El mal fario de Luis Enrique como seleccionador de España

El mal fario va por barrios y termina confirmando la ley de Murphy... El pasado 4 de febrero, un responsable de la UEFA negaba públicamente que el coronavirus fuera una amenaza para la Eurocopa que debía disputarse este verano y que finalmente ha sido aplazada a 2021. "Por supuesto, no sabemos qué pasará y si es necesario introducir alguna modificación y medidas adicionales de control a petición del Gobierno ruso, lo haremos. Pero, en estos momentos, no pensamos que el coronavirus pueda influir", afirmó Andreas Schär, director de Estadios de la UEFA, quien, como tantos otros, se ha cubierto de gloria.

La noticia se venía cocinando desde hace varios días y salió del horno este martes. La primera Eurocopa de la historia con 24 participantes y 12 sedes, la española en Bilbao, se suspende por culpa del COVID-19 y para intentar abrir paso al resto de competiciones de clubes, especialmente la UEFA Champions League. El único impedimento, el Mundial de Clubes que la FIFA se ha inventado para las mismas fechas para seguir haciendo caja. Ya es triste que hayamos tenido que sufrir una pandemia para que los dirigentes del fútbol se den cuenta de la sobreexplotación a la que someten a los jugadores e, incluso, la saturación que sufren los aficionados.

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Pero centrándonos en cómo afecta la suspensión de la Eurocopa a la Selección española, hay un dato digno de destacar y, dadas las circunstancias, lamentar. Desde que Luis Enrique fue presentado como nuevo seleccionador español el 19 de julio de 2018, es decir, hace ya 20 meses, el asturiano solo la ha podido dirigir 7 partidos, con un balance de 5 victorias y 2 derrotas, 19 goles a favor y 9 en contra. Lucho se estrenó como sucesor de Julen Lopetegui y el efímero Fernando Hierro en una nueva competición, la UEFA Nations Cup. Tras su prometedor debut en Wembley con victoria ante Inglaterra por 1-2, con goles de Sául y Rodrigo para remontar el 1-0 de Rashford, llegó el 6-0 a Croacia, cuando la grada del Estadio Martínez Valero de Elche llegó a corear el nombre de Luis Enrique. "Ha sido un día espectacular que no podíamos ni imaginar. Refuerza mucho más empezar así", dijo el técnico.

Claro que las cosas se torcieron, pues a la derrota en octubre de 2018 ante Inglaterra en el Benito Villamarín por 2-3 tras llegar al descanso con 0-3, se sumó la de Croacia por 3-2, un resultado que dejó a España como segunda de grupo, por detrás de los ingleses, y fuera de las semifinales. Además de dos amistosos, contra Bosnia (1-0) en el Estadio Gran Canaria y en Cardiff, donde España goleó a Gales (1-4), respectivamente, Luis Enrique solo pudo asistir a un partido correspondiente a la fase de clasificación para la Eurocopa que este martes fue aplazada a 2021. Concretamente en el 2-1 contra Noruega disputado en Mestalla, con goles de Rodrigo (1-0) y Sergio Ramos, de penalti (2-1).

La desgraciada enfermedad de su hija

Fue el mismo día del segundo partido de clasificación, contra Malta en la localidad de Ta'Qali, cuando la Federación Española de Fútbol (RFEF) hizo oficial que Luis Enrique había abandonado la isla de madrugada, en un vuelo privado junto al psicólogo, por un problema familiar grave. Aunque al principio se mantuvo en el cargo, en junio de 2019 Luis Rubiales y José Francisco Molina convocaron una rueda de prensa de urgencia para comunicar que era sustituido por Robert Moreno y el propio técnico comunicó su renuncia a través de un comunicado.

El 29 de agosto, y después de que todos los medios hubieran mantenido un absoluto respeto a su intimidad, llegó la triste noticia. "Nuestra hija Xana ha fallecido esta tarde a la edad de 9 años, después de luchar durante 5 intensos meses contra un osteosarcoma", escribió Luis Enrique en su cuenta de Twitter. A partir de ahí ya saben lo que pasó entre el asturiano y su sucesor en el cargo, el catalán Robert Moreno, y la verdad es que no merece la pena recordarlo.

Con España clasificada para la Eurocopa, el 27 de noviembre Luis Enrique volvió a ser presentado como seleccionador en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas. Olvidado su convulso regreso, el reestreno estaba previsto que fuera frente a Alemania, el próximo jueves 26 de marzo en el Wanda Metropolitano, para el domingo 29 medirse a Holanda en el Johan Cruyff Arena de Amsterdam. Sin embargo, ambos partidos han sido suspendidos, algo que probablemente suceda también con el que estaba previsto jugar contra Portugal en el Metropolitano el 5 de junio, ya que lo normal es que en esas fechas aún se esté disputando LaLiga.

El pasado 3 de marzo, con Luis Enrique presente, se realizó el sorteo para la próxima UEFA Nations League. España quedó encuadrada en el Grupo A 4 junto a Suiza, Ucrania y Alemania, sin duda el rival más duro y también el primero con el que tendrá que enfrentarse, en principio el 3 de septiembre. Hay que esperar, sobre todo por la incertidumbre que el COVID-19 ha provocado a nivel mundial, pero quizás este sea el octavo partido que Luis Enrique se siente en el banquillo de la Selección más de dos años después de llegar a un cargo que desde lo sucedido con Lopetegui en Rusia parece maldito. Pero dado que el mal fario es mejor ni mentarlo, quedémonos con algo que solía decir el propio Lucho: "Mala suerte tiene el que juega contra el Barça". Pues ojalá pronto pueda decir lo mismo, pero "contra España"....