El tormento de Sergio Ramos: otra lesión que retrasa su estreno en el PSG

No levanta cabeza y sigue el tormento para Sergio Ramos. Ni con el cambio de aires y su fichaje sonado por el Paris Saint Germain llegan las buenas noticias para el sevillano. La salud es su peor rival. El calvario con las lesiones de Ramos no tiene fin en un año que es una pesadilla. Hace veinte días que fue presentado como nuevo jugador del PSG y todavía no está en buenas condiciones para jugar. Se sigue retrasando el esperado estreno con el equipo francés. El sevillano tiene que volver a parar por unas molestias en la pantorrilla, según informa el club. Es otro contratiempo en el sóleo de la pierna izquierda el que le impide estar ya jugando los partidos de preparación. Este martes se ha perdido el enfrentamiento, que tanta ilusión le hace, contra el Sevilla en el Algarve.

Otra mala noticia para un jugador veterano que llega con las ilusiones renovadas a París, pero al que su entrenador Mauricio Pochettino, cuida. Tiene que seguir un plan especial, que dé las máximas garantías, en la preparación antes de estar disponible para la alta competición. Esta nueva lesión, que no parece que sea de gravedad, le puede impedir estar en el primer partido oficial de la temporada del equipo francés. Hay un título en juego. El de la Supercopa de Francia que enfrenta al PSG contra el Lille el domingo 1 de agosto.

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Se hace esperar el debut del flamante fichaje del club parisino. Sergio Ramos (35 años) pasó todo tipo de revisiones médicas antes de firmar el contrato por dos temporadas, como era su objetivo y que no le dio el Real Madrid, y superó los diferentes test. Ahora llega este infortunio que deja en el aire la fecha en la que podrá estar a un alto nivel para competir y acertar en qué momento puede hacerlo para no sufrir otra recaída.

Los problemas en el sóleo

Es la cuarta lesión que sufre en lo que llevamos de 2021. Los problemas empezaron en el partido de la Supercopa de España, que enfrentó al Madrid contra el Athletic, y que tuvo que jugar con dos infiltraciones. Ramos dio la voz de alarma. Tenía molestias en la articulación de la rodilla izquierda y, con la supervisión de los servicios médicos, decidió pasar por el quirófano para operarse del menisco. Era el 6 de febrero, a principios de año, y uno de sus objetivos era solucionar este tipo de molestias para afrontar el tramo decisivo de la temporada en buena forma física y llegar pletórico a la Eurocopa.

Algo falló. No se hizo bien su readaptación, hubo precipitación y una toma de malas decisiones. Sergio Ramos regresó, el 13 de marzo, para jugar contra el Elche una hora y estar en al partido contra el Atalanta. Pero en el siguiente encuentro, en Vigo contra el Celta, ya no fue convocado por Zidane. Resultó extraño que no jugara este encuentro y sí fuera convocada por Luis Enrique. El resultado fue nefasto. El sevillano solo pudo disputar 45 minutos contra Grecia, en donde se le vio mal, y no jugó nada contra Georgia. Pero sí salió en los últimos cuatro minutos del partido contra Kosovo. Aquí, en el estadio de La Cartuja, llegó otro palo. En una carrera, tras quedarse con los suplentes en el césped para hacer ejercicios, sintió un pinchazo en el sóleo.

De nuevo, a la enfermería. Noticias preocupantes para su futuro en el Real Madrid, con el que había tensiones en la negociación para su renovación, y con la Selección española. Luis Enrique empezó a dudar y valoró dejarle fuera de la Eurocopa. Sergio Ramos ya luchaba contra el tiempo para no tirar la temporada y decidió forzar su reaparición en el encuentro de vuelta de las semifinales contra el Chelsea en Stamford Bridge. Otro mazazo. Acabó eliminado y lesionado con una tendinosis del músculo semimembranoso de la pierna izquierda.

Las consecuencias resultaron fatales porque ya no volvió a disputar más partidos con el Madrid. No se despidió en el césped, tras 16 temporadas, y fue excluido de la convocatoria para la Eurocopa. Los peores momentos en la carrera del central sevillano, a lo que se sumó los desacuerdos con Florentino. El presidente le comunicó que la oferta de renovación, de un año con la rebaja salarial del 10%, estaba caducada. Ramos se quedó sin equipo, sin Eurocopa y a la espera de negociar con el Paris Saint Germain.

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El sóleo de la pierna izquierda le juega, de nuevo, una mala pasada y ralentiza el regreso a la competición con el equipo francés. Mauricio Pochettino confirma que no quiere riesgos, que buscará el mejor momento para que Ramos pueda jugar con las garantías de que está en el mejor estado físico y el sevillano, al que se le ve adaptado en el nuevo equipo e ilusionado con el desafío, tiene la lógica ansiedad por empezar a jugar con el PSG.

Está siendo un año duro y la próxima fecha que hay en el calendario para poder saber si es la definitiva en el regreso a los campos de juego es la del 7 de agosto, con el inicio de la Ligue1 en la que el Paris Saint Germain se enfrenta al Troyes. Los siete primeros meses del año están siendo fatídicos.