La solidez de De Gea, la mejor noticia de una España con poca pegada frente a Suiza (1-0)

A la selección española de Luis Enrique le está costando carburar y el partido contra Suiza no fue una excepción. El técnico asturiano ha encontrado un grupo habitual en las últimas convocatorias, apostando por sangre nueva como Oyarzabal, Mikel Merino o Pau Torres. Pero el buen juego no llega. El partido frente al combinado suizo se resolvió con un solitario gol del extremo izquierdo de la Real Sociedad, tras un error grosero de la zaga al inicio del partido (Min 14). La falta de gol sigue siendo una asignatura pendiente para España, que perdonó varias ocasiones claras. Una victoria que apuntala la primera plaza del Grupo 4 de la Liga A, dos puntos por delante de Alemania y a 6 del descenso, marcado por la propia Suiza.

La opción más evidente que los de Luis Enrique perdonaron fue un centro al segundo palo por parte de Jesús Navas que Oyarzabal falló a puerta vacía al inicio de la segunda parte. Los pecados de la selección volvieron a ser los habituales, falta de contundencia y excesivas combinaciones en situaciones lejos de ser peligrosas para Suiza. Los últimos minutos se conviertieron en un asedio a la portería de De Gea a base de centros laterales que Ramos y los suyos consiguieron despejar. Una dura falta al guardameta provocó un pequeño susto al final del partido.

David de Gea está encontrando un bálsamo de agua con España. Luis Enrique tiene total confianza en el portero del Manchester United, es su guardameta titular y este responde con una actuación sólida frente a Suiza. Pese a que Inglaterra sigue cuestionando su papel con los diablos rojos, el ex del Atlético de Madrid evitó en el partido de la Liga de Naciones de la UEFA que la selección española perdiera frente a los suizos.

El portero mostró durante los 90 minutos sus mejores recursos. Aquellos que le convirtieron otrora en un guardameta referencia en la Premier League. Una parada con la mano derecha ante un disparo a bocajarro de Loris evitó el que habría sido gol por parte del combinado suizo. Además, De Gea estuvo valiente en las escasas salidas que tuvo que realizar a balón parado (su histórica debilidad. Con los pies, el español también demostró calma y tranquilidad, sin caer en la presión intensa de los rivales. Aunque no tuviera excesivo trabajo, el portero recupera confianza con La Roja.

Luis Enrique apuesta por jugar con falso 9

El problema de España con los delanteros centro es una realidad. Los Álvaro Morata, Diego Costa o Rodrigo Moreno no acaban de dar un paso adelante, ni siquiera yendo convocados en el caso de los dos primeros. Ante esta situación Luis Enrique optó por alinear a tres habituales extremos en la delantera, con Oyarzabal jugando de falso 9. Ansu Fati, la gran revelación española del último año, se ha hecho con la titularidad de la banda izquierda. En la derecha, Ferran Torres demostró picardía intentando en todo momento atacar la zaga suiza, sin excesiva suerte.

Oyarzabal aportó movilidad en la delantera, pero no consiguió destacar en esta posición de falso punta. El extremo de la Real Sociedad consiguió anotar el gol del partido tras un error grosero de la salida de balón de la defensa de Suiza, especialmente de Sommer, portero titular del Borussia de Dortmund, que regaló el tanto.

De Gea; Jesús Navas, Sergio Ramos, Pau Torres, Gayá; Busquets, Merino; Dani Olmo, Ferrán Torres, Ansu Fati; y Oyarzábal fue el 11 titular que Luis Enrique eligió para medirse ante Suiza. Canales y Traoré entraron en el minuto 57 como refresco de Olmo y Fati. Al final del partido Gerard Moreno y Rodrigo apuntalaron la delantera y el centro del campo español.

El revulsivo Traoré

El jugador de moda en la Premier League, Adama Traoré, volvió a mostrar una exuberancia física abrumadora. El extremo derecho sustituyó a Fati, cambiando la banda con Ferran Torres, creando las jugadas de peligro de la selección española en la segunda mitad. Un posible penalti tras un remate de Ramos causó cierta polémica entre la plantilla de España, pero el árbitro decidió no conceder la pena máxima.