Así juega el Borussia Dortmund, rival del Sevilla en la Champions

El talento ofensivo joven que reúne el cuadro germano está al alcance de muy pocos equipos en Europa, pero la estructura colectiva no está a su altura. Después de cambiar de dibujo varias veces desde el inicio de curso, no conseguir dar con la tecla y encajar un doloroso 1-5 ante el Stuttgart, el cuestionado Lucien Favre ha acabado abandonado la entidad alemana.

En su lugar ha llegado el segundo entrenador del suizo, Edin Terzic, quien dirigirá al equipo como técnico interino hasta final de curso. Así las cosas, la entidad recuperará al temible Erling Haaland en enero, ahora lesionado, para completar un ataque con Jadon Sancho, Giovanni Reyna o Marco Reus. El equipo pide a gritos un técnico capaz de explotar el potencial imberbe de unos jugadores con un margen de mejora extraordinario.

Así las cosas, el Sevilla deberá decidir si pretende un intercambio de golpes con un equipo con mayor pegada que los de Julen Lopetegui o, si al contrario, reduce el ritmo del partido y limita el contraatque teutón. Del mismo modo que hay un Sevilla que brilla con espacios donde Lucas Ocampos, Youssef En-Nesyri y Jesús Navas campan a sus anchas, también existe otra versión de un equipo al que se le apaga la luz cuando no puede correr y echa en falta a Éver Banega. Por tanto, hablamos de un cruce muy abierto, de ritmo alto y complicado de anticipar, ya que la evolución del conjunto alemán en estos dos meses hasta el enfrentamiento podría ser radicalmente distinta.