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Olmo, el exhibicionista del Granada-United: "Se alimentaba del sol y se curaba con limón"
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Qué se esconde tras la imagen viral

Olmo, el exhibicionista del Granada-United: "Se alimentaba del sol y se curaba con limón"

Este hombre interrumpió el partido estrella de la jornada de la Europa League. Emilio Sánchez Mediavilla, quien lo conoció hace seis años, habla de su extravagante personalidad

Foto: El exhibicionista que interrumpió el partido Granada-United. (Reuters)
El exhibicionista que interrumpió el partido Granada-United. (Reuters)

Olmo G. se convirtió de la noche a la mañana en la comidilla del pueblo de la actualidad española. Este ascenso mediático tiene una respuesta sencilla, Olmo se paseó como dios lo trajo al mundo frente a las televisiones internacionales que cubrían el partido entre el Granada y el Manchester United, uno de los duelos más interesantes de la jornada en la Europa League. Su figura es bastante conocida desde hace años en la ciudad andaluza, localidad en la que ha protagonizado numerosos momentos exhibicionistas. Es algo así como una celebridad. Emilio Sánchez Mediavilla lo conoció entre el 2015 y el 2016, cuando vivía en Baréin. El escritor plasmó en su libro, Una Dacha en el Golfo (2020, ganador del premio Anagrama de Crónica), la siguiente conversación que mantuvo con él:

-¿Qué piensas del ISIS?

-¿Eso existe?-pregunta Olmo.

-Sí.

-Pues entonces es que tienen bacterias en el cerebro. Yo les inyectaría limón en vena para curarles.

placeholder Olmo G., siendo detenido por las autoridades tras saltar al campo. (Reuters)
Olmo G., siendo detenido por las autoridades tras saltar al campo. (Reuters)

“Estuve viviendo en Baréin y conocí a Olmo, que fue a visitar a un amigo en común. Se quedó con él unos dos meses en la casa. Desde el principio era una persona como muy… (se piensa el término) estrafalaria. Iba siempre descalzo, medio desnudo -al menos cuando íbamos nosotros a la casa, la faceta nudista se la he conocido ya en España-, extravagante y apenas hablaba”, Sánchez atiende a El Confidencial por teléfono. El pasado jueves, él también se percató del hombre desnudo que corrió por el estadio de Los Cármenes al más puro estilo Jimmy Jump (pero sin ropa), en mitad de un partido de élite europeo. A diferencia del resto de espectadores, Emilio sí reconoció esa inconfundible melena negra rizada: “Por un lado fue una sorpresa, pero por otro lado, tampoco te extrañaba mucho”.

La figura de Olmo rápidamente causó sensación entre los expatriados en Baréin, “a mí siempre me descolocó muchísimo, pero a la gente le sorprendía y le hacía gracia”. Era el perejil de todas las salsas. Sánchez se interesó en su momento por los orígenes de su personalidad: “Me contaron que había tenido su propia empresa, que en su época había sido un hombre de negocios. En algún momento empezó a hacer esa vida de ermitaño, a vivir con lo mínimo y a vivir al extremo”.

"Comía un fruto seco y ya está, su teoría es que podías alimentarte del sol"

“Tenía un discurso extraño sobre la salud y la alimentación. Comía un fruto seco y ya está, su teoría es que podías alimentarte exclusivamente del sol, estaba todo el día tumbado tomando el sol. También decía que todo se podía curar con limón. No se duchaba nunca… Era lo más parecido a la imagen que tenemos de santón hindú. Era muy difícil tener una conversación normal con él”, cuenta el escritor, quien fundó la editorial Libros del K.O a su regreso a España. En su libro también se destaca los problemas higiénicos de Olmo, consecuencia de su escaso aseo personal.

Tradicionalmente, los espontáneos buscan una reivindicación o algún tipo de repercusión con sus actos, ya sea una protesta política o que se trate de fomentar su propio ego, como si de un reto se tratase. ¿Estaba interesado Olmo en el deporte de alguna manera? “Nada, no se interesaba por nada. Su discurso era muy espiritual, de estar en contacto con la naturaleza. Era muy difícil mantener cualquier tipo de conversación con él, vivía como en su propia realidad alejada del resto, lo cual encaja bien con Baréin, que también es bastante irreal de por sí. No recuerdo haber hablado con él de nada mínimamente normal, ni de política, ni de fútbol, ni de Oriente Medio”.

placeholder El momento de la detención. (Reuters)
El momento de la detención. (Reuters)

Este artículo comienza con un extracto del citado libro, que sirve como perfecto resumen a la personalidad de Olmo, “puse esa frase porque define muy bien el mundo en el que vivía. En aquel momento el ISIS estaba en todas las noticias, pero él tenía esa visión digamos conspiranoica de que nada existía”, relata Sánchez, antes de apostillar que “en el fondo me daba cierta pena. Es que literalmente no comía, estaba esquelético”.

14 horas debajo de una lona

Olmo G., de 37 años, es un viejo conocido de las autoridades. Por ejemplo, se le pudo ver en el aeropuerto de Málaga, totalmente desnudo, paseando por sus instalaciones. La investigación del estadio Los Cármenes demuestra, a través del visionado de las cámaras de seguridad, que el exhibicionista saltó al campo de fútbol desde una lona de gran tamaño en la que estuvo escondido durante 14 horas, tras haberse colado previamente en el recinto. “Lo he leído y la verdad es que sí que me choca un poco con la imagen que yo tengo de él. Un nivel de planificación… Sorprendente, a lo mejor estaba equivocado con él. Le veía como un zombie desnutrido, me ha impactado bastante este acto, no tengo ni idea de qué pretendía”, confiesa el editor.

Poco después de regresar de Baréin, Emilio Sánchez se puso a plasmar sus vivencias en el Oriente Medio sobre el papel: “El libro se publicó en el 2020, pero lo escribí hace tres años. Ya entonces me mandaban vídeos o links de él desnudo haciendo algo, paseando por la ciudad, por la Alhambra o metiéndose en una fuente”. A pesar de la curiosidad sobre qué pasó con él, “nunca he podido llegar a enterarme de qué está haciendo, más allá de los vídeos virales”. Mientras tanto, Olmo es puesto a disposición judicial, a su espalda quedan varias experiencias similares. “A ver qué es lo siguiente, en Granada será una auténtica celebridad”, se despide Sánchez.

Olmo G. se convirtió de la noche a la mañana en la comidilla del pueblo de la actualidad española. Este ascenso mediático tiene una respuesta sencilla, Olmo se paseó como dios lo trajo al mundo frente a las televisiones internacionales que cubrían el partido entre el Granada y el Manchester United, uno de los duelos más interesantes de la jornada en la Europa League. Su figura es bastante conocida desde hace años en la ciudad andaluza, localidad en la que ha protagonizado numerosos momentos exhibicionistas. Es algo así como una celebridad. Emilio Sánchez Mediavilla lo conoció entre el 2015 y el 2016, cuando vivía en Baréin. El escritor plasmó en su libro, Una Dacha en el Golfo (2020, ganador del premio Anagrama de Crónica), la siguiente conversación que mantuvo con él:

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