diferente. En su primera temporada sí tuvo a sus órdenes al argentino. Eso sí, después de que este hubiera anunciado que quería marcharse del Barça. Sin embargo, en la segunda se ha quedado sin el futbolista que tantas batallas ganó con sus genialidades, aunque el año pasado ni eso le sirvió para perder la guerra.

Opinión

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Si de algo adolece Laporta en esta nueva andadura como presidente del Barça es la de la presencia a su lado de Cruyff. De Johan, pues su hijo Jordi sí está en el club, pero no es lo mismo. Con apenas 2,9 millones para pagar los salarios de un nuevo cuerpo técnico, al presidente le preocupa sobre todo la Asamblea del 17 de este mes, de ahí que no quiera precipitarse. No con la decisión, que parece tomada, sino con el momento de destituir a Koeman, a quien Quique Setién ya espera en otro banquillo: el de los juzgados...