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La agonía del Barça: cómo el mejor equipo del mundo se autodestruyó en 28 meses
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Elecciones presidenciales

La agonía del Barça: cómo el mejor equipo del mundo se autodestruyó en 28 meses

Detenciones de presidentes, deuda galopante y goleado en Champions. El Barcelona afronta una de las peores crisis de su historia en el año covid. ¿Cuándo se jorobó todo?

Foto: Messi y Piqué en un partido. (Reuters)
Messi y Piqué en un partido. (Reuters)

El último baile de Xavi Hernández como jugador del Barça fue el 6 de junio de 2015. Jugó 13 minutos en la final de Champions: Barcelona 3-Juventus 1. Nunca más vimos juntos a Xavi, Iniesta y Messi, ganadores de dos Champions entre 2008 y 2011; pero el Barcelona había formado otro tridente demoledor, Neymar, Suárez y Messi, ganadores de cinco títulos en 2015. Se hablaba de nuevo ciclo ganador, de la reinvención del mejor Barça, de la superación del tiki-taka con verticalidad. En realidad, era el principio del fin...

Ese día se inició una imperceptible decadencia con altibajos, de los títulos locales (tres ligas y tres copas) a las estrepitosas derrotas europeas, pero siempre con aura de equipo crepuscular que cobraba más por lo fue que por lo que era. Una caída sostenida, acelerada con los años (curso pasado sin títulos) y propulsada por gestiones calamitosas (fichajes fallidos a precios desorbitados, maniobras extravagantes de la directiva y culebrón Messi). Caída que ha generado un enorme cráter deportivo, institucional y económico.

El domingo son las elecciones del Barça. Tarea titánica para el nuevo presidente: reflotar el club sin margen económico. Los tres candidatos (Laporta, Font, Freixa) quizá se pregunten estos días: ¿Qué ha pasado? Cómo el mejor equipo del mundo se autodestruyó en unos meses vertiginosos, y cómo el club hizo lo propio con una concatenación de crisis en el año covid: masa salarial disparada, finanzas colapasadas y último presidente (Josep María Bartomeu) dimitido y detenido por juego sucio interno. ¿Cuándo se jorobó el Barça?

Foto: Foto: EFE.

La fuga de Neymar

2 de agosto de 2017: Neymar deja el Barça por el PSG tras pagar 222 millones de euros. Fuga por sorpresa que dejó grogui al club. La presión emocional jugará una mala pasada a la junta de Bartomeu. Con la pretemporada ya empezada, el Barça salió al mercado con ansiedad y dinero fresco, es decir, con todas las papeletas para comprar caro y mal. ¿Hizo el primo? Se gastó una millonada (295 millones) en dos jugadores (Dembélé y Coutinho) que valían menos y nunca acabaron de responder a las expectativas. Dos años después, fichó a Griezmann por 120 millones. Coutinho, Dembélé y Griezmann: los tres fichajes más caros de la historia del Barcelona.

"Griezmann, Coutinho y Dembélé han sido inversiones ruinosas"

La fuga de Neymar desequilibró el club y abrió la veda contra el presidente Bartomeu, que no por casualidad empezó a actuar de manera errática: ese otoño, su entorno contrató sigilosamente a una empresa para burlarse en redes de jugadores (Messi, Piqué), mitos del club (Xavi, Pujol, Guardiola) y directivos rivales (Font, Laporta). Atacar a los jugadores del club con dinero del club. El caso, desvelado por la SER hace un año, ha provocado la detención de Bartomeu esta semana, pero todo empezó en otoño de 2017. Veintiocho meses después de ganar su última Champions, el club entró en una deriva autodestructiva de la que ya no saldría.

En otoño de 2017 también se pactó la renovación de Messi: 74 millones de euros netos al año entre fijos y variables, una prima de 115 millones de euros por renovar y otra de 78 millones por cumplir el contrato. Cifras récord que generaron polémica tras ser desveladas este enero por 'El Mundo': ¿Demasiado dinero o ajustado al valor del jugador? El contrato se firmó en plena inestabilidad de Bartomeu por la marcha de Neymar.

No salen las cuentas

“¿Qué pasó cuando el equipo empezó a dar signos de decadencia? Inversiones urgentes y exageradas en jugadores, que aumentaron el gasto y bajaron el nivel, porque no rindieron más que los antiguos. Griezmann, Coutinho y Dembélé han sido inversiones ruinosas: entre traspasos y salarios, 900 millones gastados en unos jugadores sin los que el equipo estaría igual. Luego vinieron las críticas de los aficionados, el desgaste de la directiva y los dirigentes nerviosos contratando empresas extrañas para aplacar las críticas y revertir el malestar social”, cuenta el agente Josep María Minguella, que trajo a Maradona, Romario y Messi al Barça.

Minguella no es el único que opina que el colapso actual empezó a gestarse en el verano/otoño de 2017. Hablamos con el economista e historiador de fútbol David Valero Carreras.

"La situación financiera es dramática. Si fuera una empresa convencional en lugar del Barça, estaría cerca de la quiebra"

PREGUNTA. ¿Cómo está la economía del Barça?

RESPUESTA. La situación financiera es extremadamente mala, dramática. Si fuera una empresa convencional en lugar del Barça, estaría cerca de la quiebra.

P. ¿Cuál es el problema?

R. El más grave es la deuda. El Barça tiene una deuda de casi 1200 millones de euros. La parte más acuciante, a corto plazo, es de 700 millones. Un nivel de deuda desproporcionado para un club que facturará sobre 750 millones este año. Te diría casi que es una deuda impagable, sobre todo la de a corto plazo.

P. ¿Fallan los gastos o los ingresos?

R. El Barça ha llegado a superar los 1000 millones de euros anuales de facturación. Es mucho. ¿Algún otro club deportivo del planeta que facture eso? Pedir que el Barça facture más es irreal. Claramente, el problema es el exceso de gasto... en deportistas. Se fichó a tres jugadores (Coutinho, Dembélé y Griezmann) por 415 millones de euros, más sus salarios, y no han dado buen resultado. Ese tipo de inversiones han llevado a esta situación.

"No creo que el contrato de Messi llevara al Barça a la ruina"

P. Hay quién apunta en otra dirección. Cuando 'El Mundo' publicó el contrato de Messi, tituló: "El contrato faraónico de Messi que arruina al Barça".

R. Sin duda, la información de 'El Mundo' era buena, interesante y correcta, pero no estoy de acuerdo con su interpretación de la misma. No creo que el contrato de Messi llevara al Barça a la ruina. Messi no solo ha rendido excepcionalmente bien, sino que es una marca muy potente; el Barça cobra más de sus espónsores porque tiene a Messi. Han hecho más daño los fichajes de Coutinho, Dembélé y Griezmann que el contrato de Messi. El problema son las inversiones caras y fallidas.

P. ¿Qué le espera al nuevo presidente?

R. Lo primero que tendrá que hacer será sentarse con los acreedores para alargar los plazos porque simplemente no se pueden pagar. Convencer a los acreedores de que les conviene esperar porque el Barça volverá a ganar dinero pronto. Luego hace falta reducir los gastos y la masa salarial del primer equipo de fútbol. El Barça no puede ser la entidad deportiva que más gaste en salarios del mundo.

Barrena institucional

¿Cuáles son las profesiones de mayor riesgo del planeta? Desactivador de explosivos, liquidador de central nuclear y presidente del Barça.

En efecto, la detención de Josep María Bartomeu ha aumentado la lista de expresidentes que han tenido problemas policiales, judiciales y carcelarios de algún tipo. Derivados a veces de cruentas luchas internas de egos y poder. Los últimos 18 años, todos los presidentes del Barca han salido de la primera junta directiva de Joan Laporta. Época marcada por los éxitos deportivos... y por los quilombos entre directivos. Por más títulos que ganara el Barcelona con Guardiola, Luis Enrique o Valverde, la gestión siguió canibalizada por los choques entre facciones. Ni un año sin movidas internas truculentas. Laporta purgó, pero también le hicieron mociones de censura; y su sustituto, Sandro Rosell, le echó a los jueces encima al investigar sus cuentas. Rosell, a su vez, fue denunciado por el fichaje de Neymar, y pasó 646 días en prisión preventiva acusado de lavar dinero, pero fue absuelto. La traca final llegó con Bartomeu: acusado de pagar por difamar a jugadores y rivales.

Foto: Un agente del Área Central de Delitos Económicos de los Mossos sale del Camp Nou. (EFE)

Resumen válido para los últimos tres presidentes: cuando uno gobierna atizando el conflicto interno para afianzar su poder los trapos sucios, la judicialización y el mal rollo lo invaden todo. Pasan las personas, las dinámicas permanecen.

Hablamos con el escritor y periodista Rafa Cabeleira, experto en el Barça, sobre las batallas internas permanentes.

"A nadie le sorprende ya mucho que los presidentes del Barcelona vayan pasando por comisaría"

PREGUNTA. ¿Qué le pareció la detención de Bartomeu?

RESPUESTA. Como aficionado, es triste que el club sea más protagonista por asuntos judiciales que deportivos, pero igual ya no es ni noticia. El lema "el Barça es más que un club" siempre lo entendí como que el Barça era fuente de ingresos de muchos sectores (deportivos, políticos, empresariales) en Cataluña. El Barça es un objeto que todo el mundo quiere poseer. Hay un sector de la burguesía catalana que lo ve como algo suyo, no tanto por sentimiento culé sino como generador de ingresos. Es evidente que ha venido gente a lucrarse al club. Sandro Rosell era un comisionista. Se han hecho juegos contables extraños. A nadie le sorprende ya mucho que los presidentes vayan pasando por comisaría.

P. No siempre se cumple, pero el Madrid es más de presidencias fuertes y el Barça de puñaladas salvajes entre facciones...

P. Es un tema de poder, pero también de intereses económicos. Con Laporta se empezaron a ver cosas que iban más allá de utilizar el club para mejorar tu estatus y tus negocios paralelos —que igual es lo que hace Florentino en el Real Madrid y hacía Nuñez en el Barça— pero otra cosa es enriquecerse directamente con el día a día del club. Los tejemanejes de Laporta en Uzbekistán, las comisiones que cobraba su bufete de abogados, la llegada de Rosell… El Barça es un pozo del que todos beben. Muchas veces se pelean por controlar el pozo, por ver quién se lucra, lo que también afecta a los medios que se nutren de las exclusivas y el 'merchandising' del club. No creo que tenga que ver con guerras ideológicas o con diferentes maneras de ver el club, sino con el Barça como fuente de ingresos por la que merece la pena matarse.

"Algunos directivos ven el club como fuente de ingresos por la que merece la pena matarse"

P. La colisión entre crisis económica y deportiva es ahora total.

R. Los directivos de fútbol suelen tener un problema: creen que saben de fútbol. Rosell pensaba que sabía más que Guardiola. Los planes deportivos se acaban pareciendo a colecciones de cromos, sobre todo cuando los clubs tienen dinero. Lo mejor que le pudo pasar a Laporta cuando llegó a presidente fue encontrarse un club en crisis y casi quebrado, porque le obligó a centrarse en la gestión, en la cantera, en dejar trabajar a los técnicos, en fichar ajustado a mercado. Pero en cuanto hay dinero y el presidente se cree el entrenador... es el despelote. Se va Neymar y traigo en su lugar a varios tíos que me han dicho que son muy buenos por cantidades insostenibles. La lógica es: ficho a estos, gano la Champions, multiplico los ingresos.... pero son castillos en el aire, al final el equipo no chuta y las cuentas no salen. En el presupuesto de este año han metido 10,5 millones de euros por llegar a cuartos de Champions, pero no tiene mucha pinta de que vayan a llegar [el Barcelona perdió 1-4 contra el PSG en el partido de ida de octavos].

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"En la historia del Barcelona ha habido de todo, hasta un presidente asesinado; el actual no es el momento más grave ni de lejos"

En medio del drama, no obstante, surgen voces discordantes, como la de Joan Gaspart, el presidente anterior a Laporta, que aunque tuvo un mandato convulso e histriónico, está ahora en modo sosegado-hombre-de-club. Hablamos con él: 1) "Bartomeu es mi amigo, vaya por delante, pero no creo que haya hecho nada malo o ilegal"; 2) "En la historia del Barcelona ha habido de todo, hasta un presidente asesinado; el actual no es el momento más grave ni de lejos"; 3) "Se olvida que este club sigue siendo propiedad de los socios, a diferencia de otros que son propiedad de un millonario ruso, un chino o un fondo. Como los socios pueden denunciar, criticar o fiscalizar lo que quieran, las presidencias del Barça suelen ser más movidas, mientras en otros clubes nadie pide cuentas y las crisis las resuelven los dueños millonarios poniendo dinero de su bolsillo"; 4) "Todo el fútbol español está en crisis por el covid y hay clubes del tamaño del Barça en igual o peor situación. No estoy preocupado. Todo esto pasará"; 5) "El domingo votaré savia nueva, hay que mirar hacia el futuro, no hacia el pasado".

El futuro ya está aquí

Aunque el prestigio del club quedó rayado con tanta reyerta interna, todo esto quizá le traería al pairo al aficionado si se siguieran ganando títulos, pero no es el caso. A la crisis institucional de siempre y a la crisis económica acelerada por el covid se suma la depresión deportiva, con pavorosas goleadas en Champions, entre la falta de competitividad del equipo que lo ganó todo y la irregularidad de los nuevos fichajes. Desde que ganó la Champions en 2015, el Barcelona no ha vuelto a pasar de cuartos y ha sido eliminado con goleadas traumáticas: 3-0 (Roma), 4-0 (Liverpool) y 8-2 (Bayern), resultado que, el pasado agosto, escenificó brutalmente la crisis del club. Días después, Messi anunció su marcha del Barcelona, traumatizando a la parroquia culé; y aunque Bartomeu logró retenerle a las malas, su presidencia quedó vista para sentencia y dimitió en octubre.

El culebrón Messi merece un capítulo aparte: Bartomeu le obligó a quedarse, pero su sustituto en funciones dijo que no fue buena idea económica retenerle, y el contrato de Messi acabó publicado. ¿Una de las gestiones más disparatadas que se recuerden de tu mejor futbolista? ¿Nadie al mando? La autodestrucción del Fútbol Club Barcelona.

Foto: Leo Messi en una imagen de archivo. (Reuters) Opinión

Este domingo habrá nuevo presidente. Momento simbólico para decir adiós al viejo Barça y hola al nuevo. El Barça ha muerto, ¡viva el Barça! ¿Cómo hacerlo?

Dilema universal para todos los equipos exitosos en decadencia, también para el Real Madrid: ¿Cuándo y cómo renovar unas plantillas aburguesadas pero que te lo han dado todo? ¿Cuando volverán el Madrid y el Barcelona a competir por una Champions cada vez más cara por los petrodólares sin fin? ¿Año malo o ciclo histórico fallido?

Rematamos con cuatro hipótesis sobre el futuro deportivo del Barça.

1) Travesía del desierto:

Josep María Minguella: "El Barcelona llegó al cénit mundial con títulos, espectáculo, grandes jugadores, marcas peleándose por patrocinar. Pero el éxito hay que mantenerlo y saberlo transformar, si no lo haces a tiempo viene la debacle deportiva. Hay muchos ejemplos. En 2003, el candidato Laporta dijo que el modelo a seguir era el Manchester United, el club más rico del mundo entonces. Pero el United se hundió luego, dejó la primera línea del fútbol mundial, ni entraba en Champions ni competía en su liga. Han sido muchos años así. Algo parecido le pasó al Milan. Ganas la Champions, no sabes renovarte y vienen los problemas serios. En el fútbol cuesta llegar arriba, pero la transición posterior es aún más difícil. El Barcelona debió empezar ese proceso hace seis años, prescindir de jugadores emblemáticos de los que era necesario (aunque doloroso) desprenderse. Si no lo haces, vas cayendo, cayendo y cayendo, como le ha pasado al Barça; y eso que ha estado sujetado por Messi, el mejor del mundo, si no la caída hubiera sido aún peor".

2) Equipo de segunda línea mundial:

David Valero Carreras
: “Ahora están saliendo jugadores jóvenes con gran rendimiento: Pedri, Ansu Fati. Una generación interesante que pueda valer para descargar gastos y mantener el nivel el curso que viene. Ahora bien: ser competitivo en la Liga no requiere tanto esfuerzo, no hay más que ver lo que pasa este año, que jugando regular el Barça va segundo. En la Liga española, con poco puedes competir, pero la Champions es otra historia. Los grandes equipos españoles están ahora lejos de la Champions, y no creo que el Barça pueda competir en condiciones la siguiente temporada. Pero, ojo, esto es así desde hace media década. Vamos a poder competir en España seguro, y en Europa igual no, pero tampoco es un trauma porque igual ya estamos acostumbrados”.

placeholder Los jugadores del FC Barcelona hacen una piña. (EFE)
Los jugadores del FC Barcelona hacen una piña. (EFE)

3) Los jóvenes salvarán al club:

Rafa Cabeleira: "Veo el año que viene con optimismo. Estos clubs funcionan mejor cuando tienen las bridas bien sujetas, no pueden desmelenarse con el gasto y recurren a la cantera. El Barça tiene varios jugadores jóvenes muy buenos. Hay mimbres para formar un equipo decente sin gastar mucho. Hay que quitarse unos cuantos salarios gordos de encima, pero las sensaciones deportivas no son malas".

4) Todo esto pasará:

Josep María Minguella: “Quizá el Barça nunca haya sufrido una situación económica tan complicada, agravada por la pandemia, pero ya ha pasado antes por momentos difíciles y siempre ha salido a flote. Épocas en las que el equipo podía pasarse diez o doce años sin ganar la Liga, pero el club siempre estaba ahí. El socio quiere que el equipo gane, pero si no gana sigue siendo fiel. De eso se trata”.

El último baile de Xavi Hernández como jugador del Barça fue el 6 de junio de 2015. Jugó 13 minutos en la final de Champions: Barcelona 3-Juventus 1. Nunca más vimos juntos a Xavi, Iniesta y Messi, ganadores de dos Champions entre 2008 y 2011; pero el Barcelona había formado otro tridente demoledor, Neymar, Suárez y Messi, ganadores de cinco títulos en 2015. Se hablaba de nuevo ciclo ganador, de la reinvención del mejor Barça, de la superación del tiki-taka con verticalidad. En realidad, era el principio del fin...

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