El plan de Isco para ganar el pulso a Solari en el Real Madrid

Isco ha pasado de la titularidad indiscutible al ostracismo más absoluto con Santi Solari en el Real Madrid. Tanto en el club como en el entorno del jugador creen que la situación es irreconducible, por más que el técnico señalase en la rueda de prensa posterior al Betis 1 - 2 Real Madrid que no tiene nada personal contra el jugador. Isco no entra en los planes de Solari (el Madrid ha ganado el 100% de los partidos sin Isco en el campo) y el club ha respaldado al de Rosario con la firma de un contrato por tres años. Algo que, sin embargo, nadie en el club ni en el vestuario ha entendido como una apuesta definitiva por el argentino. En este hecho se basa el plan de Isco para seguir en el Madrid.

El entorno de Isco no cree que Solari vaya a durar más allá de junio en el banquillo madridista. Por eso la posición del futbolista es firme: aguantar hasta que termine la temporada, esperando que el Real Madrid elija al técnico que vaya a dirigir el proyecto blanco los próximos años, y pasar página cuando acabe la etapa de Solari en el Real Madrid.

En el vestuario, donde los jugadores mantienen con el entrenador una relación correcta, se tiene la sensación de que Solari es un técnico interino que obedece las órdenes de Florentino Pérez y que terminará su estancia en el banquillo blanco en junio, en el mejor de los casos. Por eso Isco, cuya actitud en el enfrentamiento con el técnico le ha distanciado de muchos compañeros, quiere esperar discretamente a que Solari caiga maduro.

Fuentes que rodean al andaluz reconocen que Isco ha dado pasos erróneos, como en los capítulos en que se ha enfrentado a personal del cuadro técnico de Solari y al propio entrenador. Ahí, incluso Sergio Ramos intentó mediar hasta que el exmalaguista realizó el gesto feo al Bernabéu. Por ello, Isco ha adoptado un perfil bajo y silencioso ante la caída de su popularidad tanto en el vestuario como en la grada.

Isco prohíbe sondear ofertas

Isco ha dado orden de no sondear ofertas para salir, ni espera que el Real Madrid le ponga en el mercado. Aunque a día de hoy no se ha producido ningún movimiento desde el club para tranquilizar o respaldar en estos momentos difíciles al malagueño. Desde las oficinas del Bernabéu, donde se ha querido filtrar el respaldo del club al jugador en los medios afines al presidente, prefieren guardar distancias en este conflicto entre el técnico y el jugador.

Para Florentino Pérez, Isco es un jugador con mucho mercado por el que podría recibir ofertas interesantes de cara a acudir al mercado para renovar un vestuario que este verano sufrirá muchos cambios. El Real Madrid no le ha puesto en el mercado ni se plantea hacerlo, pero tampoco cierra las puertas a nada. Isco ha sido un jugador que ha alternado rachas de buen juego con momentos de baja forma, lo que le ha llevado a no ganarse la titularidad ni con Ancelotti ni con Zidane. Solo Lopetegui señaló al malagueño como jugador franquicia.

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El presidente (y 'director deportivo') apuesta por jugadores como Asensio, que tampoco está cumpliendo las expectativas, y el recién fichado Brahim para jugar en la misma posición y percibe que son futbolistas con más futuro que Isco. Pero también que a sus 26 años se trata de un futbolista con talento perfectamente recuperable para el Real Madrid de los próximos años.

Estoicismo y paciencia

Isco ha visto cómo jugadores como Vinícius, Ceballos, Asensio o futbolistas del filial como Valverde o Cristo le han adelantado en la rotación de Solari. Sin embargo, el malagueño parece estar dispuesto a soportar con estoicismo su situación y esperar que concluya la etapa de Solari para recobrar el protagonismo que perdió en el campo, especialmente tras su roce con el entrenador y sus ayudantes.

Ahora resta saber si el malagueño tendrá paciencia suficiente para soportar otros cinco meses de ostracismo o si Solari levantará al futbolista el 'castigo' en el banquillo. Los despachos observan con interés el desenlace de este episodio al tiempo que varios equipos tratan de posicionarse ante una eventual marcha del malagueño del Bernabéu debido a su situación.