La renovación de Sergio Ramos es un hecho

Si no surge nada imprevisto, en próximas fechas -posiblemente el próximo lunes- tendrá lugar el acto en el que se escenificará la mejora y prolongación de contrato de Sergio Ramos. El central sevillano firmará uno nuevo que se extendería hasta junio de 2020, con una sustancial mejora en sus emolumentos. El jugador no se sentía valorado por el club y el presidente del Real Madrid ha tenido que ceder a las pretensiones de del futbolista.

Cuando Casillas salió de aquella manera y gritos de '¡Florentino, dimisión!' se escucharon en las gradas del Santiago Bernabéu, el mandatario blanco tuvo claro que debía ceder ante las pretensiones de Sergio Ramos. Héroe de la Décima y primer capitán en la actualidad, Florentino Pérez, que llevaba dando largas al asunto largo tiempo, se acercó al jugador en China -donde el equipo disputó dos amistosos- y allí se edificaron las bases del acuerdo definitivo.

El jugador ha sido tocado por algún club en los últimos tiempos, pero ninguno puso de verdad los argumentos necesarios como para que la salida de Sergio Ramos estuviera cerca. El Manchester United y el Bayern hicieron algún movimiento, pero en las oficinas del Santiago Bernabéu se vieron obligados a acelerar porque desprenderse de un icono de la grada podía generar una revolución en la masa social.

La sombra de Casillas

Sergio Ramos, al que llegaron a sus oídos más de una vez los poco elogiosos comentarios que le dedicaba en privado Florentino Pérez, pensó en su momento que abandonar el Real Madrid era la mejor solución. El futbolista no estaba dispuesto a convertirse en otro 'caso Casillas' y de ahí su distanciamiento con Florentino Pérez. Por momentos la situación se hizo insostenible, con dos partes enfrentadas abiertamente.

Con las condiciones del nuevo contrato, Ramos alcanzará esos 10 millones de euros netos que pretendía ganar. Estima que sus emolumentos no se correspondían con lo que ha dado, y sigue dando, y quería estar a la altura de los centrales mejor pagados del planeta. Su actual contrato finaliza en 2017 y se había quedado desfasado según ha estimado siempre el interesado, al que en su momento se transmitió que se mejoraría sustancialmente, cosa que sucederá ahora.