André Gomes se confiesa: "Tengo miedo de salir a la calle, me da vergüenza"

El centrocampista portugués André Gomes reconoce no estar disfrutando de su etapa en el Barcelona, donde aún no ha podido ofrecer su mejor nivel, algo que le tiene atenazado cuando salta al terreno de juego y le obliga a pensar demasiado en lugar de dejar ir todo el fútbol que lleva dentro. "No me siento bien en el campo, no estoy disfrutando de lo que puedo hacer", confiesa André Gomes en una entrevista concedida a la revista 'Panenka'. El internacional luso regresa a sus primeros días en el vestuario azulgrana para buscar una explicación: "Los primeros seis meses fueron bastante bien, pero luego las cosas cambiaron. Quizá la palabra no sea la más correcta, pero se volvió un poco infierno, porque empecé a tener más presión".

André Gomes fichó por el Barça en el verano de 2016. Y un año y medio después, los aficionados siguen preguntándose dónde está el futbolista que causó tan buena impresión en las filas del Valencia. A su gesto serio y la inseguridad con que desarrolla su juego les han seguido los primeros silbidos del Camp Nou, y el jugador portuense admite que existe "una herida" que no sabe cómo cicatrizar.

"Pensar demasiado me hace daño. Porque pienso en las cosas malas y, después, en lo que tengo que hacer, y voy siempre a remolque. Aunque mis compañeros me apoyan bastante, las cosas no me salen como ellos quieren que salgan", afirma. En los entrenamientos, fuera de los focos, cuando no tiene que demostrar nada al gran público, se siente "muy tranquilo" y "cómodo" con sus compañeros, menos cuando viene de jugar otro mal partido. Ahí comienza de nuevo a darle vueltas a la cabeza.

"Obviamente que hay algún día que estoy un poco mal de confianza, porque hasta en los entrenamientos se nota. Sabes que has sufrido. Quizás he jugado el día antes o dos días antes y aún estoy con la imagen del partido, que no me permite seguir adelante", desvela.

Solo hay que remontarse a la semana pasada para entender la presión de la que habla el centrocampista. En el partido del domingo contra el Atlético, la afición no dudó en pitar a Gomes después de salir en sustitución de Iniesta. La grada ya le había mostrado su descontento en más de un partido y esta vez, cuando provocó una falta en el minuto 68, parte de la afición comenzó a pitarle.

Aunque Valverde no dudó en encararse con la grada y Piqué pidió incluso un aplauso para su compañero, es un episodio que se suma a la presión que Gomes lleva tiempo sufriendo. “Es un futbolista que nos ayuda mucho”, le defendía el entrenador ante los medios. “El jugador tiene que dar y el público tiene que comprender que puede cometer un error”.

"No me permito sacar la frustración que tengo y no hablo con nadie. Es como si me sintiera avergonzado", dice André Gomes

André Gomes admite que no lleva nada bien sentir que no está a la altura: "A veces me encierro. No me permito sacar la frustración que tengo. Entonces, lo que hago es no hablar con nadie, no molestar a nadie. Es como si me sintiera avergonzado". Hasta el punto de que le ha pasado en más de una ocasión "tener miedo de salir a la calle", por "eso de que la gente te pueda mirar".

El centrocampista azulgrana va acumulado su frustración hasta que estalla, y precisamente por eso sus amigos son los primeros en hacerle ver que su problema habita en la cabeza. "Me dicen que voy con el freno de mano. Y lo que más cuesta es tener consciencia de todo", señala. Porque una de las cosas que más le duelen es comprobar lo mucho que se espera de él. "Me molesta que me digan que puedo hacer muchas cosas buenas. Yo me pregunto a mí mismo: ¿y por qué no las hago?".

La mala racha de Gomes poco tiene que ver con su actuación años atrás en el Valencia. En verano de 2016 fue cuando pasó a formar parte del Barcelona por 35 millones de euros. "Dadas las expectativas y las posibilidades que el Barcelona ha visto en el jugador, excepcionalmente, ha acordado incluir un premio especial de un máximo de 15 millones de euros en el caso de que llegase a ser Balón de Oro", se pronunciaron entonces desde el club azulgrana. De momento, Gomes parece lejos de conseguirlo.

Mertesacker: "Cada mañana tengo diarrea"

Gomes no es el único futbolista atormentado. Per Mertesacker, el jugador del Arsenal, también admitió hace poco tener problemas para llevar la presión antes de cada partido. "Mi cuerpo está roto y ya no me gusta jugar", confesaba al diario 'Der Spiegel'. "Ahora mismo en el Arsenal prefiero estar sentado en el banquillo".

Mertesacker, de 33 años, aseguraba incluso que le entran náuseas antes del pitido inicial de cada partido. "Una vez tragué tan fuerte la bilis que los ojos me lloraban", explicaba. "Por la presión y las expectativas que tiene la gente, vomito antes de los partidos o tengo diarrea".

"Claro que soy consciente de que los futbolistas tenemos privilegios, pero llega un momento en que te das cuenta de que es una carga física y mental, de que ya no disfrutas, sino que simplemente tienes que rendir", continuaba. Mertesacker, que lleva desde 2011 en el Arsenal, contaba incluso que se sintió aliviado cuando Alemania fue eliminada en el Mundial de 2006. "Todos piensan que una baja por lesión es un drama", incidía. "Pero solo así puedes descansar un poco".