La reacción distante del vestuario del Real Madrid ante el caso Isco

En el vestuario del Real Madrid extrañaba la irrelevancia de Isco con la llegada de Santi Solari, pero la actitud del jugador ha terminado por dar la razón al de Rosario junto a los motivos deportivos. Por eso, sus compañeros han tomado distancia, conscientes de que el comportamiento del malagueño no ha sido acertado. Preguntado por ello, Marcelo, segundo capitán del equipo, declaraba tras el triunfo en Roma: "Todos los jugadores quieren jugar, pero toca trabajar, ver lo que estás fallando y mejorar. No soy quién para dar consejos, Somos mayores, padres de familia, y todos sabemos lo que tenemos que hacer”. Marcos Llorente, el otro jugador que atendía a los medios, se pronunciaba con mayor escepticismo aún: "¿Isco? Igual que a mí me toca, le tiene que tocar a todos". Distancia.

Esta decisión hace fuerte a Solari, que sale reforzado ante los jugadores y ante el madridismo. Desde que llegó al banquillo del Real Madrid, el argentino ha tomado decisiones impopulares en algunos casos dentro del vestuario, pero que ha mantenido hasta acabar por hacerse fuerte. La aparición de Vinicius se entendió por parte del grupo como una concesión a los deseos de Florentino Pérez, pero Solari vio en el brasileño una alternativa a la que abrazarse ante el estado depresivo del equipo y el jugador terminó por ganarse el respeto del vestuario. La apuesta de Courtois en lugar de Keylor Navas, que tiene que ver con el gusto del entrenador por los porteros altos que manejan bien las situaciones de presión, también se leyó en el vestuario como un brindis a la presidencia. Keylor es un jugador muy querido en el grupo, pero hoy el vestuario ya no cuestiona la titularidad de Courtois.

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Rubén Rodríguez

La suplencia de Marco Asensio, un futbolista que no está dando la talla ni ha asumido los galones que se le dieron desde un principio, la escasa presencia de un Mariano que no contó para Lopetegui y tampoco está teniendo protagonismo con Solari, y especialmente la situación de Isco han terminado por entenderse con normalidad como decisiones deportivas del entrenador.

Solari se ha criado en un vestuario

Lo que no se esperaba el grupo es la errática respuesta de Isco, que ha terminado por reforzar al entrenador tras su decisión ejemplarizante en Roma. Solari se ha criado en un vestuario, no solo como jugador sino como persona, porque desde niño entraba y salía de ellos con su padre y su tío, que eran entrenadores. Para el argentino, los códigos de comportamiento y respeto que rigen el comportamiento del grupo son innegociables. Y eso es algo con lo que no va a transigir. Isco se equivocó y Solari, con toda naturalidad, tomó una decisión en consecuencia. El argentino incluso quiso restar importancia a su decisión de dejarlo en grada al comentar a la conclusión del partido que "son decisiones puntuales que tienen que ver con lo deportivo".

El entrenador sabe que el futbolista es un recurso importante y valioso en el grupo y como tal tratará de recuperarlo. Pero antes de que eso ocurra Isco debe retractarse y cambiar su actitud dentro y fuera del campo. La plantilla se ha distanciado para no verse salpicada por este episodio, pero el malagueño sigue contando con la complicidad de pesos pesados del equipo como Sergio Ramos, quien, en su rol de capitán, tratará de mediar para limar asperezas y resolver el conflicto de la mejor manera para todos. Isco tiene un problema y Solari se ha ganado el respeto de su escéptico vestuario. Ahora resta saber si el malagueño buscará la solución fuera del Bernabéu o tirará de humildad y buscará reconducir una situación que ha llegado a un punto crítico en Roma.