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Koeman lleva razón: el Barça tiene un problema desde el punto de penalti
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siete aciertos en 12 intentos

Koeman lleva razón: el Barça tiene un problema desde el punto de penalti

El técnico blaugrana se queja de la falta de efectividad de sus jugadores en las penas máximas en ausencia de Leo Messi y los datos respaldan sus críticas

Foto: Leo Messi, en una imagen reciente. (Reuters)
Leo Messi, en una imagen reciente. (Reuters)

Los penaltis son una lotería. Este viejo tópico del fútbol se argumenta para achacar al azar una mecánica del juego tan importante como las jugadas a balón parado, las transiciones o tirar correctamente un fuera de juego. Si esto fuera verdad, Ronald Koeman tendría derecho a estar muy enfadado con su mala suerte. Hasta 12 penas máximas ha podido ejecutar el Fútbol Club Barcelona en lo que llevamos de temporada 2020/21, solo siete de estos lanzamientos acabaron en gol.

placeholder Messi, instantes antes de tirar un penalti esta temporada. (EFE)
Messi, instantes antes de tirar un penalti esta temporada. (EFE)

“Es demasiado”, resumía Ronald Koeman en rueda prensa, al hablar del pésimo porcentaje que su equipo está promediando en el presente curso. Actualmente, antes de medirse al Elche en la nueva jornada de LaLiga, el club blaugrana anota un 58,3 % de los lanzamientos de penalti que realiza. En comparación, la estadística sí habla bien de Leo Messi, a pesar de que la pena máxima nunca fue uno de sus puntos fuertes. El argentino tan solo ha fallado un disparo desde los 11 metros de los siete que ha intentado.

Ousmane Dembélé y Martin Braithwaite, en ausencia del argentino, asumieron la responsabilidad hasta en dos ocasiones de ponerse frente al portero. El resultado fue idéntico para ambos: un gol y un fallo. Peor desempeño aún tuvieron tanto Antoine Griezmann y Miralem Pjanic, quienes erraron las sendas oportunidades que les brindó el árbitro. La estadística de los blaugranas, comparada con otros clubes punteros de Europa, le da la razón al enfado del técnico culé, situándose en el escalón más bajo.

Para Koeman, esta situación se ha convertido en auténtico problema. El holandés mostró su enfado con sus pupilos tras la victoria ante el Cornellá, donde su equipo desaprovechó dos penas máximas a lo largo del partido. Ramón Juan, el portero del humilde equipo de Segunda B, pasó a la Historia como en el primer guardameta que para dos penaltis en un mismo encuentro al Barcelona. Desde la banda, el técnico culé no entendía como dos jugadores experimentados como Pjanic o Dembélé fallaban sus sendas ocasiones desde los 11 metros.

“Leo Messi es nuestro hombre, pero si no está, necesitamos a otros que tengan calidad y que metan los penaltis”, sentenció el neerlandés en el encuentro con la prensa previo al partido frente al Elche. La sanción que el argentino todavía cumplirá en LaLiga tras agredir a Asier Villalibre en la final de la Supercopa ha destapado esta nueva crisis en el aparato ofensivo de los blaugranas.

Preguntado acerca sobre quién será el elegido para asumir la responsabilidad en ausencia del crack argentino tras los fallos de Cornellá, Koeman no ocultó sus dudas: “Mañana decidiremos en la charla qué haremos. Decidiremos los dos jugadores que pueden tirar el penalti, pero siempre la última palabra será para nuestro capitán”. Así, el código interno del vestuario dicta que el propio Messi podrá elegir a su sustituto para las penas máximas.

Suárez, un seguro de vida en temporadas pasadas

La debate sobre si la decisión de dejar marchar a Luis Suárez a un rival directo como el Atlético de Madrid estaba sobre la mesa, pero ahora la falta de puntería de los blaugranas en este curso aviva aún más el conflicto. En las últimas tres temporadas como culé del delantero, Leo Messi le cedió un total de ocho lanzamientos de penaltis: el charrúa los anotó todos.

placeholder Suárez, en un pasado penalti con el Barcelona. (EFE)
Suárez, en un pasado penalti con el Barcelona. (EFE)

“Solo me preguntáis cuando marca. Es un gran jugador, le deseo la mejor de las suertes, pero la decisión está tomada” contestó Koeman, visiblemente molesto, sobre la marcha de Luis Suárez a principios de la temporada. A día de hoy, y ante cualquier baja de Leo Messi, el Barcelona afronta la temporada sin un especialista puro desde los 11 metros. Curiosamente, el Atlético de Madrid es otro equipo al que se le están complicando las penas máximas en la 20/21, habiendo convertido tres goles de las cinco oportunidades posibles. Aunque por debajo en la clasificación de LaLiga, mucho más fiable se muestra el Real Madrid, que ha transformado sus tres penaltis en goles gracias a dos especialistas, Sergio Ramos y Karim Benzema.

Otrora, a Messi se le criticó por sus fallos desde el punto de penalti. Ahora incluso en este aspecto del juego el Barça demuestra una gigantesca dependencia de su capitán y líder. La estadística da de lado a jugadores como Griezzman o Dembélé, mientras que otra apuesta razonable según los números como Coutinho se encuentra recuperándose de su última lesión de rodilla. A Koeman le toca trabajar los aspectos mentales y la práctica para acabar con un nuevo handicap en un Barcelona al que le cuesta carburar.

Los penaltis son una lotería. Este viejo tópico del fútbol se argumenta para achacar al azar una mecánica del juego tan importante como las jugadas a balón parado, las transiciones o tirar correctamente un fuera de juego. Si esto fuera verdad, Ronald Koeman tendría derecho a estar muy enfadado con su mala suerte. Hasta 12 penas máximas ha podido ejecutar el Fútbol Club Barcelona en lo que llevamos de temporada 2020/21, solo siete de estos lanzamientos acabaron en gol.

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