De Neymar a Oblak: el frenético desenfreno del emir de Qatar

La histórica remontada sacó los colores al multimillonario club. Cuando unos días antes todo eran loas y alegría desbordada, tras un contundente 4-0, el París Saint Germain mordía el polvo en el Camp Nou. Un humillante 6-1 que zarandeó las estructuras del club francés. Aquella noche empezaron a cambiar muchas cosas, algo que se ha comprobado perfectamente este verano. El emir de Qatar se hartó de ver cómo su club no brillaba en la Champions y cambió la historia del fútbol moderno soltando 222 millones de euros para comprar a Neymar. Y luego Mbappé. Y no, no va a frenar. Para un futuro próximo, una pieza a cazar es Jan Oblak. Casi una obsesión.

El PSG llegó a la conclusión de que no es suficiente con contratar buenos futbolistas, que los tiene desde hace años. Para alcanzar la excelencia, ganar la Champions League, necesita de futbolistas de otra categoría. Con el fichaje de Neymar ha pasado a otra dimensión, pero todavía quedan escenarios por reforzar, empezando por la portería, donde por el momento no aparece un elemento de primer nivel. Lleva el club francés detrás de Oblak desde hace mucho tiempo, que conoce de sobra el interés del emir por contratar sus servicios. Este verano se ha asociado al esloveno con el PSG, pero el momento de la verdad no ha llegado todavía.

El guardameta del Atlético de Madrid lanzó un claro mensaje este pasado miércoles. Afirmó que esta temporada continuará vestido de rojiblanco y que cuando finalice, ya se verá qué sucede. "Nunca se sabe qué puede pasar, las cosas cambian de un día para otro a veces", dijo el jugador. "Estoy feliz en Madrid, pero ya se verá lo que pasa al acabar la campaña", remató ante los medios de comunicación de su país. Es el primero en tener claro que su cotización se ha disparado en los últimos tiempos y que en otro lugar, sobre todo en París, cobraría infinitamente más que vestido de rojiblanco.

Unai Emery

Durante este pasado verano se especuló con una ofensiva total del PSG sobre Oblak, que finalmente se quedó en nada. Pero el plan de incorporar a Oblak dentro de un año sigue vigente. Nasser Al-Khelaifi, el presidente del PSG, sabe que tiene un mandato que es reforzar la portería del equipo con un guardameta top. Es orden directa de Tamim bin Hamad Al Thani, el emir y el que diseña la estrategia, también el que pone los millones sobre la mesa. Tras el desembolso por Neymar, toca equilibrar las cuentas, cumplir con la ley del 'fair play' financiero. Por ello alguna operación se ha retrasado un año, empezando por la de Oblak.

Con 100 millones estipulados en la cláusula de rescisión del gigante esloveno, el Atlético de Madrid quiere blindar todavía más a uno de sus pilares más importantes. Al menos, elevar la cantidad para sacar más tajada llegado el momento, pues el PSG ya ha demostrado que no va a vacilar cuando haya que aflojar la billetera. El panorama ha cambiado y ya cualquier jugador de la categoría de Oblak ve cómo su precio de mercado ha subido de manera notable después de lo que ha sucedido con Neymar hace unas semanas.

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Prácticamente sentenciado, cosa que tenía asumida, tras aquel sonrojante 6-1, parece haber ganado peso Unai Emery, que es el primero que tiene claro que le faltan piezas para rematar una buena obra. Así lo ha manifestado en una entrevista concedida a 'So Foot'. El técnico relata que "el PSG gana normalmente, pero le faltan siempre pequeños detalles en los momentos importantes. Son detalles que hay que trabajar con jugadores experimentados, hay que trabajar el aspecto metal". "Si quieres continuar conmigo, debes escucharme y hacer algunos cambios, empezando por el director deportivo", reconoce que le dijo en su día a Nasser Al-Khelaïfi. Y cayó Patrick Kluivert. Sí, algo ha cambiado, el equipo se ha reforzado poderosamente, pero a Emery le falta un portero y Oblak es perfecto para terminar de rematar el millonario y reluciente puzzle.