España bate récords con Ansu y Ramos en un paseo de España ante Ucrania (4-0)

Sergio Ramos y Ansu Fati, representantes de dos generaciones muy diferentes del fútbol español, dieron esperanza este domingo a los aficionados de una selección que ha perdido parte del extraordinario vínculo emocional creado durante el glorioso cuatrienio 2008-12. En un verdadero paseo ante una floja Ucrania, el equipo de Luis Enrique (con siete cambios respecto a Alemania) ofreció un recital en la primera parte del partido, liderada por un chico de 17 años que hizo historia no por un gol aislado, sino por un gol fruto de un magnífico partido, que descompensó desde un inicio provocando el penalti que le dio a España (y a Sergio Ramos) su primer gol en el minuto 3.

España se exhibió en el estadio Alfredo di Stéfano de Valdebebas y se colocó (de paso) en la cabeza del Grupo 4 de la Nations League, beneficiada por el sorprendente empate de Alemania frente a Suiza (1-1). El dato puede considerarse relevante, pero menos que la gran imagen ofrecida por una selección que sigue buscando su nueva identidad. En espera de un once titular reconocible, la presencia de Thiago y de Pau Torres confirmó algunos puestos fijos en la nueva España: Reguilón, de extraordinario partido (y gran susto final por una fuerte torcedura de tobillo sin diagnóstico aún), jubiló posiblemente a Jordi Alba en la selección de Luis Enrique. Rodri es verosímilmente un jugador con más capacidad que Busquets en estos momentos, y Merino justificó con un extraordinario despliegue su inclusión en una medular tradicionalmente superpoblada de futbolistas talentosos.

La noche de Ansu Fati

Tras el empate en Stuttgart, el monólogo español ante la Ucrania del legendario Sevchenko es una noticia alentadora en un momento de incertidumbre y transición, tanto en el equipo como fuera de él. A pesar de la demostración goleadora de Ramos, Ansu Fati fue la figura del día. "Ha nacido una estrella", titularán muchos periódicos el lunes. Talentoso, descarado y fulgurante, brilló frente a Alemania en su primer partido con la Selección e insertó su nombre en los libros de fútbol a la segunda oportunidad.

Sergio Ramos, con 23 goles, se convirtió esta noche de domingo en el defensa más anotador con su selección en la historia del fútbol (hasta este domingo lo era el argentino Daniel Pasarella, con 22 tantos). Además, iguala precisamente a Di Stéfano como octavo mejor goleador de la historia de España, con 23 goles. Sumado al hecho de que Ansu Fati sea ya el goleador más joven de la historia de la selección española, el domingo de fútbol internacional resultó bastante entretenido. El aficionado echa sin duda en falta un once más estable y consolidado, pero las sensaciones en el equipo son buenas. La goleada fue redondeada por Ferrán Torres, otro representante fabuloso de la generación más joven (y como Rodri, otro talento emigrado de una Liga progresivamente debilitada).

España está más cerca de encontrar la nueva columna vertebral que le asemeje a la España de hace una década. La incógnita principal sigue siendo el hallazgo de un '9' indiscutible. Resuelto (aparentemente) el debate de la portería, del 'cerebro' (Thiago) y del desequilibrio ofensivo (Ansu, con permiso de Asensio y Oyarzábal), España continúa buscando su delantero centro indiscutible tras un partido casi perfecto, con una primera parte muy divertida, en la que un chico de 17 años y un capitán de 34 hicieron historia. Lo dijo Luis Enrique tras el encuentro: "Aquí no miramos el carnet de identidad".