Florentino Pérez quiere que el Bernabéu albergue la NFL como hace el Tottenham

Cuando se trata de hacer negocio, da igual si el balón es redondo u ovalado. La noticia la adelantó la ESPN. "La National Football League (NFL) está financiando el nuevo estadio del Tottenham Hotspur", rezaba el titular, para añadir que "la nueva casa de los Spurs será también la de una franquicia de la NFL". De esta forma, y pocos meses antes de que la pandemia paralizara todas las competiciones a nivel mundial, en octubre de 2019 el nuevo y ultramoderno Tottenham Stadium recibió primero a Chicago Bears y Oakland Raiders y después a Carolina Panthers y Tampa Bay Buccaneers, al tiempo que Mark Waller, ejecutivo de la mencionada NFL, anunció que en 2020 querían tener una franquicia en la capital inglesa.

De hecho, ya es oficial que este 2021 los Atlanta Falcons volverán a llevar a la NFL a Londres. En una reciente reunión de los dueños de las 32 franquicias, se decidió que todos los equipos deberán jugar fuera de Estados Unidos a partir de la temporada que empezará en septiembre y retomar así el calendario internacional. El acuerdo indica que cada franquicia deberá tener al menos un partido fuera del país. Esta costumbre se había cancelado debido a la pandemia, pero poco a poco volverá a la normalidad y sin duda será una gran oportunidad para quienes puedan albergar el espectáculo de la NFL.

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Prueba de ello es que esta es una de las ideas que Florentino Pérez tiene para su nuevo Estadio Santiago Bernabéu, con más motivo tras el reciente fracaso de la Superliga europea, de la que él ha sido el gran impulsor y, como consecuencia, también el gran señalado. Al igual que el campo del Tottenham, que tiene una superficie sintética retráctil ubicada debajo del campo de hierba natural que es utilizada para los partidos de la NFL, el nuevo Bernabéu también estará preparado para albergar este tipo de eventos que ayudarán a rentabilizar la gran inversión que está haciendo el presidente de la constructora ACS.

"Dado el creciente entusiasmo por nuestra competición en el Reino Unido, nos comprometemos a celebrar partidos en estadios de primera clase", dijo en un comunicado el comisionado de la NFL, Roger Goodell, quien añadió que "por eso nos emociona hacer una sociedad con el Tottenham Hotspury celebrar partidos en su nuevo estadio". Unos años antes, el entonces alcalde de Londres y actual primer ministro británico, Boris Johnson, ya dijo sobre el acuerdo para que el fútbol americano se jugara en Wembley que "nos ayudará a avanzar en nuestra meta de contar con una franquicia de la NFL de forma permanente".

Sabido es que Florentino Pérez no ve el Real Madrid y el fútbol como un simple equipo y un simple deporte, respectivamente, de ahí que no es de extrañar que quiera sumarse a la idea del Tottenham y traer a la capital de España partidos de la NFL, cuando no una franquicia, que le ayude a hacer negocio con el nuevo Bernabéu. "El fútbol está gravemente herido porque su economía se hunde y hay que adaptarse a la época que vivimos", ha repetido el presidente del Real Madrid en los últimos días, tras ver cómo su proyecto de la Superliga europea se iba al traste y ante la necesidad de generar nuevos ingresos.

Según el 'Evening Standard', el Tottenham ha ido más lejos e incluso ha nombrado a Todd Kline, exdirectivo de los Miami Dolphins de la NFL, director comercial para encabezar la búsqueda de una empresa que se haga con los 'naming rights' de su nuevo estadio. Durante su estancia en esta franquicia de fútbol americano, Kline formó parte de la negociación que ayudó a cerrar un acuerdo para vender estos derechos del estadio de los Dolphins por 18 años y un valor de 249 millones de dólares. El presidente del Tottenham, Daniel Levy, lleva un tiempo buscando un socio al que ceder los derechos del nombre de su campo, inaugurado en 2019 y que costó 1.150 millones de euros, por unos 28 millones de euros al año. De momento, el Real Madrid no tiene cerrada la venta de los 'naming rights'.

Bernabéu ya trajo fútbol americano

Aunque la idea de traer fútbol americano pueda parecer original, resulta que también en este caso Santiago Bernabéu se adelantó a Florentino Pérez. Así, el domingo 16 de noviembre de 1958, el estadio del Real Madrid acogió un encuentro de este deporte. Para asegurarse el lleno, se jugó después del Real Madrid-Valencia (3-0). Es verdad que los equipos no eran profesionales, sino de dos bases de las Fuerzas Aéreas norteamericanas en Europa. Concretamente, los Togers de Toul (Francia) y los Tacooners de Giebelstadt (Alemania).

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En el primer cuarto de hora del partido, no se movió nadie del Bernabéu, pero al descanso ya había media entrada y, al inicio de la segunda parte, las gradas se fueron vaciando. Ganaban los blancos por 26-6, pero se trataba de un juego incomprensible para la inmensa mayoría del público. El experimento no se repitió, pero ahí quedó. Lo contaba Alfredo Relaño: "Santiago Bernabéu se hacía un 'marketing' de paleto para atraer a las clases populares, pero era un tipo muy cultivado que aspiraba a universalizar el nombre del Real Madrid". Vamos, que posiblemente a don Santiago la Superliga no se le hubiera resistido, o al menos no se le hubiera ocurrido presentarla hasta no tener el proyecto bien atado.

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