El cuento chino de Sergio Ramos o cómo se hace la bola más grande en el Real Madrid

Se ha calentado, de forma sospechosa, el futuro de Sergio Ramos en el Real Madrid hasta el punto de que aparece una información, en Jugones, en la que el capitán pide a Florentino Pérez que le dé la carta de libertad porque tiene una oferta millonaria del fútbol chino. A Sergio Ramos le quedan fuerzas, ganas y ambición para seguir compitiendo en el fútbol de élite y elegir entre algunos de los clubes más importantes de Europa. A sus 33 años no se plantea retirarse de la pomada para buscar un retiro dorado en China. Entre sus planes, a corto plazo, está seguir en el Real Madrid y dar guerra. Conseguir que el presidente le amplíe una temporada más con la consiguiente mejora de contrato. Gana 12 millones de euros netos y aspira a subir esta cifra. Los cruces de mensajes empiezan a evidenciar una nueva 'guerra fría' entre presidente y capitán.

El cuento chino de Sergio Ramos es peligroso para el Real Madrid si se trata de dejar en evidencia a un jugador que tiene un fuerte carácter y es capaz de aguantar el pulso. Ya lo hizo en 2015 cuando vivió momentos de tensión con Florentino Pérez. Tenía una oferta irrechazable del Manchester United. Florentino suavizó su postura y llegaron a un acuerdo. Al presidente no le venía nada bien que, después de la salida de Iker Casillas, se fuera Sergio Ramos. Hicieron las paces y el cuento fue de hadas. Empezaron a llegar los años de bonanza en Europa con las tres últimas Champions consecutivas en las que el capitán ha tenido un protagonismo destacado. Puede sonar a broma, pero hay quien cree que fue más importante el forcejeo de Ramos que acabó en lesión de Mohamed Salah que el golazo de chilena de Gareth Bale al Liverpool.

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De la temporada catastrófica no se libra ni Sergio Ramos. Bajo sospecha porque no jugó los últimos partidos por estar recuperándose de unas molestias musculares. Florentino Pérez está tan decepcionado con el rendimiento del equipo que no le apetece hablar de mejora de contratos y se centra en cómo desbloquear la salida de Bale –pide los 51 millones de contrato– y otros asuntos urgentes: Keylor Navas, James, Ceballos… Lo de Ramos no lo considera prioritario. Pero la bola se está haciendo cada vez más grande. Si al sevillano le da por tensar las conversaciones se puede encontrar en la misma situación que hace un año Cristiano Ronaldo. El presidente le dirá que traiga 100 millones de euros y dará por buena la salida de un veterano.

Choque con 'Tito Floren'

Esta temporada ya han tenido un encontronazo. Sucedió el 5 de marzo con la eliminación en la Champios frente al Ajax de Ámsterdam en el Bernabéu. El calentón de Florentino acabó con un órdago de Ramos. “Me pagas y me voy”, le dijo el capitán. El presidente reprochó al equipo el bajo rendimiento y la falta de profesionalidad por tener demasiados días libres. Ramos, que esa noche no jugó por estar sancionado, se dio por aludido y el Madrid fue un polvorín. Ni con Zidane se recuperó la normalidad.

Se avecinan cambios en el Real Madrid y en los planes del entrenador no está que se vaya Sergio Ramos. Ni en los del capitán hacer las maletas para irse a jugar a China. Algún día tendrá que cerrar su ciclo en el equipo madridista, pero no se espera que sea en este momento. Aunque viendo como se hace la bola más grande nadie descarta que se puedan precipitar los hechos. Igual que discuten y se enfadan, Ramos y Florentino son capaces de darse un abrazo y echarse flores. La borrasca en el Madrid ahora tiene el nombre de Sergio Ramos, pese a que el sevillano llama al presidente como 'Tito Floren'.