Un juez brasileño ordena a la FIFA dejar de utilizar el espray para las barreras

En la Copa del Mundo de Clubes que terminó este sábado en Abu Dabi (Emiratos Árabes Unidos), como en cada competición organizada por la FIFA desde 2013, los árbitros utilizaron el espray para marcar la distancia a la que debe colocarse la barrera en una falta. El mismo espray que un tribunal brasileño ha ordenado al máximo organismo del fútbol mundial dejar de utilizar esta misma semana por no respetar la patente.

Un tribunal de Río de Janeiro le acaba de dar la razón en primera instancia a Haine Allemagne, el brasileño que creó el espray a principios de siglo. En la sentencia, que es recurrible, el tribunal ordena a la FIFA que cese el uso del producto en todas sus competiciones o se arriesga a una multa de 15.000 dólares (12.800 euros) por partido, informó 'The New York Times'.

Uso generalizado desde 2014

El espray permite a los árbitros dibujar en el césped una línea para marcar la distancia de 9,15 metros a la que debe situarse la barrera. Apenas un minuto después, la espuma se desvanece. Allemagne dice que tardó muchos años en desarrollar el invento, hasta que se asoció con el argentino Pablo Silva a principios de siglo y lo registraron bajo el nombre '9.15 Fair Play Limit' (esta es su web). En el año 2000 empezó utilizarse en Brasil y pronto se extendió por todo el fútbol sudamericano.

Más de una década después, en marzo de 2012, la International Board, organismo encargado de modificar el reglamento del fútbol, aprobó su uso por parte de cualquier confederación, federación y liga. A partir de ahí el espray se extendió. Empezó a utilizarse en la MLS y la FIFA lo probó en varias competiciones en el año 2013, como la Copa del Mundo sub-20 celebrada en Turquía y la Copa del Mundo de Marruecos.

Su instauración definitiva llegó tras su uso en la Copa del Mundo de Brasil 2014. Después de ese campeonato su uso ya fue generalizado en las competicione de la UEFA y las ligas europeas. En la LaLiga se implantó en la temporada 2014-2015.

Reclama 100 millones

Según expone 'The New York Times', la FIFA intentó comprar la patente a comienzos de 2014, pero su oferta de 500.000 dólares no fue aceptada por la empresa de Allemagne y Silva, que sin embargo accedió a ceder 300 botes para la Copa del Mundo de Brasil. Pero tras el campeonato la FIFA cambió de postura y descartó la idea de llegar a un acuerdo. Desde entonces pelean con la FIFA, que niega la existencia de la patente.

"Como padre de la invención es un disgusto muy grande parar algo en lo que invertí 15 años de mi vida", declaró en Allemagne al diario argentino 'Clarín' en agosto, justo antes de presentar la demanda en Brasil, donde está registrada la empresa.

En ese mismo medio Allemagne afirmó que todo cambió tras la muerte en julio de 2014 de Julio Grondona, presidente de la Asociación del Fútbol Argentino y vicepresidente de la FIFA. Según su versión, antes del fallecimiento del argentino la FIFA se había comprometido a gastar 40 millones de dólares en esprays.

Allemagne pide, además del reconocimiento por parte de la FIFA, 100 millones de dólares (85 millones de euros) por daños. De momento ha conseguido que el juez le haya dado la razón y haya reconocido su patente en 44 países.