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El giro en el trato que dispensa Zidane a Bale
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El giro en el trato que dispensa Zidane a Bale

No arriesgar con la salud del delantero, que se retiró con molestias musculares ante el Granada, es la prioridad de Zidane y el Real Madrid en este parón de selecciones

Foto: Gareth Bale, durante el partido frente al Granada. (Reuters)
Gareth Bale, durante el partido frente al Granada. (Reuters)

Hay pocas cosas que incomoden más a Zinédine Zidane que los parones de selecciones. El técnico tiene malas experiencias al respecto y sabe que cualquier situación complicada es susceptible de empeorar cuando entran las selecciones en juego. Y en este caso, el contexto es bastante preocupante para el entrenador del Real Madrid, que ve cómo hay problemas con Marcelo, Toni Kroos, Mendy, James Rodríguez, Luka Modric, Thibaut Courtois o Gareth Bale. Por no hablar de lesionados de larga duración, como Marco Asensio, o de media, como Nacho.

En este caso, Zidane, y el Real Madrid han decidido ponerse firmes y preservar la salud de sus jugadores. Especialmente de los que están tocados, los que sufren molestias o los que acaban de salir de periodos de inactividad debido a lesiones. En el club blanco están especialmente preocupados por Gareth Bale, que se retiró del partido con el Granada en el minuto 82 con molestias musculares.

En un principio, el Real Madrid quería que el jugador se desplazara a su país para ver a los jefes de los servicios médicos de la federación galesa para pasar los consiguientes exámenes médicos y que regresara a Madrid para descansar aprovechando el parón de selecciones, aunque finalmente se ha vestido de rojo para realizar el entrenamiento con sus compatriotas (algo que no ha sentado nada bien en la Casa Blanca...). Zidane ha priorizado el estado de salud del galés, que se ha convertido junto a Hazard en el gran refuerzo de la plantilla este verano, y por eso prefieren que no fuerce lo más mínimo.

placeholder Bale, entrenando con Gales este lunes. (Reuters)
Bale, entrenando con Gales este lunes. (Reuters)

Bale ha pasado una pretemporada complicada. Sin embargo, el galés parece más centrado. En lo personal, atraviesa un buen momento, después de celebrar su boda el pasado verano y tras confirmar que se queda en Madrid, donde siempre ha querido estar por el estilo de vida que lleva y la tranquilidad de la que disfrutan tanto su familia como él.

El galés ha pasado de estar en el mercado a ser uno de los referentes del equipo en ataque, algo que le hizo saber el propio Zidane una vez se confirmó su permanencia en el equipo. Después de eso, Bale ha ido ganando importancia en el juego y ha vuelto a mostrar destellos del jugador desequilibrante que fichó Florentino Pérez del Tottenham. Zizou trata ahora de dotarle de una consistencia que le ofrezca más regularidad y se convierta en el mejor socio de Benzema, con el que mantiene muy buena relación. El técnico francés ha pasado de declarar en verano que "cuanto antes salga, mejor" a tratarle como la estrella del vestuario.

Sigue hablando más bien poco

Bale no ha cambiado mucho su forma de comportarse en el vestuario. Sigue manteniendo una relación cordial con sus compañeros, pero no es un jugador que empatice especialmente con el grupo. Se mantiene al margen de la plantilla en muchas situaciones y se limita a cumplir con sus responsabilidades a la hora de entrenar y jugar. Con Hazard, que habla inglés por su paso por el Chelsea, mantiene buena relación, como con Modric, mientras Sergio Ramos y Benzema son los jugadores que están más pendientes de mantenerle integrado en la disciplina de grupo.

Debido a este buen inicio de Bale esta temporada, en la que su estado de ánimo parece haber sido clave para su buen rendimiento y la ausencia de lesiones, Zidane no quiere arriesgar con el galés. Y las órdenes desde el Real Madrid han sido claras: que viaje, se someta a las revisiones pertinentes y se vuelva. Ahora esperan que la federación galesa no les juegue una mala pasada.

Otros dos jugadores a los que se tiene entre algodones, porque acaban de salir de periodos de recuperación de lesiones, son Luka Modric y James Rodríguez. El primero sustituyó a Kroos ante el Granada y lo celebró con un golazo, pero el club opina que aún no tiene el ritmo de juego suficiente como para competir durante 90 minutos con su selección. El caso de James tiene más que ver con la ausencia de pretemporada del colombiano, que sigue cogiendo fondo con un plan personalizado después de incorporarse más tarde que el resto de la plantilla y no contar en los partidos de preparación para Zidane.

placeholder Luka Modric, rodeado de sus compañeros. (EFE)
Luka Modric, rodeado de sus compañeros. (EFE)

Courtois, que juegue con Bélgica

James ha disputado más minutos que Modric en los últimos partidos, pero ha terminado los encuentros fundido físicamente. Y por eso desde el 'staff' técnico de Zidane, Dupont trabaja para que alcance el punto de forma de sus compañeros. La intención del club es que ambos jugadores sigan trabajando para ponerse a punto sin ver afectada esa planificación por los compromisos de sus selecciones. Algo que no es fácil que ocurra, porque son jugadores de referencia en Croacia y Colombia. Pero el clásico del fútbol español con el Barça se asoma al calendario el próximo 26 de octubre.

Después están casos como el de Toni Kroos, que según confirmaba una resonancia magnética sufre una lesión muscular en el aductor de la pierna izquierda que hace que peligre su participación en el clásico. Los servicios médicos trabajarán para recuperar al alemán en estas tres semanas, algo que pasa por que ni siquiera viaje a Alemania a hacerse exámenes médicos.

Y, por último, está la situación de Thibaut Courtois, que se sintió indispuesto en el partido ante el Brujas y tuvo que ser sustituido. En Bélgica dan por hecho que el portero participará con normalidad en los compromisos de su selección y el Real Madrid también espera que así sea. Partidos que deben devolver al cancerbero blanco la confianza que no termina de exhibir en los partidos con los de Zidane.

Hay pocas cosas que incomoden más a Zinédine Zidane que los parones de selecciones. El técnico tiene malas experiencias al respecto y sabe que cualquier situación complicada es susceptible de empeorar cuando entran las selecciones en juego. Y en este caso, el contexto es bastante preocupante para el entrenador del Real Madrid, que ve cómo hay problemas con Marcelo, Toni Kroos, Mendy, James Rodríguez, Luka Modric, Thibaut Courtois o Gareth Bale. Por no hablar de lesionados de larga duración, como Marco Asensio, o de media, como Nacho.

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