Poner en marcha la Superliga, el gran reto de Florentino para su sexto mandato
Aquí sí que tiene una dura oposición Florentino. Los presidentes de FIFA, UEFA y los de las Ligas nacionales, con el combativo Javier Tebas, muestran su total rechazo
De entre todos los frentes abiertos que tiene Florentino Pérez de ahora en adelante, una vez que ha sido reelegido presidente en un proceso electoral que se cerró con su única candidatura, el más difícil de sacar adelante es la creación de la Superliga de fútbol. Es un asunto tan importante como la reforma del nuevo Bernabéu, el deseado fichaje de Mbappé, Haaland o los dos, y la dura renovación de Sergio Ramos. La Superliga es el pozo de petróleo al que no renuncia el presidente del Real Madrid, que desde este lunes inicia su sexto mandato en el club. Pero aquí sí que tiene una dura oposición.
Enfrente va a tener la postura de rechazo de la FIFA y también la de la UEFA, aunque la de este organismo no es tan beligerante como la que preside Gianni Infantino. La máxima autoridad del fútbol lo dejó claro a finales de enero con un comunicado en el que advertía de las consecuencias de seguir adelante con esta idea de una competición para ricos. “Aquellos clubes o jugadores que disputaran dicha competición tendrían prohibido participar en las competiciones organizadas por la FIFA o la competición correspondiente. Todas las competiciones deberán estar organizadas o reconocidas por la FIFA, a nivel global, y las confederaciones, a nivel continental”. Esta es la postura inflexible de la FIFA, que únicamente contempla trabajar sobre dar forma a un nuevo Mundial de Clubes con 24 equipos.
Florentino Pérez y otros dirigentes que apuestan por la creación de la Superliga tienen pendiente una reunión con Alexander Ceferin. El mandatario de la UEFA quiere intercambiar opiniones y tener un debate sobre este asunto que tiene en tensión a las Ligas nacionales. Ceferin se puso en contacto con Florentino cuando éste dio positivo por coronavirus, en el mes de febrero, y quedaron en verse para tratar diferentes temas relacionados con la necesidad de una nueva competición. La postura de la UEFA es elaborar un plan para la nueva Champions a partir de 2024. No quiere una competición de élite, pero sí se abre a cambios en el formato y más vías de ingresos. Aleksander Ceferin lleva tiempo hablando con las 55 federaciones de fútbol para explicar su proyecto y confirmar que esta nueva Champions no sería una competición cerrada.
350 millones de euros en ingresos
Los grandes clubes de Europa buscan más ingresos y así lo confirmó Florentino en la última Asamblea de socios, que se celebró de forma telemática, con una declaración que se puede considerar como el gran desafío que tiene por delante. “Este modelo necesita un nuevo impulso por el impacto del Covid y la reforma del fútbol no puede esperar. Hay que afrontar el cambio y el desafío para mejorar la competitividad y la calidad”, fueron las palabras del presidente del Real Madrid. Una vez que tiene otro mandato por delante, que irá hasta 2025, no va a renunciar tan fácilmente a uno de sus proyectos más ambiciosos.
La Superliga es un desafío para Florentino y el resto de dirigentes de los grandes clubes que todavía no se han pronunciado. Josep María Bartomeu sí confirmó que el proyecto estaba en marcha, en la comparecencia de despedida como presidente del Barcelona, y lo justificó por la necesidad de que los clubes tuvieran una sostenibilidad económica y pudieran seguir siendo de sus socios. Algo que también sirve de argumento para Florentino. Se trataría de una competición cerrada en la que estarían 15 clubes fundadores con plaza fija y admitirían a otros cinco, según informó Times. Es lo que se denomina como la NBA del fútbol y podría reportar unos ingresos de 350 millones de euros a cada club. Buscan cómo adaptar el formato de la competición a las Ligas nacionales.
El camino va a ser duro si sale adelante este proyecto que ya está generando tensiones y pulsos entre los promotores de la Superliga y los presidentes de FIFA, UEFA y los de las Ligas nacionales. Javier Tebas es la persona que hace la mayor oposición a la idea de Florentino. El presidente de la Liga la ha calificado de “clandestina” y la considera “inviable”. Tebas hará todo lo que esté en su mano por proteger los intereses de los equipos nacionales y en reiteradas ocasiones no ha dudado en señalar a Florentino como la persona principal que está detrás de la creación de la Superliga. “Se genera incertidumbre que no es buena y esto desestabiliza”, dice el presidente de la Liga.
El choque con Javier Tebas
El pulso de Javier Tebas con Florentino y los dirigentes que sigan el camino de la Superliga va a tener más capítulos de ahora en adelante. Tebas ha sido propuesto por las Ligas europeas como su representante en el Comité Ejecutivo de la UEFA para sustituir al sueco Lars-Christer Olsson. El nuevo cargo se tiene que aprobar en el Congreso Ordinario de la UEFA que se celebra el próximo 20 de abril, pero Tebas ya se ha pronunciado: “Es una responsabilidad que asumo con orgullo y con el compromiso de seguir luchando por el crecimiento de las ligas nacionales que son el auténtico motor del fútbol”.
Florentino Pérez, el presidente de los 47 títulos (26 en fútbol y 21 en baloncesto), afronta desde ya su sexto mandato y tiene en su hoja de ruta poder convencer de la necesidad de la creación de la Superliga a las diferentes autoridades del fútbol por los beneficios económicos y resolver que no sea incompatible con las ligas nacionales. No es nada sencillo. Habrá colisión de intereses, pulsos y conflictos que irán subiendo la tensión entre los que están a favor de la Superliga y los que se oponen.
Para reanudar la etapa, Florentino se ha rodeado del mismo grupo de trabajo en el que cuenta con 16 directivos en una Junta que solo hay una mujer (Catalina Miñarro Brugarolas). Siguen los tres vicepresidentes (Fernando Fernández Tapias, Eduardo Fernández de Blas y Pedro López Jiménez). Este último es una de las personas de máxima confianza de Florentino para llevar asuntos de máxima relevancia y, entre ellos, está la Superliga.
De entre todos los frentes abiertos que tiene Florentino Pérez de ahora en adelante, una vez que ha sido reelegido presidente en un proceso electoral que se cerró con su única candidatura, el más difícil de sacar adelante es la creación de la Superliga de fútbol. Es un asunto tan importante como la reforma del nuevo Bernabéu, el deseado fichaje de Mbappé, Haaland o los dos, y la dura renovación de Sergio Ramos. La Superliga es el pozo de petróleo al que no renuncia el presidente del Real Madrid, que desde este lunes inicia su sexto mandato en el club. Pero aquí sí que tiene una dura oposición.